Donald Trump “le Tuerce el Brazo” al Mandatario Colombiano Gustavo Petro, en Cuestiones
de Deportados
WASHINGTON D.C. USA y BOGOTÁ, Colombia-En un alarde de falso patriotismo o demagogia política, el presidente colombiano, Gustavo Petro, devolvió dos aviones militares estadounidenses que pretendían aterrizar en el aeropuerto internacional bogotano. El argumento esgrimido por Petro, a todas luces demagógico, se fundamentó en que “mis compatriotas han sido tratados de manera inhumana por las autoridades de migración de los Estados Unidos, (porque) vienen esposados en la cintura, pies y manos, dentro de los aviones del ejército estadounidense.” Palabras más, palabras menos, eso mencionó Petro, quien, paradójicamente, no hace muchos años atrás, estaba poniendo bombas de alto poder destructivo allí donde a él y sus guerrilleros urbanos se les ocurriera y con los estallidos, asesinaron a gran cantidad de colombianos y en esos aciagos momentos, no le importó el tema humanitario… pero ahora que el pueblo cometió el error de llevarlo a la presidencia, en esas situaciones políticas inexplicables que se dan en América latina, el maltrato a los connacionales por las autoridades migratorias norteamericanas, parece haberle “tocado a Petro su arteria humanista” que durante tantas décadas ha estado acallada, sino ausente.
De manera textual escribió en su cuenta de X: “Desautorizo la entrada de aviones norteamericanos con migrantes colombianos a nuestro territorio. EE.UU debe establecer un protocolo de tratamiento digno a los migrantes, antes de que los recibamos nosotros.” Y en el seno del Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, alguien escribió al pie del comentario anterior de Petro: “Cuidado, Trump está más loco que Maduro.”
Sin embargo, no se dio cuenta Gustavo Petro que estaba jugando, literalmente, con esos pobres pasajeros recién deportados desde la Unión Americana y que, al devolver los aviones a su lugar de origen, iba a prolongar su encadenamiento en manos, cinturas y pies y evitar que se produjera el aterrizaje en el país natal. Una especie de “impasse” o de tortura psicológica para esas personas, quienes, además de la humillación al ser esposadas y engrilladas, sintieron la incertidumbre por no saber qué estaba pasando ciertamente. Aparte del hecho de que Petro es el menos indicado, por razones de moralidad, para hablar de maltrato inhumano, por las razones que hemos señalado al principio de este reportaje.
En todo caso, la tensión ya estaba en el aire entre los dos gobiernos y sólo quedaba romperla y retornar al estado normal de las cosas.
Los asesores aconsejan al presidente de Colombia
Gustavo Petro estaba decidido a enfrentarse con Washington, así, con todas las falencias que tienen los gobiernos suramericanos; pero funcionarios de la Cancillería le aconsejaron deponer esa actitud que, además de ridícula, era también inhumana con los deportados al hacerlos viajar de un lado hacia el otro, sin un destino seguro. “No tiene sentido seguir la escalada verbal contra el impredecible y errático inquilino de la Casa Blanca”, fue lo que le aconsejaron a Petro, quien también, indudablemente, además de demagogo que aboga por la humanidad y el buen trato de sus compatriotas, les estaba infringiendo mayores molestias al no permitirles aterrizar en ninguna parte. Y en lo que estriba a las cadenas o esposas que les pusieron en los Estados Unidos, no podía ser de otro modo, pues, si no hubiesen viajado esposados, muy probablemente se hubiesen lanzado contra sus vigilantes y las tripulaciones de los aviones y los hubieran atacado con la consiguiente problemática abordo. Se nota en el mensaje redactado por el mandatario colombiano, la ligereza con la cual prestó atención a este delicado asunto, sin prever lo que pudo ocurrir con los migrantes devueltos a Colombia, justamente por estar en situación irregular en los Estados Unidos.
En todo caso, el ministro de Exteriores colombiano, Luis Gilberto Murillo y sus asesores, se pusieron prestos a trabajar en este diferendo con el principal socio comercial o el principal mercado para los productos de esta nación suramericana. Horas antes, Petro preguntó cuáles fueron las reacciones de los presidentes de Brasil y México en una situación parecida a la suya y en el caso de Luiz Inácio Lula da Silva, permitió que aterrizara un avión con deportados brasileños, pero envió una nota de protesta después a la Casa Blanca, porque “los inmigrantes habían llegado con esposas en pies y manos, como si fueran terroristas.” Volvemos a la misma tesis que hemos escrito en las líneas de arriba: si hubiesen viajado con las manos y pies libres, habrían causado un accidente aéreo con toda seguridad, al atacar a los pilotos y sobrecargos. De hecho, al mantenerse ilegales durante tanto tiempo; es decir, al margen de las leyes estadounidenses vigentes, ese hecho les dio estatus delictivo sin duda alguna y fueron tratados como tales, de acuerdo también al procedimiento policial vigente.
Sin embargo, es oportuno destacar un dato importante: esas mismas situaciones no han comenzado con Donald Trump, pero el ruido, el bullicio que acostumbra este republicano es lo que lo ha diferenciado de su antecesor en el cargo, Joe Biden, quien siguió con las deportaciones que se han estado implementado desde los gobiernos consecutivos del también demócrata, Barak Obama. “Esta situación se prolonga desde la Administración Biden y todo está recogido en unos protocolos que firmó el mismo Petro. Ese trato digno que ha exigido Petro, ya está reflejado por escrito.” Le explicaron desde el Ministerio de Relaciones Exteriores con sede en Bogotá. Obviamente, Gustavo Petro no se acordaba de tales enunciados, de tales firmas, de tales deportaciones ni de tales situaciones con los inmigrantes; por ello, su enojo llegó hasta la Casa Blanca y generó la agria y violenta respuesta de Donald Trump en este sentido: de inmediato ordenó imponerle a los productos colombianos un arancel del 25 por ciento y revocarle los visados a todos los miembros del gobierno o del Gabinete de Gustavo Petro. En otras palabras, dejaba a Colombia, a sus productores/exportadores y a su pueblo, colgando con el abismo a sus pies, pues los Estados Unidos significan el punto de llegada de casi todo lo que se produce en Colombia y las ganancias económicas para la sociedad colombiana. Petro se había puesto la soga en su propio cuello y sólo hacía falta que Trump la ajustara y ejecutara su ahorcamiento financiero y político. De paso e indirectamente, el mensaje que envió Donald Trump al resto de gobiernos latinoamericanos, fue de contundencia, en el sentido de que está presto a echar mano a cualquier medida coercitiva a aquellos que se opongan a sus políticas anti-migratorias.
Fiel a su naturaleza terrorista que subyace en el alma de Gustavo Petro, creyó conveniente presentarle batalla a Trump y redactó una ingente cantidad de mensajes en X, en los que insinuó que el presidente de los Estados Unidos estaba urdiendo un golpe de Estado en su contra y se erigía como el único líder de las izquierdas latinoamericanas capaz de presentarle batalla al norteamericano. Otra vez el oportunismo y la demagogia de poco cuño, afloró en la superficie de Petro. Llamó a Trump fascista, citó a Salvador Allende, quien fue bajado del poder en Chile por la administración de Richard Nixon; mencionó a Simón Bolívar, al poeta Walt Whitman y Noam Chomsky, entre otros personajes, para fundamentar su “escaramuza” verbal contra Donald Trump. Añadió que “viajar a los Estados Unidos es un poco aburrido”, refiriéndose a la suspensión de los visados para él y sus ministros y el colmo fue cuando argumentó: “En una ocasión presencié en Washington una pelea entre negros y latinos con barricadas y me pareció una pendejada porque deberían unirse.” También agregó que “Colombia es el corazón del mundo y yo soy uno de los últimos Aurelianos Buendía (el personaje heroico de Cien años de Soledad, la novela del también comunista Gabriel García Márquez). Quizás el último.” Aseguró.
Era evidente que el mandatario de Colombia estaba anteponiendo su orgullo, su innata violencia que es reconocida en todo el país, a los intereses de los productores, industriales y exportadores colombianos. Mientras tanto, altos funcionarios de su gobierno guardaban la calma y el momento propicio para hacerle entrar en razón, porque una guerra comercial con los Estados Unidos tendría un impacto muy grande en la economía de esta nación de América del Sur. “Un lujo que, a año y medio del final de su mandato, el presidente no se podía dar”, explicó un dignatario de la Casa de Nariño, sede del gobierno de Colombia.
El problema, por lo tanto, radicaba en hacerle ver a Petro su equivocada manera de proceder frente a Donald Trump y que reconociera y así le hiciera ver al norteamericano, que todo se trataba de un malentendido que se debía resolver por la vía diplomática. Pero Gustavo Petro seguía empecinado en decir a sus más cercanos colaboradores cosas como estas: “La Casa Blanca ha provocado el caos y la muerte con sus conflictos armados en otros países.” O sino, su crítica ácida hacia lo que él llama “la guerra contra las drogas que inició Richard Nixon”; y en el caso de Donald Trump, “usa políticas fascistas que denigran al ser humano, sobre todo a los latinos:” Y le remató diciéndole. “Yo no estrecho mi mano con esclavistas blancos.” Es decir, Petro echó mano a toda la retórica cansina, desgastada, agresiva y repetitiva de las décadas de los 50, 60, 70 y 80, propia de los marxistas-leninistas alrededor de aquel mundo bipolar y que los comunistas de hoy tanto tienen en remembranza nostálgica.
En todo caso, sus asesores comenzaron a sentirse muy nerviosos y preocupados y alguno de ellos musitó, apenas perceptiblemente ante los oídos de sus compañeros: “Petro parece que acaba de pulsar el botón nuclear,” debido a lo grotesco de sus palabras y porque ningún otro líder de ningún otro país, se había dirigido nunca en ese tono contra Donald Trump. Mientras tanto, el amargo periplo seguido por los dos aviones militares estadounidenses, atestados de indocumentados colombianos, tocaban nuevamente los aeródromos en los Estados Unidos. El gobierno colombiano les había prohibido aterrizar en Bogotá y con ello, se desencadenaba la peor crisis entre las dos naciones en toda su historia. De inmediato, las órdenes, en represalia, de parte de la Casa Blanca, ya habían entrado en vigencia, porque a un funcionario del consulado de Colombia en Houston, se le prohibió viajar desde Sao Paulo, Brasil, debido a la revocatoria de su visa de ingreso a los Estados Unidos; y a otros dos empleados del Banco Mundial, con visa G4, un tipo de visado especial para diplomáticos, no les permitieron viajar a Washington. Naturalmente, la emoción que se desprendió de aquello, fue de pánico generalizado entre los embajadores, cónsules y funcionarios de las distintas legaciones; pero lo peor estaba por llegar del lado de Petro y fue cuando perdió por completo la dimensión de su realidad al compararse con el poderío de los Estados Unidos y ordenó elevar también al 25 por ciento los aranceles a los productos estadounidenses y pidió a todos los estadounidenses irregulares que supuestamente están ahora mismo en Colombia (unos 15,600), para que regularicen su situación con las autoridades migratorias. Con esto, Gustavo Petro creyó que sacaba “su espada” imaginaria y se enfrentaba “de tú a tú” con su odiado enemigo en la Casa Blanca. Es decir, perdió de vista la noción real y verdadera de que Colombia, en ningún aspecto, puede equipararse ni competir con los Estados Unidos.
Empero, al decodificar la peligrosa situación en la que se había metido (y causado) Petro, los que más nerviosos estaban eran los ministros y asesores del presidente colombiano; de tal modo, acordaron reunirse de urgencia con él, para clarificarle, hacerle ver el desajuste político y financiero que había causado con la Casa Blanca y se dejara de una vez y por todas de insultos y amenazas a Trump. Esa misma tarde de la reacción furibunda del mandatario estadounidense, se reunieron en la Casa de Nariño, Gustavo Petro con el Canciller Murillo, Laura Sarabia, número dos del Gabinete presidencial; y Jorge Rojas, hombre de mayor confianza del mandatario y embajador en la Capital de los Estados Unidos. Describieron, después de esta reunión, que el presidente de Colombia estaba visiblemente turbado, preocupado, meditativo… Parece que se estaba percatando apenas de la gran crisis que había causado y procedieron a explicarle con detalle cómo funciona el tema de las deportaciones en USA y cuál es el protocolo a seguir. Le convencieron de que no era necesario abrir una crisis diplomática con Washington y que bastaba solamente con pedir a Trump que se cumpliera con lo que ambos gobiernos habían firmado en el pasado reciente. Le hicieron ver asimismo, que aquel que le informó en un primer momento, no le había enseñado el panorama completo. Mientras tanto, afuera, la élite política y económica del país le reclamaba a Petro por haber creado la crisis, que, a todas luces, era innecesaria y puso en riesgo, en grave peligro, la estabilidad del país.
En otro sector de Colombia, los recalcitrantes y trasnochados comunistas de siempre, aplaudían a “su amigo” por haberse enfrentado con un mandatario racista, en el caso de Donald Trump, y abusador, quien habíale respondido agresivo a su petición de que tratara con humanidad a los deportados. Un corresponsal de un diario español, envió la siguiente descripción a su periódico: “La tormenta se desató afuera, pero no en el seno de la Administración Pero. En ese momento ya sabían que no tardarían más de un par de horas en arreglar la situación.” Fue cuando el canciller Murillo se contactó con Marco Rubio, el Secretario de Estado de Trump y con Mauricio Claver-Carone, un veterano halcón de la política exterior de USA, nombrado ahora enviado especial para América Latina; así también hicieron llamadas a algunos congresistas y personas cercanas a Trump, para que mediaran en favor de Colombia y se retornara al camino sensato de las cosas. A las 9 de la noche de ese mismo día y tras una larga y tensa espera en Bogotá, sonó el teléfono y se puso al habla el Ministro de Exteriores colombiano. Al otro lado de la línea hablaba Marco Rubio y dijo que el presidente Trump daba por zanjado el asunto y no pondría sanciones; pero el gobierno de Colombia debería hacer un comunicado dejando claro que había aceptado todas las exigencias de Trump para llegar al acuerdo logrado. Por su lado, la Casa Blanca emitió su propio comunicado en el cual aseguró: “Colombia ha aceptado todos los términos del presidente Trump, incluida la aceptación sin restricciones de todos los extranjeros ilegales de Colombia que regresen de los Estados Unidos, incluso en aeronaves militares estadounidenses, sin limitaciones ni demoras.” Todos en Nariño respiraron con satisfacción. La tensa calma se había alejado y dieron ganas de destapar algunas botellas de champagne, sin embargo… no se atrevieron a celebrarlo. Quizás porque a Gustavo Petro, el eterno comunista, Donald Trump le había doblado el brazo como los Estados Unidos siempre lo hicieron con los soviéticos, los cubanos marxistas y ahora los venezolanos con la narco-dictadura que practican. En Bogotá, no había motivo para sentirse exultantes, aunque sí tranquilos…
Criminales hallados en USA hacia Base en Guantánamo
Y mientras Google Maps llamaba casi de inmediato a la toma de posesión presidencial de Trump, al Golfo de México… Golfo de América e irritaba al chauvinismo consabido de los mexicanos, las miradas se trasladaban de Colombia a la isla de Cuba, en el Caribe. Un nuevo foco de tensión estaba por abrirse y el presidente de los Estados Unidos estaba también protagonizándolo. Por supuesto, la dictadura cubana, encabezada por Miguel Díaz-Canel, que no es otra cosa que una marioneta de Raúl Castro, el verdadero dictador entre telones, sintió repentinamente un síndrome que la sacaba de su modorra, ya que la intención de Trump es la de habilitar un centro de detención en la Base Naval que los Estados Unidos administran en la Bahía de Guantánamo, para enviar allí a “los peores inmigrantes ilegales, criminales, que son una amenaza para el pueblo estadounidense. Algunos son tan peligrosos, que ni siquiera confiamos en sus países de origen para que se los queden, porque no queremos que regresen. Así que los enviaremos a Guantánamo.” Dijo Donald Trump desde la Oficina Oval, en la Casa Blanca.
Haciendo un poco de historia contemporánea, recordemos que allí han estado detenidos haitianos y cubanos que han sido interceptados en alta mar en barcazas y cuya intención era llegar a las costas de los Estados Unidos; también fueron a parar a esa Base militar, los islamistas que el ejército norteamericano capturó durante su invasión a Afganistán y que pertenecían al grupo al Qaeda, de Osama bin-Laden, especialmente después de la voladura con dos aviones Boing de pasajeros, del World Trade Center o Torres Gemelas, en Nueva York, aquel 11 de septiembre del 2001.
El plan ideado supuestamente por Trump o alguno de sus asesores, estriba en enviar a Cuba un máximo de 30,000 migrantes; aunque muchos analistas de la situación actual, creen que ello no va a resolver el problema, menos si se piensan en los 10 millones de migrantes ilegales que hoy en día yacen en los Estados Unidos; y piensan que lo que realmente pretende el mandatario norteamericano es enviar un mensaje a todas aquellas personas que quieren viajar a la Unión Americana y para eso se les dice subliminalmente: “Si vienes, corres el riesgo de que te enviemos en condición de prisionero a Guantánamo.” Se trata más bien, de una amenaza velada…
Algunas organizaciones de derechos humanos indican que los detenidos y enviados a la Base Naval, podrían caer en una especie de limbo legal y así lo razonan: “En el pasado, se ha argumentado que en Guantánamo, como no está ubicado en Estados Unidos, no serían aplicables todos los derechos y garantías estadounidenses. Esa fue una de las fuentes de violaciones de derechos de personas detenidas en Guantánamo, en otros contextos. En este momento hay más preguntas que respuestas sobre qué es lo que pretende y cuáles serían, supuestamente, las bases legales para este tipo de acción completamente fuera de lo normal.” Así según la experta en esta materia, Stephanie Brewer. Y para Ariel Dulitzky, existen dudas en relación con la presunción de inocencia y el debido proceso, porque, en su criterio, “no hay abogados en la Base Naval de Guantánamo y las restricciones para entrar en una Base Naval son mucho más grandes que en otros lugares de detención. Entonces, el acceso a la defensa jurídica va a ser mucho más difícil. Todo esto hace también más difícil el acceso de la prensa y el control de cómo son las condiciones de detención. Esta es una Base Naval controlada por las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, no por los agentes civiles. No está claro quién va a tener el control de la detención de los inmigrantes que sean enviados allí, de modo que podrían quedar bajo control militar, pese a que son civiles. Eso nunca debería suceder, de acuerdo con el derecho internacional y los derechos humanos.” Asegura.
En otra “cara de la figura” de las deportaciones, las dictaduras infrahumanas de Nicaragua, Cuba y Venezuela, plantean otra problemática para Donald Trump y sus funcionarios, porque son sistemas herméticamente cerrados a toda exigencia, iniciativa y presión de parte de las naciones occidentales, principalmente de los Estados Unidos. En otras palabras y en específico con este tema de las deportaciones, no están abiertos a recibir a los ilegales nacidos dentro de sus fronteras y prontamente expulsados del territorio norteamericano. No obstante, hay quienes dicen que el mandatario Trump está barajando otras opciones. ¿Cuáles serán?
Los analistas internacionales indican que Trump dispone a su haber de medidas de presión, como la Sección 243 (d), de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA), que permite al Ejecutivo suspender todas las visas a los nacionales de esos países recalcitrantes y declarados enemigos de los Estados Unidos; y se les podrían sumar otras medidas que ya fueron implementadas contra Colombia, fundamentadas en las amenazas de subir los aranceles a sus productos o recortes de ayudas económicas, presión política y otras. Pero en los casos de Nicaragua, Venezuela y Cuba, todo eso lo experimentan de parte de la Casa Blanca casi todos los días y no dependen en demasía de lo que haga o dejen de hacer los estadounidenses y que los toquen a ellos, sus némesis, directamente. Para esos mismos analistas, como en el caso de Ariel Ruiz, del Instituto de Política Migratoria (MPI; por sus siglas en inglés): “Todos los países deberían aceptar el retorno de sus connacionales, pero la estrategia del presidente Trump de imponer sanciones o aranceles para que otros gobiernos acepten deportaciones, no funcionará de la misma manera que sucedió con Colombia. Los gobiernos de Nicaragua, Cuba y Venezuela, no dependen tanto del comercio y los tratados con los Estados Unidos, como dependen Colombia y México. Incluso, aumentar las sanciones, podría ser contraproducente, pues podría agudizar las condiciones económicas que ya son muy difíciles para los pueblos de estos países y, por ende, hacer que más de ellos decidan emigrar.”
Empero, Trump ha pensado, según ha dejado ver ligeramente, que México podría ser el tercer destino de esos indocumentados; pero la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, ha mencionado que no permitirá que ese escenario se concrete; aunque en la Casa Blanca siguen con la idea fija de enviarle a los 42,084 cubanos, 45,995 nicaragüenses y 22,749 venezolanos, atrapados por la policía migratoria de los Estados Unidos y que tienen órdenes de deportación pendientes por cumplir. Posiblemente algunos incentivos o “premios” de parte de la administración estadounidense al gobierno de México, para que reciban a esas personas, podría ser el acicate para que los mexicanos los acepten con cierto agrado. Pero todavía no está claro qué tipo de incentivo podría satisfacer a México y su gobierno.
Si hacemos un breve repaso de lo que ha acontecido en materia de deportaciones, los aviones militares han aterrizado ya en Guatemala, México, Brasil y Colombia, llevando en sus interiores a decenas de emigrados que carecían de documentación que los acreditara legales en USA; pero, aritméticamente, las cifras no cierran a favor de los Estados Unidos, ya que Donald Trump estará en el poder solamente cuatro años (si no piensa en un golpe de Estado), y ese tiempo no le alcanzará para deportar a más de 10 millones de indocumentados, mucho menos si tiene que lidiar con los tribunales internos en algunos Estados de la Unión, organizaciones religiosas y de derechos humanos, que ya han comenzado a presentarle obstáculos y batallas.
Y para escribir un intento de conclusión, reproducimos las palabras de Facundo Robles, coordinador del Programa para Latinoamérica del Wilson Center, quien dijo: “Estas estrategias pueden disuadir a corto plazo a algunos migrantes, pero no abordan las causas fundamentales de la migración, como la persecución política, la falta de oportunidades económicas, el cambio climático o la inseguridad alimentaria. Una respuesta integral debe incluir tanto medidas de seguridad fronteriza, como programas que fomenten la estabilidad y el desarrollo en los países de origen.” Ese es el quid del asunto. El punto medular de la problemática, porque, para nombrar unos pocos ejemplos, un haitiano no emigrará cuando haya en su país riqueza, fuentes de empleo y seguridad ciudadana; un guatemalteco y un hondureño no emigrarán, cuando hayan fuentes de trabajo, buenos salarios y seguridad en sus países de origen; un cubano, un venezolano y un nicaragüense no emigrarán, cuando las respectivas narco-dictaduras que avasallan a sus pueblos, desaparezcan; y los Estados Unidos representan todo lo que en sus sueños más caros han visto y desean; aunque la verdad señala que a Donald Trump sólo le interesa expulsar ilegales, sin pensar que los sitios adonde los enviará no les ofrecerán ni lo mínimo para vivir sus vidas dignamente.
Bashar al-Assad, Dictador de Siria, ha sido Depuesto del Gobierno. No Hay Certeza sobre la Naturaleza de los Golpistas
DAMASCO-La partida de al-Assad hacia el exilio, tras el final de la dictadura que comenzó su padre Hafez al-Assad, resulta increíble desde todo ángulo en el que se analice. Su abandono del poder da la impresión de que se debió “al cansancio”, al hastío, al hecho de gobernar sobre un país en ruinas, sin la ayuda de ninguna potencia capitalista para reconstruirlo y en una guerra constante contra varios grupos distintos que quieren gobernar a esta nación. Porque su partida al exterior, junto a su esposa e hijos, sin disparar un solo cartucho y tampoco haber dirigido ningún discurso a su pueblo en el que intentara insuflar valor y oposición a las fuerzas rebeldes, demuestra que Bashar al-Assad había perdido el interés en seguir gobernando.
Además, resultó victorioso en una guerra que se prolongó a lo largo de 13 años contra fuerzas enemigas todavía más poderosas que los rebeldes de hoy en día, que estaban compuestas por el supra-criminal Estado Islámico (Daesh o Isis), que llegó a apoderarse de más de la mitad de Siria; y también sostuvo enfrentamientos contra tropas de los Estados Unidos, siempre dispuestas a derrocarlo, lo mismo que los israelíes, quienes bombardeaban con regularidad al territorio sirio. Pero, ahora, en 12 días de avance sobre el terreno de los insurgentes que le han depuesto, al-Assad ha resultado derrocado sin su habitual voluntad por preservar el poder y luchar por él.
En otros términos, al-Assad se enfrentó a enemigos de cuidado, muy poderosos y criminales y no sólo los derrotó, sino que los exterminó y se mantuvo fuerte en el poder; pero ahora ha resultado todo tan inaudito, tan inesperado y tan fácil para los rebeldes que dio la impresión de que se trataba de otro dictador, de otra persona y no del que habíamos visto combatiendo a la cabeza del ejército sirio.
El tablero político y militar había cambiado
Cuando Bashar al-Assad decidió viajar, desesperado, a Moscú, Rusia, para pedirle a su amigo Vladímir Putin ayuda para sacar de Siria al Estado Islámico (Daesh), el ruso respondió de inmediato y comenzaron los bombardeos en distintos sitios geográficos contra los yihadistas asesinos que se habían apoderado de un territorio del tamaño de las islas británicas, en suelo Iraquí y sirio. Evidentemente eran otros tiempos, todavía no muy lejanos, y los rusos aparecían en el horizonte como una potencia militar mundial, antes de que el conflicto en Ucrania desnudara sus verdaderas falencias y que les ha mostrado como pésimos soldados, pésimos organizadores, pésimos estrategas y un ejército desmotivado moralmente y con pertrechos de guerra de pésima calidad.
Pero en aquellos días de la lucha contra el yihadismo del Daesh, los rusos cumplieron sobradamente, y si no hubiese sido por ellos, Siria e Irak estarían, ahora mismo, en manos del EI o Isis. Quizás ese “espejismo”, esos éxitos sobre el terreno del teatro de guerra, le hicieron creer a Putin que eran realmente invencibles, pero como todo espejismo… se difuminó tan rápido como apareció y en Ucrania, los rusos no han estado a la altura de lo que sus admiradores esperaban de ellos, como hemos recalcado insistentemente. Ahora, cuando los rebeldes, aupados muchos de ellos por el gobierno de Ankara, en Turquía, iniciaron la ofensiva en Siria, al-Assad ya no contaba con la voluntad y el beneplácito de Rusia, ya que su golpeado ejército y un Vladímir Putin fuertemente desprestigiado no estaba en condiciones de volverlo a ayudar para expulsar a los rebeldes. Sólo un bombardeo de la aviación rusa fue lo que recibió como respuesta Assad, que no tuvo graves consecuencias para los invasores.
Tampoco su otro aliado, el régimen teocrático de Irán, de los Ayatolas, estaba en disposición de ayudarlo y mucho menos la guerrilla de Hezboláh, concentrada en una encarnizada guerra contra el enemigo de todos… Israel. Lo mejor era, entonces… dimitir, entregar el poder y la mejor manera era hacerlo negociando con los rebeldes, sin mayor derramamiento de sangre del ejército y del pueblo sirio, cansado de tanta guerra y destrucción alrededor y por doquier.
Bashar al-Assad se había ganado la admiración de sus aliados y amigos, luego de haber gestionado exitosamente la guerra contra el Daesh, que duró 13 largos años, y se pudo mantener inclaudicable en el poder; pero esta vez, sin sus socios y colaboradores, apenas pudo mantenerse 12 días. Los ataques no fueron fulgurantes e impresionantes, de parte de las facciones rebeldes: simplemente no encontraron oposición armada de parte del ejército sirio, que se fue replegando en dirección a Damasco.
En tan solo 10 días, los rebeldes habían tomado todo el noroeste de Siria y el golpe final lo iban a dar al rodear la Capital: “Nuestras fuerzas han comenzado la fase final de cercar la Capital, Damasco”, anunció Hassan Abdel Ghani, comandante de la coalición rebelde. Mientras tanto, Ahmed al-Sharaa, líder del grupo islamista Hayat Tahrir al-Sham (HTS), que encabezaba la ofensiva, escribió en su cuenta de Telegram: “¡Damasco les espera!” Tal la seguridad que sentían los altos dirigentes de las milicias.
Este grupo había pertenecido en un momento dado a al-Qaeda, pero decidieron la separación de aquella facción fundada por el famosísimo Osama bin-Laden y en su actividad bélica en Siria, hace pocos días, lograron hacerse con las ciudades de Idlib, Alepo, Hama y avanzaron hacia el sur, donde las tropas rusas y la libanesa Hezboláh, ya no se encontraban en ese sitio específico, debido a sus tareas en los conflictos con Ucrania e Israel, respectivamente. Así, el siguiente objetivo fue Homs, la tercera ciudad más grande de Siria, estratégicamente muy importante porque, de ser tomada, partiría en dos al territorio que compone al país, tal y como ocurrió finalmente. Cuando cayó en manos rebeldes, la conexión con Damasco, al sur de Homs, y las zonas costeras occidentales, que eran el bastión popular de al-Assad, la suerte estaba echada para el régimen sirio que había perdurado por más de 50 años, cuando subió al gobierno Hafez, el padre del dictador que acaba de marcharse hacia Rusia, donde está actualmente asilado.
Con esta nueva situación, el régimen perdió el acceso a casi todos los cruces fronterizos con Líbano, terminando con la red de suministros enviados desde Irán y por la milicia Hezboláh. Y mientras aquello sucedía en Homs, se abría un nuevo frente rebelde en el sur, en la ciudad de Daraa, que fue cuna de las revueltas populares del 2011 y que Bashar aplastó violentamente, mediante el asesinato masivo y el encarcelamiento de miles de alzados durante las protestas. Esta urbe fue tomada en un 90 por ciento, después de que el ejército oficialista la abandonó y se ubicó a 100 kilómetros de distancia.
Y en el Este del país, las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF), lideradas por los kurdos, apoyados y abastecidos por los Estados Unidos, se hicieron con el control de Deir Ezzor, que era bastión del gobierno en el desierto oriental. Allí mismo, además, en las últimas semanas se informó de un resurgimiento del Estado Islámico (Daesh).
Mientras toda esta situación adversa al régimen se estaba presentando, los gobiernos de Rusia, Estados Unidos, Jordania y otras naciones, instaron al personal de sus embajadas y ciudadanos emplazados en Siria, a hacer abandono del país. Este comunicado de la embajada de los Estados Unidos, lo ilustra mejor: “Recomendamos a nuestros ciudadanos que se vayan ahora, mientras siguen existiendo opciones comerciales (aéreas) en Damasco. La situación sigue siendo volátil e impredecible, con enfrentamientos activos entre grupos armados en todo el país.”
Cae Damasco y liberan las prisiones
No habían transcurrido 15 días de la presencia de estos grupos islámicos, cuando Bashar al-Assad había desaparecido del territorio sirio, con destino a Moscú, Rusia, donde le han dado asilo a él y a toda su familia. Los rebeldes tomaron las principales sedes del gobierno y se encaminaron hasta la estación de la televisión oficialista e hicieron llegar el primer mensaje al pueblo que observaba asombrado los acontecimientos, únicos, pues sólo habían conocido una forma de gobierno, regida por la familia al-Assad.
Y mientras dicho mensaje era transmitido, los insurgentes abrieron las celdas donde yacían miles de presos del régimen anterior y aquí precisamente estriba la preocupación de varias naciones occidentales: muchos de esos reclusos pertenecen al Estado Islámico (Daesh), y podrían reforzar las células de esta facción terrorista en las próximas semanas. Se trata de asesinos con una larga lista de crímenes sobre sus consciencias. “Hemos liberado la ciudad de Damasco –dijeron los rebeldes ante las cámaras de la TV-. Ha caído el tirano Bashar al-Assad y hemos liberado a todos los oprimidos de las prisiones del régimen. La Sala de Operaciones de Damasco pide a los ciudadanos preservar las propiedades del país sirio libre. ¡Qué Siria viva libre para todos los sirios en todos sus segmentos.” Anunció un miembro de las fuerzas rebeldes, rodeado por otros ocho hombres vestidos de civiles.
Horas antes, Abu Mohamed al Jolani, el líder de la coalición islámica que ha arrebatado el poder a al-Assad, había proclamado la victoria en un comunicado y acentuó que las Instituciones públicas permanecerán bajo la supervisión de Al Jalani, “hasta que sean entregadas oficialmente.”
En lo que respecta al paradero de Bashar al-Assad, hubo, al principio, cierta incertidumbre acerca de su destino; pero éste se clarificó al segundo día de la caída de su gobierno: recibió asilo en Rusia, de parte de su amigo Vladímir Putin. Por otra parte, el gobierno ruso anunció que entró en conversaciones con los rebeldes en Siria, con el fin de preservar y proteger a sus dos Bases militares en suelo sirio y la respuesta de los líderes rebeldes “garantizaron la seguridad de las Bases militares y las Instituciones diplomáticas rusas en el territorio de Siria.” Lo que sí quedará en “el aire” y tendrá que dilucidarse por parte del Kremlin, será la permanencia de esos enclaves militares en Siria, pues la naturaleza de los nuevos gobernantes es desconocida por todos. Lo más seguro será el abandono de esas Bases, ya que la amistad de Rusia era con la dictadura de los Assad y lo que ha sobrevenido ahora es todo un misterio en el aspecto político.
Retornando a Bashar al-Assad y su familia, arribaron a Rusia e inmediatamente obtuvieron asilo “por razones humanitarias”, de acuerdo a los informes emitidos por las agencias rusas de noticias Interfax, TASS y Ria Novosti. Pero el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia emitió su propio comunicado en el que explica las razones del abandono del país árabe por parte de su antiguo gobernante: “(…) Bashar al-Assad decidió renunciar a la presidencia y abandonar el país, dando instrucciones para llevar a cabo una transferencia de poder de manera pacífica. Instamos a todas las partes implicadas para que renuncien al uso de la violencia y resuelvan todas las cuestiones de gobernanza por medios políticos. Estamos en contacto con todos los grupos de la oposición siria.” Hizo énfasis en que el personal ruso en las Bases en Siria está en alerta máxima, aunque “no existe ninguna amenaza grave para su seguridad.”
El depuesto gobernante sirio, Bashar al-Assad, nació el 11 de septiembre de 1965 en Damasco; y asumió el mando del país en el 2000, al suceder en el cargo a su padre, el famoso dictador sirio, Hafez al-Assad, cuyas estatuas fueron recién derribadas y arrastradas por las calles por los rebeldes, cuando se iban apoderando de las ciudades en su camino hacia la Capital.
Bashar estudió medicina en la Universidad de Damasco, donde se graduó de oftalmólogo en 1988; trabajó como médico en el ejército en un hospital militar de la Capital; y en 1992 viajó a Londres, Inglaterra, para continuar sus estudios. A su regreso a Siria, obtuvo el rango de coronel en la Guardia Republicana de élite. Cuando murió su padre, el 10 de junio del año 2000, Bashar fue nombrado secretario general del partido gobernante y el 10 de julio fue elegido para un mandato de siete años. En el 2007, Assad fue reelegido para un segundo mandato.
A mediados de marzo del 2011, enfrentó las primeras protestas antigubernamentales, con ataques armados provenidos de grupos rebeldes contra el ejército nacional. Luego apareció el Estado Islámico (Isis, EI o Daesh), dentro de la demarcación territorial de Siria e Irak y fue cuando al-Assad solicitó la ayuda militar de Rusia, hasta que los yihadistas fueron erradicados casi totalmente de esta nación de Oriente Próximo.
Su reciente derrota sorprende por la nula resistencia del mismo ejército sirio que derrotó a los yihadistas del Daesh, que eran mucho más poderosos que los actuales rebeldes que han derrocado a al-Assad; sin embargo, era el momento preciso para derrotar a las fuerzas gubernamentales, cuando sus aliados de siempre, los rusos, los iraníes y los combatientes de Hezboláh, están enzarzados en otros conflictos y les era imposible atender a las peticiones de al-Assad. Es decir, desde Ankara, Turquía, gobierno que apoya a los mercenarios que acaban de dar el golpe en Siria, se planeó a la perfección el asalto a Siria, cuando los rusos están ocupados en su invasión a Ucrania, Irán contra Israel, lo mismo que Hezboláh. De ahí la nulidad de la respuesta armada del ejército sirio, el cual se ha rendido sin luchar y Bashar ha salido del país sin exhortar a la defensa de su gobierno ni en mínima instancia.
Al cierre de este reportaje, se desconoce la naturaleza del principal grupo yihadista que se ha hecho con el poder en Siria; tampoco se sabe qué clase de gobierno tendrá esta nación, si será fundamentalista, del corte del Estado Islámico o de los talibanes afganos, y cuál será la relación que tendrá con Occidente: si será amigo de los Estados Unidos y la Unión Europea o seguirá una política propia de confrontación. Por el momento todo es misterio, todo es espera y una gran incertidumbre que se irá dilucidando con el paso de las semanas.
Israel, fiel a su política de depredación de los territorios ajenos, se ha apoderado de la parte de las Alturas del Golán que pertenece a Siria y sus aviones han bombardeado Damasco, el mismo día cuando los rebeldes celebraban su victoria sobre el régimen depuesto. El genocida Benjamín Netanyahu se siente preocupado por la naturaleza de los grupos rebeldes en Siria y no sería extraño verlo ordenar más y mayores ataques a esta nación vecina. Es evidente que este judío no puede vivir sin el olor que desprende la sangre humana ajena derramada.
Por lo pronto, Siria obliga a observar el derrotero de su realidad actual y el curso que llevarán sus nuevos gobernantes.
José Rubén Zamora Marroquín, el Periodista Guatemalteco, Tiene que Regresar
a Prisión
CIUDAD DE GUATEMALA-¡Inaudito! El comunicador y fundador de elPeriódico –ya desaparecido-, José Rubén Zamora, después de que un juez le permitió estar recluido en su propia casa de habitación, ahora tiene que regresar a prisión, en un acto reñido con los derechos humanos y en específico, con los derechos de este ciudadano y profesional guatemalteco. La noticia ha causado conmoción en todo el país y en especial en los defensores de los derechos de las personas, quienes consideran que esa contra-orden judicial de enviarlo otra vez detrás de los barrotes de una celda, representa una violación flagrante de las leyes de la nación y de su propia existencia.
En entrevista con su hijo, José Carlos Zamora, éste arroja luces desconocidas hasta el momento y que en The City Newspaper concedemos a nuestros lectores, para que se enteren del poder que tiene un grupúsculo que se ha adueñado de la Corte de Justicia guatemalteca y que está por encima, incluso, del mismísimo presidente de la República, quien, prácticamente, ha desaparecido o su figura no tiene ningún peso en la Guatemala actual.
“La fiscalía está controlada por una célula criminal”
Esas son las palabras textuales dichas por el hijo del periodista que está preso por haberse enfrentado a los gobernantes de turno en este país centroamericano y que están hasta lo indecible de corrupción. Su “pecado” fue ventilar esos actos corruptos y ahora está pagándoles a esos mafiosos que ostentan el mando, con años cárcel, de manera injusta y violatoria a las leyes guatemaltecas.
En una rueda de prensa acontecida en Londres, Inglaterra, y auspiciada por la organización Reporteros Sin Fronteras, y en medio de un foro dedicado a la libertad de prensa, José Carlos Zamora, hijo de José Rubén, dio declaraciones que ilustran mejor lo que está sucediendo en el interior de Guatemala, en específico en la Corte Suprema de Justicia que ha puesto a su padre en una celda, situada en un cuartel militar.
Han sido dos años y resto de detención arbitraria, en una celda donde no se le permite ver el Sol y sometido a toda clase de torturas psicológicas, como el hecho de que un grupo numeroso de funcionarios de las cárceles entren a mitad de la noche en su encierro, enciendan las luces, hablen en voz alta hasta muy entrada la madrugada, con la finalidad de no dejarlo descansar. Esa revelación la hizo el propio periodista Zamora Marroquín a la cadena televisiva CNN, en entrevista exclusiva desde su casa, antes de que revocaran la “casa por cárcel” y lo enviaran de nuevo al cuartel donde había estado al principio.
Un repaso de quién es este personaje guatemalteco, nos indica que José Rubén Zamora Marroquín, fue el fundador y director, durante muchos años, de elPeriódico, una publicación en papel y en internet, que se destacó por destapar casos de corrupción y violaciones de los derechos humanos de muchos guatemaltecos inocentes, por parte de los distintos gobiernos. Muchas de esas personas resultaron desaparecidas y se desconoce su paradero hasta estos días precisos. José Rubén tiene actualmente 67 años de edad, es alto y desgarbado y con el pelo poblado por una melena completamente encanecida, lo cual hace pensar que podría fallecer en prisión debido a los años que tiene y por las complicaciones en su estado de salud. Después de esos dos años en una cárcel, un juez lo envió a arresto domiciliario; pero otro acaba de revocar dicha orden y le ha impuesto regresar detrás de los barrotes, lo cual es una tentativa de homicidio incluso, de acuerdo a su avanzada edad. Inherente a ello, el proceso que se le ha seguido, ha estado lleno de irregularidades y mediante el cual se ha inventado, fantasiosamente, un presunto lavado de dinero, entre otros cargos.
Su familia, esposa e hijos, han tenido que abandonar Guatemala, lo mismo que varios periodistas que trabajaron con él en elPeriódico, debido a la persecución sistemática de parte de la fiscalía que está bajo el mando de Consuelo Porras, la enemiga número uno del comunicador caído en desgracia. Simplemente, o abandonaban el país o permanecían en él, so pena de ser arrestados arbitrariamente también y ser “re-fundidos” en prisión, de igual manera como se ha hecho con José Rubén Zamora Marroquín.
Su hijo, en la susodicha conferencia de prensa en la Capital inglesa, manifestó que, a pesar de todo, el nuevo presidente de la República, Bernardo Arévalo de León, ha realizado avances, pero no han sido muy significativos, debido a que “todavía existe una célula criminal que controla la fiscalía. Mi padre puede volver a ser encarcelado en cualquier momento.” Tal y como ocurrió hace pocos días atrás. Añadió que se pusieron muy felices cuando se enteraron de que le habían dado “casa por cárcel”, hablaron con él vía telefónica, y hubo, finalmente, paz y tranquilidad en el seno de la familia. “Queda aún un largo camino por delante –agregó el hijo-, (…) ha estado encerrado en una celda de aislamiento 23 horas al día, con sólo una hora de Sol en un pequeño patio. Ha estado expuesto a todo tipo de torturas. No lo dejaban dormir, le cortaban el agua (…). Pero sabemos que existe la posibilidad de que inventen algo nuevo (en la fiscalía), y lo vuelvan a encerrar.” Expresa temeroso José Carlos Zamora.
En la actualidad, su padre es el prisionero más célebre que hay en todo el continente americano y que pertenece y representa a la libertad de prensa. Su “Calvario” comenzó cuando llegó a la fiscalía general de la república Consuelo Porras, una mujer que es requerida, a su vez, por la justicia de los Estados Unidos, pues tiene asuntos pendientes con los estadounidenses. Lo mismo que su subalterno, el también fiscal Rafael Curruchiche.
“Los últimos 30 años han sido una persecución constante, con amenazas e intentos de asesinato –retoma la palabra José Carlos Zamora-. En 2003, secuestraron a toda la familia y nos mantuvieron encerrados por más de tres horas, tirados en el suelo, con fusiles de asalto apuntándonos en las cabezas. Todos eran miembros de las fuerzas de élite del Estado y había tanta impunidad, que entraron en casa a cara descubierta. En 2008, secuestran a mi padre e intentan asesinarlo. Pero yo diría que estos dos últimos años, han sido los más duros por la total incertidumbre.” Relata el hijo.
En cuanto al nuevo presidente del país, Bernardo Arévalo, el joven indica que su padre nunca ha podido hablar con él, pero él, José Carlos, se reunió con el mandatario en el segundo aniversario de la detención de su papá y se comprometió a que “no se iba a quedar cruzado de brazos.” Según les dijo. “Nosotros le hemos entregado toda la documentación sobre el caso y las torturas. Todo ese material lo hemos presentado ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y eso va a ir a la Corte Interamericana. Tenemos una demanda contra el Estado de Guatemala. Esperamos poder llegar a un acuerdo antes de que termine el proceso.”
Concretamente, en referencia al presidente Arévalo de León, José Carlos Zamora señala que “es un hombre genuinamente decente. Creo que está intentando hacer lo correcto y hacerlo conforme a la ley. Él no quiere interferir en los otros poderes, lo que es totalmente válido a menos que seas autoritario. Pero le pedimos que termine con esa célula criminal que sigue enquistada en la fiscalía y un grupo de jueces dentro del Organismo Judicial. Mientras no se acabe con esta célula criminal, el país estará de manos atadas y habrá más persecución política.” Asegura el joven.
Uno de los periodistas internacionales, presente en la rueda de prensa, le cuestionó sobre esa “célula criminal” que él ha denunciado, quién está detrás y quién permite que siga existiendo, a lo cual contestó: “En Guatemala hay algo a lo que llamamos ‘pacto de corruptos.’ Eso es algo enorme. Es como un Estado. Su arma más útil es la fiscalía, que tiene el monopolio de la persecución criminal. La señora Consuelo Porras, al frente del Ministerio Público, fue elegida primero por el presidente Jimmy Morales y luego por Alejandro Eduardo Giammattei (el penúltimo mandatario). Crearon un sistema perfecto para brindar la corrupción. De ahí las leyes para proteger a esta señora, de tal manera que el actual presidente no puede destituirla. Tiene un mandato limitado, pero no termina hasta dentro de un año. Con el presidente Arévalo se están cambiando muchas cosas. Pero hay que terminar con esta célula criminal, para encarrilarnos de nuevo hacia una democracia real.” Contestó.
Zamora Marroquín y la situación de la libertad de prensa en Guatemala
En su comparecencia ante los periodistas en el foro en Londres, José Carlos Zamora, hijo del periodista encarcelado injustamente en su natal Guatemala, fue invitado para que diera su versión –a la postre la verdadera situación de la prensa en su país-, acerca de la realidad que viven los comunicadores en esta nación centroamericana, la más poblada del istmo. Y esta fue su respuesta: “Creo que desde que hubo un cambio de gobierno en enero, han mejorado las cosas. Pero el caso de mi padre creó un ambiente de miedo que puede llevar a la autocensura. Pero me da mucha esperanza y es muy motivador ver que, a pesar de las circunstancias, la prensa en Guatemala esté haciendo mejor periodismo que nunca. Siguen denunciando, siguen investigando y hay más colaboración que nunca. Eso es muy importante porque la unión hace la fuerza.” Aseguró.
En cuando a la situación actual de José Rubén Zamora Marroquín, hemos de recordar que, después de que se le otorgó el beneficio de “casa por cárcel,” ahora tiene que regresar a prisión, con todos los agravantes que ello conlleva y que incluyen las torturas psicológicas y físicas que ya ha sufrido en el pasado reciente. Es decir, el beneficio, si es que alguna vez lo fue, pasó por su vida como una exhalación, raudo y veloz, porque la Sala Segunda de Apelaciones le revocó esas medidas sustitutivas que fueron dictadas el 26 de agosto pasado, por el Tribunal Noveno de Sentencia Penal y por ello tendrá que regresar a la cárcel militar Mariscal Zavala, donde ha sido objeto de toda clase de atropellos, en contra de su condición de salud y de su avanzada edad.
La revocatoria de la mencionada Sala, así lo hizo del conocimiento de los abogados del prisionero: “Se revoca en su totalidad el auto de medidas sustitutivas (…), se ordena que el procesado José Rubén Zamora Marroquín regrese a la misma condición que se encontraba de fecha 26 de agosto de 2024.” Por su parte, los abogados penalistas que observan su caso, César Calderón y Allan Najarro, y Juan Francisco Sandoval, antiguo titular de la Fiscalía Especial contra la Impunidad, explicaron que Zamora tiene la opción de presentar de inmediato un recurso constitucional, que tendría que ser resuelto antes de que venzan los dos días de plazo, “(pero) los tiempos juegan en su contra. Está difícil que la Corte de Constitucionalidad resuelva pronto y a su favor.” Aseveraron los expertos.
Cuando regresó a su residencia, había sufrido 812 días de prisión injustificada, fundamentada únicamente en los delitos que la fiscalía se inventó para castigarle, pero, principalmente, para alejarlo de la actividad periodística. Es decir, en palabras más sencillas todavía, José Rubén Zamora era algo así para los políticos guatemaltecos como “la piedra en el zapato” que les hacía renquear o trastabillar, pues denunciaba en su publicación llamada elPeriódico, toda clase de tropelías y actos corruptos que se efectuaban en los tres poderes de la República, el Judicial primordialmente, el Legislativo y por supuesto, en el Ejecutivo.
El Tribunal Noveno de Sentencia Penal le había conferido el beneficio de “casa por cárcel”, acogiendo los recursos de apelación interpuestos por la Fiscalía Especial Contra la Impunidad y los querellantes adhesivos, llamados Ricardo Méndez Ruiz y Ronald Giovanni García Navarijo. En este punto, cuando se hallaba en su residencia, muchas personas conocidas le preguntaron por qué no huía del país, pero Zamora Marroquín les contestó: “al igual como lo he hecho hasta ahora, enfrentaré a la justicia para defender mi inocencia. Me siento tranquilo, sereno y con coraje para resistir cualquier cosa y espero a las autoridades cuando me lleguen a buscar a esta casa. Estoy buscando un colchón más o menos cómodo, para poder dormir en prisión –dijo a unos periodistas españoles que le querían entrevistar antes de su regreso a la celda-. Aunque me han querido aniquilar, así como con otros operadores de justicia, yo gozo de presunción de inocencia, (empero) he estado sometido a abusos y arbitrariedades, algo que es espantoso. Espero que mi caso sirva para que la arbitrariedad y los abusos de poderes establecidos, terminen. Aquí me van a encontrar (los policías que le llevarán), yo ya acepté mi destino, sea el que sea y aquí estoy esperando lo que decidan hacer.” Puntualizó.
En relación con este caso, son muchos los organismos, que incluyen a las mismísimas Naciones Unidas, que han ordenado su inmediata liberación, pero la fiscal Consuelo Porras ha hecho caso omiso de ello y no lo ha dejado en libertad. Amnistía Internacional (AI), es otro que ha exigido “el final de esta injusticia, ya que el periodista merece libertad, no represalias,” ha citado en una de sus ponencias al respecto. La Unión Europea (UE), ha expresado su solidaridad y ha hecho un llamado para que sus derechos se respeten; mientras que la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), ha expresado su “más profundo rechazo y estupor ante la revocatoria de la libertad concedida a Zamora, quien está inmerso en una causa plagada de irregularidades y que aún no tiene sentencia.” Finalmente, el Programa de las Américas del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ por sus siglas en inglés), ha hecho saber su preocupación y ha reiterado que los procesos judiciales “deben garantizar un trato justo e imparcial, sin convertirse en herramientas para silenciar al periodismo crítico.”
Pero esto es Guatemala. ¡Siempre Guatemala! El país no ha avanzado mucho desde sus sempiternas y cambiantes dictaduras y eso es lo que vemos en estos momentos con la detención del periodista José Rubén Zamora Marroquín. Es un sistema judicial que está en el puño de una mujer prepotente, Consuelo Porras, secundada por un grupo de fiscales y jueces obedientes a sus demandas y que actúa como un segundo Estado, paralelo al Poder Ejecutivo. Tampoco ella está dispuesta a dejar ese poder, porque hacerlo significaría la extradición muy posible hacia los Estados Unidos, donde le espera un juez, un tribunal y con toda seguridad la cárcel para esta mujer intrínsecamente corrupta. “El error” de Zamora Marroquín fue, precisamente, develar los actos corruptos de Porras y ahora le está haciendo pagar con la cárcel, tras inventar los delitos ficticios que se le achacan.
El hijo de aquel, José Carlos Zamora, se llena de palabras esperanzadoras y positivas cuando dice: “Es muy importante: todas las resoluciones de Naciones Unidas, la Convención Interamericana, todas tienen mucho peso y dan herramientas para combatir esa célula criminal. Como familia, estamos sumamente agradecidos con la prensa que ha seguido poniendo la atención en lo que pasa en Guatemala y en lo que pasa en el caso de mi padre. Es vital que el mundo no se olvide de que no se puede criminalizar, perseguir, ni encerrar a periodistas.”
Por lo pronto, la misma celda, los mismos torturadores y la misma arbitrariedad judicial, esperan a José Rubén Zamora Marroquín, el prisionero más célebre de este final de año 2024, en América entera.
Ofelia Taitelbaum Ingresa a Prisión
Judíos en Todo el Mundo “se Disparan en los Pies”
SAN JOSÉ, Costa Rica-Ponen caras de buenos, de muchachos (as) perseguidos, víctimas de la humanidad y recuerdan insistentemente el período de la matanza nazi al pueblo hebreo en Europa, durante la Segunda Guerra Mundial. Les gusta la etiqueta de “pobrecitos” y con ese calificativo y esa imagen han transitado por la vida, generación tras generación, desde 1945. Pero mucho antes de ese acontecimiento, se quejaban de que fueron esclavos del Faraón, en Egipto; de los Zares en Rusia y de los Reyes Católicos que decretaron la sefarade en España, o la expulsión –según ellos arbitraria e inhumana- contra “el pueblo elegido de dios”, como se hacen llamar ellos mismos, como si los judíos tuvieran algo distinto al resto de los hombres, que los hace “especiales” ante un todopoderoso que acusa una evidentísima debilidad, cual es la preferencia por un grupo étnico y religioso, por encima de todos los demás en la Tierra.
Y sus jugarretas, sus artimañas, siempre en pos del dinero existente, allí donde se pose un conglomerado de hebreos, las han hecho callados, en el mayor sigilo, cuidando al máximo sus imágenes de pulcritud y sobre todo, de “limpieza” moral individual y conjunta, por poseer escrúpulos que son “benditos ante los ojos de dios.” Pero, en los últimos 10 años parece que los mismos judíos, alrededor del mundo, se han cansado de esa imagen, de esa postura inflexible de ser ellos los mejores moralmente, los “únicos”, los bendecidos y los que siguen con aquella nube luminosa, enviada por dios (nótese la minúscula), durante el éxodo por el desierto, de acuerdo a lo que cita el viejo testamento que ellos mismos redactaron hace miles de años atrás, en clara propaganda a favor de este pueblo. Un pueblo que gusta de vivir dentro de otros, extraer de éstos todo lo positivo que observan, para aprovecharse de esas ventajas posteriormente.
Uno tras otro como “piezas de dominó”
Cansados, decíamos, agobiados por esa imagen sacro-santa de ser un pueblo sin mácula, sin mancha, a través de los siglos, los judíos actuales han estado cometiendo errores horrorosos, extraordinariamente deleznables, y que les han puesto al descubierto ante los ojos del resto de la humanidad.
Uno de los casos recientes más difundidos, ha sido el del productor de cine Harvey Weinstein, acostumbrado en Hollywood al abuso de mujeres, tocándolas, violándolas y violentándolas en todas las formas posibles que su instinto depredador le impulsara. Es decir, para aquellas que quisieran triunfar en el difícil mundo del séptimo arte, tenían que acostarse con ese gordo de aspecto repulsivo, las veces que a él se le ocurriera. Y si no lo hacían… o fenecían en el intento por convertirse en estrellas de Hollywood o denunciaban a aquella bestia sexualizada y eso fue exactamente lo que un grupo de esas mujeres hizo con él y consiguieron que las leyes –de todos modos permeadas por los judíos-, lo condenaran por violaciones y abusos de todo tipo de decenas de mujeres en la “meca del cine.”
Otro no menos malo que el anterior, fue el millonario Jeffrey Epstein, dueño de mansiones aquí y allá, aviones y yates privados y amigo de una gavilla de sinvergüenzas, entre quienes estaban el propio Donald Trump y el Príncipe inglés, Andrew, quien terminó de matar a su madre, la Reina Isabel II, por el disgusto que le causó a la “pobre” anciana, al tener que quitarle todas sus condecoraciones, grados militares y títulos nobiliarios, además de pagar millonarias sumas para evitar que su hijito fuese juzgado y entrara en prisión.
¡Pues bien! Epstein acostumbraba embaucar a jovencitas en todo el mundo, todas ellas menores de edad, porque además era pederasta, un sátiro de “grandes ligas”, e invitaba a sus amiguetes a disfrutar de violaciones, orgías y demás excesos sexuales a los que estaba habituado. Las llevaba a su isla privada, a sus mansiones y adonde se le ocurriera… hasta que un día fue acusado ante los tribunales por una de esas muchachas que fue desflorada por este judío. El final de Epstein fue inesperado pero justo: se suicidó en su celda en una prisión en Nueva York. No pudo soportar que el mundo fuera tan infame con él, quien era un prominente miembro del “pueblo elegido de dios.”
Y podríamos mencionar caso tras caso, pero se nos haría muy extenso. Hoy, las masacres, el exterminio del pueblo palestino por medio de los misiles y bombas que Tel Aviv lanza en la Franja de Gaza, mientras los colonos hebreos arrebatan las tierras a los mismos palestinos en Cisjordania, obedeciendo aquello de que han llegado “a la tierra prometida (por su dios)”, develan con toda claridad el material del que están hechos los judíos: no son humanos, se sienten superiores a todos los demás (insisten en afirmar que los palestinos no son seres humanos, sino bestias a las que han de aniquilar), y tienen por dios al dinero en fabulosas cantidades. Para él nacen, para él viven, para él luchan y para él mueren. Y con base en el dinero, quieren la dominación mundial. Y a quienes no estamos de acuerdo con ellos, nos tildan de “antisemitas”, “yihadistas” y “nazis.” Pero se están “disparando en los pies” ellos mismos al ponerse en evidencia por lo que son y por lo que sienten y desean…
El asunto que nos ocupa en esta oportunidad, se ha llevado a cabo en Costa Rica, la pequeña república democrática en América Central, donde la comunidad judía es extraordinariamente fuerte desde el punto de vista financiero o económico y por las influencias, la penetración que han realizado en las esferas del poder. Sin embargo, esa influencia, que en los años 80s y 90s fue impresionante y apabullante, ha venido mermando, justamente por los mismos errores que los judíos han cometido en detrimento de su grupo y raza.
En un momento dado, se dio el caso de que un hebreo era ministro de tal cosa en determinado gobierno y su esposa era ministra de lo otro; también, otro judío era embajador en Washington y a su regreso a Costa Rica, se convirtió en editorialista del periódico más influyente del país, con el beneplácito y el aval de su director de nacionalidad cubana (los cubanos suspiran por los judíos y se ven reflejados en ellos). Para citar solamente unos pocos casos; pero en la actualidad, sólo un hebreo es diputado en la Asamblea Legislativa costarricense y su voz tiene un poder inusitado, que se hace escuchar ante la timidez congénita, característica de los costarricenses. Pero volverán… Nosotros sabemos que los judíos regresarán a ostentar el poder, porque forma parte de su naturaleza. Allí donde estén, sea en Honduras, Colombia, Guatemala, Rusia, Inglaterra, Nigeria o donde sea… sus afanes de dominación estarán siempre de manifiesto.
En concreto, Masha Taitelbaum Yoselewich, conocida como Ofelia, fue una prominente política de la etnia hebrea en Costa Rica, que llegó a ser viceministra de Vivienda, diputada al Congreso y su último cargo fue el de defensora de los habitantes, una Institución anodina, cuyas funciones también son anodinas, porque no defienden a nada ni a nadie (sus resoluciones no son vinculantes con los tribunales), pero da prestigio a quien llega a su directriz y el salario que devenga es importante, cuantioso, si se quiere.
El error garrafal de Taitelbaum
Esta mujer tuvo en su momento una empresa que era una agencia de viajes, en sociedad con otras dos judías de nombres famosos en Costa Rica y empleó a una señora costarricense como recepcionista. La hija de esta última, quien era una jovencita apenas por aquellos años, visitaba a su madre y allí conoció a Ofelia Taitelbaum, la condueña de la empresa. La jovencita se llama María de los Ángeles Otárola Soto y ahora es una mujer mayor, que supera los 60 años de edad. Emigró a su tierra natal, al norte de Costa Rica, al cantón de San Carlos. Ofelia Taitelbaum se dio cuenta de ello, justamente cuando la digitalización del gobierno costarricense era apenas un proyecto y tomó el nombre de Otárola para realizar su plan: creyó que, al estar aquella bien lejos de la Capital, no se iba a dar cuenta de las ilegalidades que iba a hacer la judía en San José, que consistieron en mentir al departamento de Tributación Directa del Ministerio de Hacienda, que ella pagaba a María Otárola (convertida en una humilde costurera), sumas millonarias por supuestas asesorías que brindaba a las empresas de Taitelbaum. Todo era falso, desde luego. Presentaba documentos al gobierno, supuestamente redactados por Otárola e inventó aquella la firma de ésta.
Pero todo se descubrió cuando la humilde señora sancarleña visitó las oficinas de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), en San Carlos, para que le dieran el beneficio de un seguro médico, mientras echaba a andar un proyecto de costura de prendas de vestir, siempre pequeño y humilde. En la CCSS le dijeron que no calificaba para ese beneficio, debido a las cantidades millonarias que ella había recibido de parte de las empresas dirigidas por Ofelia Taitelbaum, en sociedad con su esposo, a quien llaman Bernardo (de apellido Rubinstein, también judío, por supuesto). Y es que la digitalización “estaba invadiendo” a todo el país y ello permitió que el fraude quedara al descubierto, a pesar de que María Otárola vivía lejos de la Capital. Aquí radicó el error garrafal de la hebrea.
La idea de Taitelbaum era hacer parecer ante Hacienda que esos millones eran pagados a manera de egresos, de “salidas” financieras de sus empresas y nunca “ganancias”, y evitar así mayores gravámenes tributarios.
La señora Otarola, a la postre madre sola de cinco hijos, a los cuales pudo sacar adelante gracias a su oficio de costurera (cosiendo prendas en pequeña escala y de manera, si se quiere, rudimentaria), visitó las oficinas del Organismo de Investigaciones Judiciales (OIJ), donde uno de sus oficiales rechazó ayudarle en primera instancia; pero otro colega, aceptó hacerse cargo del caso. También una periodista de un reconocido telediario, la apoyó en esa batalla contra el poder judío, el inmenso y peligroso poder de los hebreos en este país. No contrató abogado alguno, pues la señora no confió nunca en la honorabilidad de ese gremio y decidió enfrentarse a la etnia judía con las únicas armas que ostentaba: su valentía y su fuerza interior.
Un día de tantos, mientras María Otárola conversaba en persona con la periodista del Canal 9, recibió una llamada de Ofelia Taitelbaum en su teléfono celular. “El teléfono mío sonaba y sonaba y no dejaba de timbrar. Era ella. –Narró la señora-. Yo tenía un segundo celular que había recién comprado con un nuevo número (recibía muchas amenazas anónimas de amigos de la judía), y la periodista me dijo que contestara la llamada. Lo hice y puse la conversación en altavoz.” Recordó. Aquella conversación en la que Ofelia Taitelbaum le prometía asegurarla, cancelar todas las deudas ante Hacienda (que no eran otra cosa que deudas de la misma judía), y regalarle una casa, era a cambio de que doña María le dijera a la periodista que todo lo que ella le había contado era falso, que se había equivocado y doña Ofelia era “un ángel hebreo, del pueblo escogido por dios e incapaz de tal canallada.” La periodista escuchó toda la conversación que ahora permanece “eternamente” en la red YouTube en esta dirección: Conversación telefónica entre Ofelia Taitelbaum y la denunciante María Otarola - YouTube.
Esta situación, que se fue ventilando con regularidad en los medios de prensa costarricenses, se prolongó por más de 10 años en los tribunales, debido a la inacción de los fiscales y jueces (¿?), detenidos en su indolencia no se sabe por qué razón, quizás por temor al poder económico de los judíos o por las influencias políticas que éstos tienen. Fue sino hasta que el actual presidente de la República, Rodrigo Chaves, emplazó a los magistrados y les hizo notar su cobardía, cuando decidieron ponerle punto final a la impunidad que favorecía a Taitelbaum. Así, el juicio finalizó en el 2019 y se le impuso una pena de cárcel de 9 años; es decir, dos años y medio por cada uno de los 29 delitos de los que se le acusaba. Sin embargo, la sentencia se redujo a siete años y medio, debido a las reglas de concurso material. En resumen, fue encontrada culpable de cometer 29 casos de falsificación de documentos entre el 2004 y el 2013, sobre el pago de honorarios a favor de María de los Ángeles Otárola Soto, una costurera de San Carlos, quien trató de hacer un trámite de aseguramiento ante la CCSS y le fue denegado ese derecho por las presuntas cifras millonarias que recibía de parte de las tres empresas de Taitelbaum; en concreto 32 millones de colones (moneda costarricense).
La encausada en este feo asunto se encuentra en estos momentos recluida en la cárcel para mujeres, Vilma Curling, en San Rafael Arriba de Desamparados, San José, mientras su abogado, Hugo Navas, intenta por todos los medios a su alcance, que le den casa por cárcel, debido a la edad de esta mujer de 75 años, y por algunos padecimientos de salud que supuestamente tiene. Por su parte, María Otárola ha asegurado a los medios de prensa que la situación la ha afectado tanto, que lleva unos 10 años sin poder recibir atención médica, porque la CCSS le denegó el aseguramiento: “Básicamente, el deterioro de la salud es lo que más me ha afectado –camina apoyándose en una andadera de metal-. La otra vez fui a buscar el seguro de mi hijo y no lo pude conseguir. Han pasado 10 años y hasta hoy, yo no tengo atención médica.” Declaró.
En lo que atañe al encarcelamiento de Ofelia Taitelbaum, la mujer que usó su nombre para defraudar a Hacienda, María Otárola dijo: “Cuando vi que ya era en serio, cuando yo la vi entrando a la Corte sin joyas ni maquillaje, sí me pegó, me pegó bien duro, porque es un ser humano y es una adulta mayor, pero ya después de que uno pasa el primer impacto, dije que ella se lo ganó. Un delincuente que sea probado que cometió el delito, sólo puede estar en prisión. Le agradezco mucho a la Corte, pues a pesar de que duró tantísimo tiempo para resolverlo, demostró que yo no mentía.”
De esa manera, Taitelbaum es otra prominente miembro del judaísmo en Costa Rica que cometió delitos graves de corte económico contra el Estado, lo mismo que su paisano, Samuel Yankelewitz (ya fallecido), otro defraudador de Hacienda y a quien le otorgaron el beneficio de “casa por cárcel”. Y lo que ha quedado en evidencia es que los hebreos se están descuidando y ya no intentan esconder con perfección sus fechorías y eso es bueno para que los fanáticos de la Biblia se enteren de que no son “tan limpios y rectos de corazón” como hacen creer.
Después de la Captura del “Mayo” Zambada,
¿Hay Guerra Civil en Culiacán, México?
MÉXICO-Desde hace varios años atrás, esta nación del Norte de América se ha convertido prácticamente en “tierra de nadie” o lo que es peor, en “tierra de narcos.” Y para terminar de hacer más caótico el panorama, sus presidentes no enfrentan la problemática con la valentía que requiere y se dedican a evasivas para confundir a la gente, a los mexicanos y a la prensa, atacando a los conquistadores españoles, a quienes acusan una y otra vez de ser los causantes de una historia que, de todas maneras, no se puede corregir, revertir, ni rectificar, en el caso de que realmente hayan sido tan perversos como los mandatarios de esta nación insisten en señalarlos y juzgarlos.
Pero la situación conflictiva está allí, en la superficie del país, y se ha salido de las manos de las autoridades, que muchas ocasiones entran en concertaciones impúdicas con los mismos narcotraficantes, en un claro entendimiento corrupto y al margen de las leyes, por supuesto.
La captura del llamado “mayo” Zambada ha complicado todavía más las cosas, justamente en Culiacán, donde se habla abiertamente de la existencia de una guerra civil que brotó a raíz de dicha captura. “Es una suerte de guerra civil”, argumentan los observadores de la realidad de México, al ver lo que está sucediendo en esta región. Se escuchan tiroteos masivos, secuestros e incendios en esa urbe ubicada en el Estado de Sinaloa y todo ello provocado por los seguidores del narco capturado por las autoridades.
Las descripciones hechas por un periodista inglés
Se trata de Ioan Grillo, oriundo de Inglaterra y emplazado en México, donde ha trabajado por más de 24 años cubriendo la violencia causada por los narcotraficantes. Aquí, en el nororiente del país, ha visto un combate abierto que se ha extendido por más de dos semanas y ha dejado un saldo nefasto de 50 muertos y 70 secuestros. La crisis de seguridad se ha intensificado en las últimas semanas y ha sido consecuencia del arresto, por parte de las autoridades de los Estados Unidos, de Ismael “mayo” Zambada, uno de los jefes más importantes del cártel de Sinaloa.
Con su ausencia en la cúpula de ese cártel, ha provocado un vacío que puso a pelear a dos facciones de su organización, por hacerse del liderazgo: por un lado, “los mayos”, que son los hijos y aliados de Zambada; y por el otro, “los chapitos”, que son los hijos y aliados de Joaquín “el chapo” Guzmán, sentenciado en los Estados Unidos a cadena perpetua y que se mantiene en una prisión de máxima seguridad en aquella nación. Es un hecho que el arresto de Zambada, el 25 de julio pasado, del presente 2024, causó la disputa por el control de uno de los cárteles más grandes y poderosos del mundo. “El mayo” se subió a un avión comercial para hacer determinado viaje, iba con uno de los hijos de “el chapo”, llamado Joaquín Guzmán López, y eso significó el final de la libertad de Zambada, quien cayó en manos de los estadounidenses, quienes lo arrestaron y causaron la reacción enojada del ex presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien criticó con acritud a Washington por “el acto ilegal” al haberse llevado preso a Zambada. Cosas de AMLO, como siempre las defendió a lo largo de su período presidencial, sin importarle que estuviera defendiendo a los propios narcotraficantes.
En lo que atañe al periodista inglés, Grillo, posee 51 años de edad, ha escrito tres libros acerca del narco y ha producido decenas de documentales. Sin duda se trata de una de las personas más versadas en el tema del narcotráfico mexicano, en la actualidad. Ha fundamentado estos trabajos suyos en conversaciones con los actores y funcionarios, tanto de México como de los Estados Unidos; y le han otorgado varios y prestigiosos premios de periodismo, debido al reporte de las acciones criminales en los 32 Estados mexicanos “y conoce a fondo no sólo las prácticas de los cárteles, sino sus vínculos con la vida legal y su relación con los pueblos que controlan”, ha dicho de este reportero un colega suyo que solicitó quedar en el anonimato por razones de seguridad.
En referencia a lo que sucede en Culiacán, Grillo ha explicado de manera textual: “He ido 14 veces a Sinaloa y llevo décadas cubriendo al narco y nunca había visto una guerra civil como la que está ocurriendo tras el arresto de ‘el mayo.’ La ciudad está paralizada. Antes eran dos o tres días en ciudades pequeñas con cierta tradición de violencia; pero ahora es en una capital de un millón de habitantes. Los niños no van a las escuelas, muchos comercios no funcionan, hay escasez de alimentos en los pueblos aledaños.” Describe.
Asegura que, aparte de la guerra civil entre las dos facciones del cártel, explicadas en las líneas anteriores, “un enfrentamiento que es muy fuerte,” señala, hay dos cosas que son distintas en esta oportunidad: la gente se autoimpuso un toque de queda y en las redes sociales está proliferando el miedo, cuando se presentan videos muy crudos, falsos y ciertos, que generan una sensación abrumadora. Agrega que no es mucho lo que no se sabe, porque los periodistas locales no están saliendo a trabajar, a cubrir los acontecimientos, a ninguna hora y mucho menos por las noches, y tampoco a las zonas rurales. “La cifra de 50 homicidios es limitada. Ves que hay balaceras fuertes en las noches que nadie cubre y no llegan a los reportes oficiales. A uno se le contagia el miedo, siente una adrenalina al máximo, algo que nunca sentí en otros lugares”, explica Ioan Grillo, a la postre corresponsal de la BBC de Londres, estacionado en México.
Al dar una explicación sobre el panorama que hay en Culiacán, indica que el problema del narcotráfico y del crimen organizado son dos cosas distintas, aunque relacionadas y “cuando quitas elementos, aparecen otros.” Aduce. Agrega que si quitan, capturan o eliminan a uno de los elementos importantes de determinado cártel, si no se reemplaza automáticamente, hay consecuencias y comienza una lucha interna para reemplazarlo. El orden se distorsiona y sucede en las bases de las facciones, donde permanecen los elementos más jóvenes y que son los más violentos. “Entonces, entre más cabezas quitas, más violencia siembras.” Asegura.
En cuando al ex presidente Andrés Manuel López Obrador, enemigo declarado (o amigo hipócrita) de los Estados Unidos, el periodista inglés piensa que no tiene razón cuando criticó el secuestro que hicieron las autoridades estadounidenses de “el mayo” Zambada, porque él, en su calidad de presidente de los mexicanos, tenía la responsabilidad de darle seguridad a la población. “¡Cómo vas a decirle a la gente que la culpa es de otro! Tienes que poner la cara. No puedes renunciar a ejercer tu poder como Estado.” Exclama Grillo. Y es que cuando se produjo el arresto de Zambada para llevarlo a territorio estadounidense, AMLO criticó el hecho porque los Estados Unidos trabajaron con “los chapitos” para ejecutar la detención.
Perfil del cartel de Sinaloa
Se le define como una federación conformada por grupos criminales y se originó por el negocio del narcotráfico, hace ya 100 años, en Sinaloa. En el caso de “el mayo” Zambada, comenzó en el narco en los años 60s y “el chapo” Guzmán en los 70s. Este cártel tiene presencia en otros Estados de México, como en Baja California, Ciudad Juárez y Sonora.
Hace pocos años atrás, esta federación tenía un sistema articulado con varios líderes, siendo los dos más poderosos (y que están presos actualmente en los Estados Unidos), “el chapo”, que era la cara pública, la que más se conocía; y “el mayo”, que era la versión de bajo perfil. “Durante los últimos años, comenzó una guerra fría entre ellos y ahora es una guerra civil”, señala el periodista Ioan Grillo.
Explica con mayor detalle que sus facciones se han ido vinculando a otros negocios; es decir, los sinaloenses son más narcos; mientras que “los chapitos” reciben dinero de la industria cervecera y en Durango ganan mucho con la extorsión a la minería. “En Sonora ganan mucho por el tráfico de migrantes”, asevera el reportero de la BBC.
En el caso específico de “el mayo”, su rol dentro del cártel era el del líder emblemático, “una figura construida a través de los años, una suerte de símbolo nacional para muchos. Nunca, en medio siglo en la ilegalidad, había pisado una celda.” Explica y añade: “Muchos colegas míos (periodistas de otros medios de prensa), no quisieron creer la versión de la traición (de “los chapitos”): pensaron que si él estaba en los Estados Unidos, era porque quería.”
Actualmente, la panorámica social que se vive en Culiacán es de terror. Hay “psicosis social” (para explicar que existe un miedo generalizado entre la población).” Un señor me dijo que tenía un ataque nervioso; pero por otro lado, hay gente que apoya más a ‘los mayos’, que tienen la imagen de ser más vieja escuela, que andan en chanclas (zapatos informales) y sombrero y no se meten con el pueblo y viven de la amapola y la cocaína. En cambio, ‘los chapitos’ son más vistos como un cartel nuevo y más violentos, con opulencia, moviendo droga sintética y en ese sentido, la gente cree que ‘los mayos’ van a ganar, pero yo veo a ‘los chapitos’ muy poderosos. El público quiere que haya un ganador, por acuerdo o por batalla, para que termine la guerra civil.”
Esa es la realidad en Culiacán, Sinaloa, México, donde transitar por sus calles es jugarse la vida al quedar atrapado entre el fuego cruzado, disparado por una u otra facción de narcotraficantes. ¿Y la nueva presidenta de México? Bien, gracias. Sigue peleándose con España por los supuestos desmanes de la Conquista. Porque para ella y su “padrino” López Obrador, es mejor refugiarse en el lejano pasado, que enfrentarse a la dura realidad de hoy, permeada por los carteles de la droga. Punto.
La Pobreza Avanza Vertiginosa en Argentina.
Milei Exacerba los Ánimos
BUENOS AIRES-Este país del cono sur americano (no europeo, como insisten en decir los argentinos estrafalariamente), lo tiene todo para ser una potencia mundial, gracias a su extenso y rico territorio, uno de los más grandes del planeta. Incluso, se le puede catalogar como “un país continente”, debido a esa extensión, del mismo modo como la tiene China, Rusia, Arabia Saudita, India, los Estados Unidos; Brasil, etcétera, los más extensos del orbe.
Pero a los argentinos comunes y corrientes, en lugar de trabajar arduamente por alcanzar niveles altos de productividad y vidas individuales y conjuntas plenas de progreso y dignidad, lo que los mueve son sólo tres aspectos: 1. sentirse “europeos”, sin serlo por supuesto y obedeciendo a una fantasía que ventilan al resto de las personas de otras naciones y les hace sentirse superiores al resto de los latinoamericanos y de manera fatua; 2. marcharse al exterior para ser “internacionales” y regresar algún día a la Argentina para alardear de sus aventuras alrededor del globo terráqueo; y 3. presumir de una cultura siempre venida a menos y que acompañan con un “cantadito” en el acento que se torna ridículo y molesto al escucharlo. Otra realidad, a ellos no les interesa.
Más de la mitad sumida en la pobreza
En los primeros meses del gobierno del extravagante presidente Javier Milei, además de sus arrebatos contra otros mandatarios (se ha peleado con los presidentes de Chile, Brasil, Colombia, México, el dictador de Venezuela, etc.), la pobreza ha hecho sucumbir a más de la mitad de los argentinos; es decir, un 52,9 por ciento están pasando penalidades de todo tipo y lo cual implica un fuerte aumento en los índices, en comparación con el 41,7 por ciento de los pobres con el que cerró el 2023. Además, según los analistas, sociólogos y estadísticos, es el peor dato en 21 años.
Sin embargo, desde que se tienen noticias sobre esta nación suramericana (no europea, reiteramos), sus crisis financiero-sociales han sido proverbiales y se han visto escenas bastante deprimentes de sus pobladores, quienes no tienen ni lo básico para vivir. Año tras año, década tras década, de dictaduras militares, corruptas y criminales; y de gobiernos supra-corruptos, en los casos de Néstor Kirchner y últimamente su esposa viuda, Cristina Fernández de Kirchner, han provocado que las crisis se conviertan en un verdadero drama que afecta a más de la mitad de la población. Esas crisis no son nuevas en este país, donde, además, la población prefiere agolparse en la Capital, en Buenos Aires, antes que vivir en las provincias y antes que ponerse a producir en beneficio de la misma nación argentina. Toda una problemática, digna de ser analizada y estudiada por un facultativo en psiquiatría y hacerse la pegunta: ¿Por qué el ser argentino actúa de esa manera tan irresponsable con él mismo y su propio país?
Y esa irresponsabilidad también es evidente en la pasión exacerbada, fuera de todo registro, por el futbol. El balompié en Argentina alcanza niveles nunca vistos en otras naciones que también lo practican, pero que no le dan esa importancia que trasciende incluso lo humano, para convertirse en una suerte de “religión.” Incluso, el fanático argentino eleva a la condición de “dioses” a sus ídolos del futbol. Sino recordemos los casos de Maradona y ahora de Messi, quienes quitan el sueño a sus seguidores dentro de su país y prefieren verlos, alabarlos y engrandecerlos exageradamente, en lugar de trabajar por el progreso que indiscutiblemente la Argentina necesita con urgencia. Hay sociólogos que han asegurado que “si el argentino trabajara con el mismo ahínco y tesón con el cual actúa en los estadios o frente a los televisores cuando juegan sus ídolos, alcanzarían el grado de potencia mundial en pocos años.” Pero no. Su realidad no es así. Y prefieren las evasivas, antes que confrontar su problemática con decisión y valentía.
En todo caso, los niveles de pobreza crecieron fuertemente en esta nación austral en los primeros seis meses de gobierno de Javier Milei, hasta alcanzar el 52,9 por ciento. Más de la mitad de su población. Algo preocupante en grado sumo. Estas cifras fueron reveladas recientemente por el Instituto Nacional de Estadística y Censo (Indec), y agregan que, además, el 11,9 por ciento de los habitantes… ¡Es indigente! Más preocupante todavía, si lo vemos en su verdadera dimensión. Lo cual significa que ese porcentaje deambula por las calles pidiendo limosna, comiendo de los basureros y durmiendo a la intemperie, en un territorio donde el invierno es particularmente crudo, lo que repercutirá en la salud de esas mismas gentes.
¿Pero cuál es la argumentación del actual Gabinete de Estado, que sigue los lineamientos marcados por el presidente de la República, Javier Milei? Según declaraciones vertidas al diario Clarín, uno de los más importantes de la Argentina, una alta fuente del gobierno dijo que “el aumento de la pobreza no varía el rumbo de la administración. La gente votó al presidente diciendo que su principal objetivo era bajar la inflación, ordenando la macroeconomía. Y siempre dijimos que 2024 iba a ser peor que 2023.” Aseguró ese personero quien pidió su anonimato.
La herencia del populismo
Lo gobernantes que están hoy en día en la Casa Rosada, sede del gobierno argentino, insisten en decir que esta situación es culpa del anterior gobierno peronista, encabezado por Cristina Vda. De Kirchner; pero la verdad es que el país ha estado sumido en recesión desde hace décadas atrás y ni los militares que conformaron la dictadura, ni la siguiente democracia, pudieron paliar la problemática y mucho menos, resolverla.
Sino leamos las palabras de Manuel Adorni, vocero del actual Gabinete de Estado de Javier Mieli, quien manifestó a los periodistas siempre deseosos de conocer una respuesta satisfactoria de parte de sus gobernantes: “(La crisis) es consecuencia del populismo kirchnerista. El gobierno heredó una situación desastrosa, la peor herencia que recibió un gobierno en la democracia, quizá de las peores que recibió un gobierno en la historia.”
Por su parte, el diario La Nación, el más importante e influyente del país, destacó las cifras que muestran el dramático aumento de pobres en la Argentina: “si se tiene en cuenta que el año pasado cerró con 19,5 millones de pobres, se habrían sumado en seis meses, 5,4 millones de nuevos pobres. En tanto, se habrían sumado a la pobreza extrema (la indigencia), casi tres millones de personas.” Y continúa la crónica en el mismo diario: “El intento de estabilización de la economía argentina, con la devaluación de diciembre (subida de precios y licuación de ingresos), y el fuerte ajuste fiscal, profundizaron la tendencia de deterioro social, sobre todo en el primer trimestre. Sufrieron los ingresos de los trabajadores formales, informales, las jubilaciones y pensiones y se perdieron más de 100,00 empleos en la construcción, el comercio y la industria. Además, se perdieron puestos de trabajo informales. El trabajo se precarizó más.” Escribió el periodista.
Y en lo que estriba al mandatario, Javier Milei, éste ha dicho que la meta suya es la de convertir a la Argentina en el país más libre del mundo, y para ello tiene entre planes aplicar un programa que observa la liberalización y desregulación de amplios sectores de la economía, junto a privatización de empresas públicas. Pero hasta el momento son planes únicamente, que no pasan de serlo. Evidentemente, la situación social del país es alta y profundamente preocupante y puede degenerar en otras crisis, como el estallido de la población, el vandalismo o el aumento de la delincuencia, suicidios constantes de las personas en desgracia y sin nada qué comer o un levantamiento de la población, en general, contra un gobierno que, hasta estos días, no ha dado muestras de ejercer un cambio positivo, más bien… es todo lo contrario, porque ha agudizado todavía más la crisis.
Para el periódico Página 12, que se congracia con el kirchnerismo, las cifras dadas a conocer recientemente, “dan por tierra con los espejitos de colores del gobierno”; lo cual quiere decir que todo lo dicho, lo afirmado por el presidente de la República, sólo es “un canto de sirena”, sin nada de realidad, porque el hundimiento de los argentinos es evidente, es notorio y aparentemente… sin reversa. Se permanece en un punto del no retorno y conforme pasan los meses, la crisis tiende a agravarse más. Hay expertos que aseguran que Milei no terminará su gestión presidencial y podrían ser nuevamente los militares quienes le pondrán “un hasta aquí”, de igual forma como lo hicieron en la década de los 70s ante la ineficiencia, el rumbo perdido y la demagogia del gobierno. Por lo pronto, todas las miradas están puestas en Argentina, las de los siempre optimistas y por supuesto, las de los más pesimistas.
Viaje al Interior de Israel.
Los Judíos Viven con el Temor Diario que les Genera la Guerra en Siete Frentes
TEL AVIV, Israel-La infinidad de noticias que se están publicando en todos los medios de prensa alrededor del mundo, hacen hincapié en el teatro bélico, repartido hoy en día en siete frentes en los que están luchando los judíos, apoyados por los Estados Unidos que, dicho sea de paso, ya ha enviado al primer contingente de soldados a suelo israelí, en vísperas del ataque de respuesta a Irán. No obstante, lo que sucede en “el corazón” de Judea, no está claro en modo alguno, pues las informaciones no tocan el tema. Es por eso que en este reportaje brindamos una imagen realista y verdadera de lo que sucede en el interior de Israel.
Este 7 de octubre se ha cumplido el primer año del ataque por sorpresa de la facción guerrillera palestina Hamás, a los israelíes que estaban disfrutando de un festival de música, desatando todo el conflicto armado que hemos reportado en estos 365 días, desde entonces. Ha sido un punto de inflexión en la vida (y muerte) de palestinos y judíos, quienes ya no volverán a los días previos al mencionado ataque. Desde entonces, los rehenes que los guerrilleros de Hamás se llevaron al interior de la Franja de Gaza, algunos han aparecido muertos, muy pocos han sido liberados y la gran mayoría están “en algún lugar” del subsuelo cercano a Israel o de la misma Gaza y que Benjamín Netanyahu ni siquiera se refiere a ellos, a su posible rescate, porque lo que realmente le interesa al dictador judío es la guerra, el conflicto armado que le proteja de los juicios que tiene pendientes en el futuro, por actos de corrupción comprobados en el ejercicio del poder.
Es muy posible, de acuerdo a la naturaleza de Hamás y a la venganza que mueve a unos y a otros, que esos rehenes sean ejecutados, lo cual sería un fracaso de enormes proporciones de Netanyahu y su ejército, quienes se han concentrado en los bombardeos a la gran masa de habitantes de Gaza y nunca en una estrategia, basada en la inteligencia, y que fuese específica, para hallar y liberar a los secuestrados. Incluso, se sabe que algunos de ellos han muerto, merced a esos mismos bombardeos indiscriminados que sus propios compatriotas, los israelíes, han lanzado contra Palestina. En palabras análogas: no se justifica bajar los frutos, destruyendo al árbol, y lo que es peor… destruyendo a toda la plantación de árboles de la misma especie. Para la liberación de los rehenes, reiteramos, se requiere de una acción “quirúrgica”, bien planificada por estrategas especializados en esas acciones y nunca los ataques salvajes, brutales y masivos, que están causando el peor genocidio del segundo milenio.
Un pueblo dividido
Intrínsecamente, el pueblo de Israel muestra fisuras bastante significativas en su alma nacional. ¿Qué quiere decir ésto? Que tras el ataque de Hamás del 7 de octubre pasado o del 2023, la población judía residente en Israel y alrededor del mundo, se unió en torno al gobierno, mostrando una enorme sensación de solidaridad con el mismísimo Netanyahu, tan vituperado antes del mencionado ataque; pero que, al notar que no se estaba haciendo nada en concreto en favor de los secuestrados, las divisiones volvieron a hacerse notar en esta misma población judía. De hecho, en las paredes de muchos edificios en Tel Aviv, la Capital israelí, se pueden leer, en hebreo, carteles, puestos allí por familiares de los rehenes, en los que muestran su decepción, su impotencia, su desencanto y su inconformidad con el dictador no declarado de la nación, Benjamín Netanyahu, quien no se refiere ni en mínimo grado a esos prisioneros tomados por Hamás, hace un año atrás.
Esos mismos carteles, escritos a mano y con grandes caracteres en hebreo, exigen un acuerdo con Hamás para liberar a sus hermanos, padres, esposos y novias, que fueron hechas rehenes por la facción rebelde palestina. Pero Netanyahu presta oídos sordos o vuelve su desabrido rostro al lado contrario para no leerlos. También, hay letreros que mencionan a los soldados judíos muertos en esta guerra que Netanyahu inflama y extiende por toda la región y son nombres que el mismo ejército, por política implantada por la dictadura, no ventila en grado alguno: el Estado Mayor no quiere que se sepa cuántos y quiénes han muerto en este conflicto; incluso, la ilógica se hace presente, aunada a la mentira y al deseo de encubrir la realidad, cuando, después de los casi 200 misiles que cayeron en Tel Aviv y Jerusalén, el gobierno judío aduce que no causaron daño alguno, como si alguno de sus profetas o el mismo “dios de Judá”, hubieran impedido, en persona, que causaran daños reales a su “pueblo elegido.”
En otras palabras, la división de los israelitas en la actualidad, se decanta en dos grandes grupos: por un lado, quienes cierran filas con Netanyahu y están de acuerdo con llevar hasta las últimas consecuencias el genocidio en Gasa y Cisjordania (e incluso en el Líbano), porque, entre otras razones, consideran a los islamistas “seres inferiores” que se deben erradicar de la faz de la Tierra; y por otra parte, está aquel sector de la población que no quiere el conflicto armado y se negocie con Hamás para la devolución de los judíos secuestrados hace un año. Fueron más de 250 personas las tomadas por sorpresa y por la fuerza por Hamás y el gobierno israelí no ha liberado a ninguno, ni se ha ocupado de ello siquiera en mínima acción.
Después del 7 de octubre del 2023, la sociedad israelí ha quedado en estado de “shock total.” Esto es… volvieron los antiguos fantasmas que les arrebataban el sueño en el pasado reciente, donde el temor invadía sus almas y su cotidianidad. Además, saben con certeza y por las evidencias, que el gobierno actual de Netanyahu es incapaz de gestionar bien la crisis y muchos de esos afectados han emprendido acciones desesperadas por su propia cuenta, para obtener resultados esperanzadores. ¿Cómo? Han recaudado dinero para pagar hoteles y alojamiento para los miles de personas que tuvieron que huir de sus casas y conseguir trabajadores para reemplazar en las labores agrícolas a los inmigrantes que huyeron de sus sembradíos, por causa de la guerra. Lo anterior significó que la sociedad civil y las iniciativas privadas, asumieron el papel del gobierno y que éste había dejado de lado u olvidado por concentrarse únicamente en la destrucción de la Franja de Gaza en una acción plena de salvajismo y venganza. Porque lo que ha movido a Netanyahu han sido tres aspectos únicamente: evadir el llamado de los tribunales de justicia de Israel, por su comprobada corrupción en el seno del Estado; concretar su política de apartheid y aniquilamiento del pueblo palestino, al que considera inferior e indigno de existir; e incendiar a la región de Oriente Próximo, como “señor de la guerra” que es y está deseoso de ver correr la sangre, como “el vampiro” que hace poco le dijo que era, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan. Pero Netanyahu se siente realizado, mientras los parientes de los secuestrados cruzan por un camino de amargura al no saber absolutamente nada de los rehenes tomados por Hamás y que al dictador de Israel eso le preocupa poco o nada.
Antes del 7 de octubre anterior, las divisiones en la población se centraban en las intenciones de Netanyahu por obtener más poder, debilitando al sistema judicial y dándole mayor fuerza al Ejecutivo; pero después de los secuestros perpetrados por Hamás, la división se ha concentrado en torno a la guerra que se está dando en siete frentes (en Gaza, Líbano, Siria, Yemen, Irak, Cisjordania e Irán), y a los rehenes que supuestamente están retenidos en la Franja de Gaza. En este último punto, los familiares de los secuestrados han rechazado de plano las intenciones del gobierno para traerlos a casa, que, como hemos afirmado anteriormente, han sido débiles y escasas. Incluso, a raíz de esa falta de acuerdo, esos mismos familiares han sido insultados en las redes sociales y en las calles de las ciudades israelíes, por los seguidores de Netanyahu, quienes usan la palabra “smolanim” para referirse a estas personas y que significa “izquierdistas.” Es así como partidarios del gobierno de ultraderecha, encabezado por Netanyahu, se han apoderado de la campaña para la liberación de los presos de Hamás. Para algunos analistas de la situación política interna del país, esa agresividad contra las familias de los rehenes, es lo que quiere y favorece a Netanyahu: “Es violencia ejercida por el gobierno contra esas familias.” Analizan
Sentimiento general de inseguridad
Según una encuesta realizada en septiembre de este 2024, por el Instituto de Seguridad Nacional de Israel (INSS), el 31 por ciento de los israelíes tiene una sensación de seguridad “baja” o “muy baja”; mientras que sólo el 21 por ciento afirmó tener una sensación de seguridad “alta” o “muy alta.” Incluso, el número de judíos que abandonan el país, ha ido en aumento en los últimos meses, debido al hecho de que se sienten desprotegidos por el gobierno y el ejército. Además, la andanada de casi 200 misiles lanzados por Irán, decidió a otros muchos israelitas a dejar su patria, hasta que todo se normalice y descienda el furor de la guerra. Otros creen que alejar a Benjamín Netanyahu, considerado por una gran mayoría, tanto dentro como fuera de Israel, “un guerrerista consumado” o un individuo que cifra toda su vida, su razón de ser y su motivación para seguir en la cúspide del gobierno, en los hechos bélicos, traerá la paz duradera que la nación necesita.
Una crónica aparecida recientemente en la prensa europea, resume lo que está sucediendo en la población israelí en estos momentos: “Un año después del peor atentado terrorista de la historia de Israel, con la guerra con Hamás en Gaza, los numerosos rehenes que siguen cautivos, decenas de miles de israelíes que no han podido regresar a sus hogares en el norte del país y una guerra con Hezbolá en el Líbano, hay una pregunta clave: ¿Se sienten los israelíes más seguros con la forma en que su gobierno está afrontando la situación?” La respuesta es obvia: no, no se sienten a gusto. Ya no es lo mismo que en años trasanteriores. Y lo que es peor para una gran cantidad de judíos, el sueño de una patria judía se está desvaneciendo a punta de “bombazos y misilazos”, que son el furor de un gobierno avocado únicamente a la guerra y al deseo de un solo individuo (Netanyahu), por gobernar él y sólo él. De ahí el término que muchos han acuñado de “dictador”, al referirse a aquel.
Por otro lado, la posibilidad de que los rehenes que supuestamente tienen vida todavía, sean asesinados por sus captores de Hamás, es la gran pesadilla de sus familiares. Porque, en un impulso desmedido de venganza, los captores pueden ultimarlos allí, en los túneles donde presuntamente se encuentran y ante la negativa de Netanyahu de razonar, de dialogar con ellos y de liberar, en intercambio (canje), a aquellos mercenarios de Hamás que están en las cárceles israelíes. Es por esa razón que en las calles, en los edificios y postes del tendido eléctrico urbano, pueden verse letreros que muestran los rostros de los cautivos, sus nombres e historias. También de los que murieron tras el ataque de Hamás y que estaban gozando de un festival musical. Es posible que esos carteles pequeños y medianos, sean lo único que les quede a sus parientes y se conviertan en lugar de una débil esperanza, en una gigantesca frustración y dolor.
En síntesis, quien divide al pueblo judío actualmente en lo intrínseco de Israel, es Benjamín Netanyahu. Son muchos años en el poder con sus actos corruptos y su política de agresión a las naciones que rodean a Israel; más sus intentos por perpetuarse hasta su propia muerte en el poder. Con un eventual alejamiento suyo del gobierno, muy probablemente Israel volverá “florecer” y a tener paz y seguridad. Mientras tanto, la llegada de los primeros contingentes de soldados estadounidenses al aeropuerto internacional de Tel Aviv, para preparar la respuesta militar a Irán, ha destrozado todavía más los corazones de aquellos judíos que claman por la paz. Netanyahu y sus ministros insisten en amenazar diariamente al gobierno islámico de Teherán y decir que Irán quedará como Gaza y el Líbano; pero los iraníes responden que volverán a atacar después de que norteamericanos e israelíes, unidos, lo hayan hecho. Es decir, es la guerra al servicio de la guerra y eso, destroza, además de los pocos nervios que quedan, la felicidad, la armonía y el avance en todos los campos.
Hoy y ahora, los israelitas no son felices y mucho menos… seguros.
Desde el 2022, Más de 850,000 Cubanos han Llegado a los Estados Unidos
MIAMI, FLA. USA-El flujo y el reflujo inmigratorio hacia la gran potencia del norte, no se ha detenido desde 1959, año de la llegada al poder de Fidel Castro y su camarilla de comunistas, quienes crearon la dictadura asesina que ha tenido en sus fauces a Cuba y a sus habitantes, desde entonces.
Según sabemos bien, han utilizado todos los medios disponibles, desde la salida ordenada, mediante consulados y embajadas, pagando los pasajes aéreos, hasta hacerse a la mar en improvisadas embarcaciones, peligrando en el estrecho de La Florida, con la esperanza de ser rescatados por los guardacostas o la organización cubano-americana llamada “Hermanos al Rescate.”
Pero lo cierto es que en los últimos años han llegado numerosos ciudadanos nacidos en Cuba, en busca de dignidad primeramente y después, del progreso personal y para el resto de sus familias. Han querido saber qué es comer bien tres veces al día, por ejemplo; tener muebles dignos en una casa digna, un trabajo decente, ganar decentemente y esperar aumentos de sueldo en un país donde el régimen laboral se cumple a rajatabla, de acuerdo a las leyes establecidas por la democracia; y, sobre todo, han querido tener un presente y un futuro generoso con ellos y sus descendientes. La reunificación familiar, que es otro tópico importante para los cubanos, también ha sido un acicate, pero que permanece en un segundo plano con respecto a los anhelos antes mencionados.
Más de 850,000 inconformes con la dictadura comunista
Un poco más de ese número es lo que ha llegado a los Estados Unidos, en clara huida de la isla de Cuba y su nefasto régimen, que da visos de no querer cambiar bajo ningún concepto ni presión interna e internacional. Esa cantidad ha llegado a las costas y aeropuertos estadounidenses a partir del año 2022 y es considerada por los cronistas del exilio como “el éxodo más grande de la historia de Cuba,” una definición que tiene un enorme peso y un simbolismo que se explica por sí solo… Además, se habla de un fenómeno todavía más impresionante e importante, cual es “el vaciamiento demográfico”, según los expertos que han seguido puntillosamente lo que ha estado aconteciendo con la inmigración desde la isla caribeña.
¿Pero de qué se trata el susodicho “vaciamiento”? Es lo que ha provocado una caída poblacional de un 18 por ciento en el interior de Cuba; es decir, en palabras todavía más sencillas: la isla se está quedando sin gente, se está yendo a diario, se hace a la mar o se agolpa en el aeropuerto de Rancho Boyeros, con el único objetivo de recobrar las vidas que el régimen comunista implantado por Fidel Castro y conducido en estos momentos por Miguel Díaz-Canel, les ha arrebatado a todos quienes no forman parte del aparato Estatal. Porque los únicos que viven “a cuerpo de rey” en Cuba, son aquellos que forman parte de la nomenklatura del gobierno o están “sobre la cresta de la ola”, con las riendas del gobierno en sus manos. “¡Esos sí que viven bien y se dan vidas de millonarios!” Suelen exclamar los cubanos que ahora viven en los Estados Unidos, en libertad.
Se trata de una inmigración, de un éxodo que parece que no tiene fin. La cifra publicada recientemente por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), de los Estados Unidos, de más de 850,000 cubanos que han ingresado a esta potencia mundial desde el 2022, sólo demuestra una cosa: se está produciendo un vaciamiento poblacional en la isla y nada indica que la situación se va a revertir de una manera u otra, a pesar de los ingentes esfuerzos del régimen comunista cubano por sostener, mediante amenazas de cárcel y de no permitirles reingresar a Cuba una vez marchado de allí, a esos habitantes que ya no quieren más pasar necesidades, sin comida, sin medicinas, sin vestidos decentes, sin comodidades cotidianas y lo principal… sin libertad para expresarse, trabajar, opinar, votar por candidatos de su gusto en democracia y progresar, progresar como la dignidad del hombre lo establece, lo exige y lo permite.
Por su parte, el demógrafo y economista cubano Juan Carlos Albizu-Campos, asegura que “el descenso de la población (en Cuba) ha continuado y no es cierto de que en Cuba vivan actualmente 11 millones de personas, como ha publicado la dictadura, sino sólo 8,62 millones. Con toda seguridad, estamos asistiendo a un proceso que yo he dado en llamar vaciamiento demográfico. (Y) al éxodo migratorio se suma una caída considerable del número de nacimientos y aumento de la mortalidad.” Todo ello, por supuesto, en el interior y en la realidad de la Cuba actual. Y el 2024 va en camino a convertirse en el segundo año fiscal con mayor afluencia de cubanos en la frontera sur de USA, dice un informe reciente, emitido por el gobierno estadounidense.
Las cifras que maneja la CBP certifican que 533,000 cubanos arribaron a los Estados Unidos desde el 1 de octubre del 2021, hasta el cierre del año fiscal en el 2023. Y entre el 1 de octubre del 2023 y agosto de este año, se sumaron otros 208,000 solicitantes de asilo. No obstante, el saldo migratorio real puede ser mayor, ya que el registro de CBP, no suma los 110,000 cubanos que fueron beneficiados con el parole humanitario (o permisos de permanencia), desde que inició en el 2023, y tampoco incluye a quienes han emigrado con otro tipo de visados. Es cuando el mismo demógrafo cubano, Juan Carlos Albizu-Campos, explica: “En términos del año fiscal finalizado agosto, el número de ‘encuentros’ de cubanos en las fronteras de los Estados Unidos, ya ha superado la cifra registrada en el año fiscal 2023. En términos de año calendario, faltando el último cuatrimestre, se puede esperar con toda seguridad que el número total de emigrantes hacia ese país, alcance algo más de 260,000 personas, superando lo registrado el año pasado, por lo que puede decirse que la oleada migratoria se encuentra en una ‘meseta’ sostenida desde el 2022.”
Y diciembre es el mes de mayor afluencia de cubanos en el actual año fiscal, cuando las autoridades estadounidenses registraron un total de 25,048 inmigrantes en puntos fronterizos; y en el actual 2024, son casi 70,000 los cubanos que han sido interceptados por la Guardia Costera en altamar, que es, además, una de las rutas más peligrosas que emprenden los cubanos a través del Estrecho de La Florida, como apuntamos al inicio de este reportaje.
El convencimiento de que nada cambiará en Cuba, los hace marcharse
Cada día que amanece los cubanos se despiertan, además de tener sus estómagos vacíos del día anterior, con la idea de salir “al mercado negro”, para conseguir algo para ellos y sus familiares y así puedan “echarle algo a sus estómagos”, narra un cubano mientras mira a derecha e izquierda, dando a entender de que alguien del comité de defensa de esa calle, podría escucharlo y pasar el “chivatazo” a la policía y ser detenido, que sería algo peor que no tener nada qué comer diariamente.
En otras palabras, el ciudadano que vive actualmente en Cuba y ha pasado esas vicisitudes, sabe que nada cambiará en la isla, que si no ocurrió nada con la muerte del tirano Fidel Castro, mucho menos cambiará ahora y albergar esperanzas de un futuro mejor, equivale, además de estar peligrosamente equivocado, a una idea irracional, totalmente desvinculada con la realidad. Por eso, acarician secreta y calladamente la idea de marcharse de Cuba y no se lo participan a nadie en sus viviendas, hasta el día anterior a la partida. No sea que alguno de los familiares sea interrogado por las autoridades y suelte esa verdad que dice que uno de sus miembros planea irse a los Estados Unidos, el mayor enemigo del régimen comunista de la isla.
En otros términos, el convencimiento de que la vida dentro de Cuba es una auténtica miseria, les fortalece el deseo de marcharse lo más pronto posible. Y planean “el cómo, el dónde y el cuándo…”
¿Pero qué características tiene la realidad de Cuba en la actualidad? Hay una verdad irrefutable: cada vez es peor. Ya no se puede subsistir siquiera registrando los botaderos de basura que hay apostados en algunas calles de La Habana, por ejemplo. “Ya en los botes no hay siquiera basura para comer”, cita un cubano que nos pidió el anonimato por razones obvias. La crisis general en la isla alcanzó el pico más alto en el 2021, con cortes más reiterativos de la luz eléctrica; el agua está faltando más a menudo, lo mismo que la comida y los medicamentos. Y si antes de ese año la situación era peliaguda, a partir del mismo 2021 la situación se ha vuelto caótica.
De hecho, los cubanos dentro de la isla esperan que el cambio no se dé en Cuba misma, sino afuera… Es por eso que ellos se consideran los agentes directos e irrenunciables de ese cambio y se hacen a la mar, para llegar directamente a los Estados Unidos, a Venezuela o México. Cualquier país puede servirles de apoyo y de ahí, caminar por el resto de América hasta el objetivo final que es la frontera estadounidense, al sur. Mientras tanto, la represión, a raíz de las protestas históricas del 11 de julio del 2021, ha recrudecido y se ha tornado “irrespirable” o inaguantable, mejor dicho.
El turismo cayó vertiginosamente por causa del coronavirus que los chinos comunistas difundieron por el mundo y ello ha repercutido ferozmente en la economía general de la isla. Así mismo, la ayuda de socios de Cuba, como Venezuela y México, ha disminuido y han imposibilitado vivir en la isla. Por eso es mejor marchar, irse lejos, hacia donde la imaginación, el deseo ferviente y la voluntad los lleve: a Nicaragua (otro país comunista); Colombia o Brasil, y de ahí, cruzar a pie América, la selva del Darién entre Panamá y Colombia, hasta llegar a la frontera estadounidense y esperar allí hasta que se pueda ingresar legalmente. Cualquier lugar en el planeta podría ser mejor que Cuba. De eso no tienen la menor duda los inmigrantes.
Tanto las autoridades cubanas como las norteamericanas, finalmente coinciden en algo: “esta es la ola migratoria más grande de la historia de Cuba” y ha llamado todas las atenciones. Incluso, las proyecciones de las Naciones Unidas prevén que en el año 2,100, la población de la isla estará por debajo de los 6 millones de habitantes, contando a la camarilla en el poder, que se ha hecho millonaria con sus negocios turbios, donde está involucrada la droga de los cárteles colombianos y venezolanos y las divisas de los turistas que pasan a las cuentas bancarias de los dirigentes cubanos. El panorama es tan poco halagüeño, que el demógrafo citado, Albizu-Campos, cree que esa cantidad de pobladores de Cuba llegará antes de la fecha estipulada por la ONU. “Con toda seguridad.-Afirma nuestro entrevistado-. Es una posibilidad real que ya está a las puertas, en el futuro próximo. No creo que haya que esperar al año 2,100 para presenciarlo.” Y añade: “Las personas se van porque existe un conjunto de factores de rechazo que las empujan a abandonar su lugar de origen. ¿Revertir el éxodo? ¿Detenerlo? ¿Cómo? Mientras esos mecanismos de rechazo, presentes en el país desde hace al menos 60 años, y su efecto acumulativo sobre la decisión de emigrar, sigan presentes, no se detendrá el éxodo. Sobre todo en condiciones en que la represión de la voz, no permite posibilidad alguna de cambio, y al confabularse con la desaparición de las antiguas restricciones de viaje, hacen de la salida la única alternativa percibida como solución a los problemas.” Asegura Albizú-Campos.
Una síntesis de esa inmigración de cubanos la podemos plantear de esta manera como cierre de este reportaje: mientras en Cuba ni los botaderos o basureros no dan siquiera una miserable cáscara de fruta para comer a quienes buscan en las profundidades de esos recipientes apostados en algunas esquinas de las calles; en Miami, sus paisanos que hace años llegaron a los Estados Unidos, viven en medio de la abundancia en todos los sentidos y hasta pueden decir fácilmente: “aquí somos felices, lejos de la miseria implantada por el Castro-comunismo.”
Huelgan otras palabras de más…
Mafia Italiana Sigue Muy Activa en su País.
Como en sus Mejores Años
ROMA, Italia-Quien haya creído alguna vez que los mafiosos italianos ya pasaron su mejor momento y que son grupúsculos en extinción, se equivocó de medio a medio, porque estos delincuentes supra-organizados, están demostrando a diario que siguen tan vigentes como en sus mejores tiempos.
Recientemente, se hicieron sentir en toda la nación cuando amenazaron por enésima oportunidad al sacerdote católico don Antonio Coluccia, quien, para mejores señas, cuenta con protección policial las 24 horas del día y durante todo el año. Y no solamente lo amenazaron, sino que intentaron perpetrar el crimen que le tienen prometido a este religioso conocido por su postura “anti-mafiosa” y que vive al “filo de la muerte” desde que comenzó a entrometerse en los asuntos oscuros de estas organizaciones, poderosas por demás.
Un ataque que no fue el primero, y tampoco… el último
Don Antonio fue atacado de hecho, en el barrio Quarticciolo, en esta Capital italiana, cuando participaba en una marcha contra la delincuencia y el narcotráfico. Un parte de la policía de la región de Lacio, firmado por la consejera de seguridad, Luisa Regimenti, expresó su total solidaridad con el sacerdote de 47 años de edad, quien ha trabajado muy activamente en los suburbios de Roma. El mensaje difundido a toda la comunidad y a los medios de prensa, dice entre líneas: “Estoy segura de que don Coluccia no se dejará intimidar, sino que multiplicará sus esfuerzos por devolver la dignidad y la esperanza a los muchos ciudadanos decentes que viven en el barrio. La acción de don Coluccia y de todos los que luchan contra el poder excesivo de las organizaciones criminales que dirigen el tráfico de drogas, es fundamental. Estaremos a su lado en esta batalla por la libertad, la legalidad y el renacimiento de los suburbios romanos contra todas las mafias.” Puntualiza.
Y es que el clérigo fue atacado con tablones, botellas y palos y se escuchó una sentencia de parte de alguien que no fue identificado y que se encontraba dentro de la muchedumbre: “¡Se te acaba el tiempo. Te vamos a matar!” La sentencia ha quedado en el aire y quienes saben de los avatares de la mafia italiana, saben que, en el tanto se le den oportunidades, se cumplirá apenas haya una posibilidad para hacerlo.
Pocos días después, el sacerdote daba declaraciones al diario Roma Today y dijo al reportero que lo entrevistaba: “Volveré. Me comprometo a servir a la ciudad. Siempre lucharé por la justicia para los ciudadanos honrados que residen en este barrio. El domingo me detuve a hablar con unos jóvenes y entonces ocurrió lo que ocurrió. La situación aquí es terrible. Es mi deber concientizar a la gente en zonas asoladas por la droga, el abandono y la decadencia.”
En palabras simples, el clérigo tiene a los mafiosos hartos, ya que se entromete en sus asuntos y trabaja precisamente con esas gentes que, según el código mafioso, deberían servirlos a ellos y no a la sociedad normal y decente por la que lucha el ministro del catolicismo. Para ilustrar lo anterior, hemos de citar el hecho cuando convirtió a una casa que fue confiscada a un capo de la mafia, en un hogar para pobres y drogadictos. Por supuesto, los subalternos, los matones y sicarios que trabajaban para ese capo, después de las amenazas de rigor, intentaron matarlo, pero solo consiguieron agredirlo en algunos trances que se presentaron; y fue en el 2014 cuando la violencia contra don Antonio Coluccia comenzó, cuando vandalizaron su casa de habitación y su automóvil. En otra ocasión, en junio del 2015, dos hombres le dispararon sin poder alcanzarlo con las descargas de los revólveres e hirieron a una persona ajena, quien pasaba casualmente por el lugar. Otro intento se presentó en el 2023, propiamente en el mes de agosto, cuando un hombre intentó atropellarlo con una motocicleta, tipo scooter, en Tor Bella Monaca, un barrio pobre de las afueras de la Capital italiana. El sujeto fue detenido pocos minutos después, por intento de asesinato. Luego, en ese mismo barrio, se incendiaron contenedores de basura, a pocos metros donde se esperaba que estuviera el presbítero.
Muchos italianos piensan que si la mafia quisiera asesinarlo seriamente, ya lo hubiera hecho y que lo que están haciendo por el momento, es amedrentarlo, asustarlo para que deje sus acciones sociales, que lo abandone todo y deje “al material humano” que vive en las barriadas marginales de Roma, para ser utilizado como vendedor o distribuidor de la cocaína y otras drogas que comercia ilegalmente la mafia. “Para ellos (los mafiosos), asesinar a una persona que les interesa y les importuna, a pesar de que lleve escolta policial, sería cuestión de un breve esfuerzo, nada más y no mucho. Porque ellos saben cómo llevarlo a cabo.” Manifestó un ciudadano, versado en el comportamiento de estos delincuentes.
Pero no es el único, cita la policía de Italia. Y tal parece que la mafia ha dirigido sus objetivos contra otros sacerdotes, como el caso de don Antonio Coluccia. “Decenas de sacerdotes en toda Italia, han sido víctimas de atentados e intimidaciones por parte de la mafia.” Ha argumentado un oficial de la policía, quien solicitó el anonimato por razones obvias. Por ejemplo, el padre Maurizio Patriciello, quien vive con protección policial desde que una bomba estalló en febrero del presente 2024 junto a la puerta de su parroquia en Caivano, una localidad en las afueras de Nápoles, recibió también este mensaje amenazador: “Fuera de nuestro camino.” Las autoridades aseguran que se trató de la Camorra, indispuesta y muy enfadada por la lucha de este clérigo católico contra los vertidos ilegales de residuos tóxicos, de la organización mafiosa, en las tierras de cultivo de la región de Campania, en el sur del país. Es decir, los vándalos quieren seguir echando su basura encima de los sembradíos y el sacerdote, al oponerse a tales intenciones, se convirtió en alguien más que un enemigo circunstancial y pasó a convertirse en una verdadera molestia que hay que eliminar, así… de cualquier modo.
Otro caso es el del padre Luigi Ciotti, otro sacerdote antimafia, quien vive escoltado por la policía desde hace más de 10 años. Él fue el fundador de la Organización Libera, que identifica y recoge bienes confiscados a la mafia y les da un uso humanitario; es decir, todo lo contrario de lo que hacen los delincuentes. Aquí, en este pasaje en particular, extraemos del anecdotario la declaración que hizo al FBI estadounidense, el mafioso siciliano Marino Mannoia, quien confesó: “Los miembros de la mafia nos consideramos impunes, incluso ante el mismo Dios; pero nos da temor una Iglesia (Católica) que interfiera en nuestros negocios o señale la incompatibilidad entre el crimen y el Evangelio.”
En un intento por poner “punto final”, traemos del ayer los tristes recuerdos del padre Pino Puglisi, quien, en 1993, condenó a la mafia en Palermo, Capital de Sicilia precisamente. Y por esa razón fue asesinado el 15 de septiembre de 1993, a sus 56 años de edad. Fue beatificado en el 2013. Así mismo, del padre Giuseppe Diana, quien fue asesinado en marzo de 1994 por la Camorra, en Casal di Principe, cerca de Nápoles. Ambos eran firmes opositores a las actividades nefastas y al margen de las leyes, practicadas por esas organizaciones que están lejanas de desaparecer en Italia, a pesar de los años transcurridos y que, en la mayoría de los casos, aparecen extraordinariamente fuertes, incluso para los esfuerzos de la policía.
La Societá de Apulia
Es una de las organizaciones criminales más violentas que existen en la actualidad en esta nación del sur de Europa. Tiene en su poder el monopolio del tráfico de drogas y la usura, según informaciones emanadas de la policía italiana.
Algunas acciones que han ensangrentado al país, se recuerdan como aquel 2 de abril del 2020, cuando los italianos estaban en sus casas cuidándose del auge y expansión de la pandemia del coronavirus llegado desde China. Fue cuando la mafia hizo detonar una carta bomba en la puerta del centro para ancianos en Foggia, al sur de Apulia, y tenía la firma de La Societá, la cuarta y más violenta de Italia, que asesina más que la Camorra, incluso. Lo cierto es que el atentado dinamitero contra aquel centro social, era para eliminar a varios testigos que allí residían y que iban a atestiguar en un proceso contra los principales cabecillas de esa organización mafiosa. Se trataba, en su defecto, del décimo atentado en lo que iba del año, perpetrado en la misma zona, y tampoco fue el último de ellos.
La región de Apulia es característica en toda Italia por su belleza paisajística. Se ubica más allá de las fronteras transalpinas y se le reconoce mundialmente por ser un destino idílico para realizar allí unas inolvidables y extraordinarias vacaciones. Pero allí conviven junto a los residentes permanentes de la región y de los miles de turistas que buscan sus bellas playas naturales, una organización responsable de unos 300 asesinatos. Es cuando el fiscal nacional antimafia de Italia, Federico Cafiero De Raho, ha dicho en torno a este lamentable asunto: “La mafia foggiana se ha convertido en el primer enemigo del Estado.”
Hasta hace unos pocos años atrás, las autoridades creían que la zona estaba controlada por la Sacra Corona Unita; pero un reporte reciente de la Dirección Investigativa Antimafia (DIA), concedió la información que señala que existen varias organizaciones que se han repartido el territorio italiano y han relegado a la Sacra Corona a un plano casi insignificante. Para citar algunos casos que preocupan a las autoridades, en Cirignola los atracos a furgones blindados que transportan valores, ha sido la especialidad de la delincuencia que opera en esa región. Ahí también opera la mafia del Gargano, que se financia con la extorsión a los comerciantes que tienen sus negocios en ese mismo lugar. Y en último lugar, aparece La Societá, que trabaja entre Foggia y San Severo. Este grupo está asociado con la mafia albanesa y al monopolio en el tráfico de drogas y la usura. Actualmente, para colmo de males, La Societá Foffiana es la más violenta de las mafias italianas y uno de sus métodos letales consiste en disparar a la cara de sus víctimas, para desfigurar sus rostros; también coloca bombas a los comerciantes que no devuelven un préstamo o se niegan a pagar “el pizzo”, una especie de impuesto revolucionario que utilizan los mafiosos para financiar a su organización y que suelen pagar religiosamente el 80 por ciento de los extorsionados.
El gobierno de Italia, por medio de la DIA, considera que unos 20 clanes distintos entre sí, son los que operan en Apulia, una zona agrícola que hoy en día está en medio del auge económico, debido a la llegada de los turistas, quienes acuden en masa a disfrutar de los encantos de la región. Esos visitantes son famosos y multimillonarios de diversas partes del mundo, como la cantante estadounidense Madonna o la familia del ex presidente Barack Obama.
La Societá se ha expandido por el miedo de quienes sufren sus amenazas y extorsiones (“la omertá”); también se da en este organismo criminal la ausencia de “publicidad” tan propia de la mafia italiana. Es decir, opera lejos del foco mediático y es cuando Piernicola Silvis, ex jefe de la policía de Foggia, explica: “La cuarta mafia de Italia no tiene el mismo folclore ni glamour. No ha dado origen a mitos cinematográficos como Vito Corleone, ni a nadie que haya escrito ‘Gomorra’. Aquí solo hay asesinos. Pero si no hablamos de ella, es como si no existiera y no se puede luchar contra algo que no existe.”
Ciertamente, los orígenes de La Societá se remontan a más de 40 años atrás, cuando un jefe de la Camorra, llamado Raffaele Cutolo, se reunió con criminales pulleses para iniciar una colaboración que permitiera expandirse a la mafia napolitana. Sin embargo, hasta hace escasamente un año, la DIA abrió una sección operativa que se especializa en esta organización en concreto. Dicho acuerdo buscado por Cutolo no llegó a “buen puerto”, pero lo incentivó para crear su propia red criminal que se inspiró en la violencia de la siciliana Cosa Nostra en los años 90. Actualmente, La Societá desea competir en violencia con la N’drangheta de Calabria, que controla hoy en día el tráfico de cocaína por toda Europa.
Algunos datos que llaman la atención de los estudiosos, arrojan que en la mafia pullesa no se dan los rituales de iniciación, ni juramentos ni bautismo; y la familia biológica y la mafiosa es la misma. Ello explica por qué no hay arrepentidos entre sus filas o quienes quieran abandonar a la organización.
Un pasaje que ya es historia, recuerda que en el 2008, Rosa Lidia di Fiore, esposa de Pietro Tarantino, “capo” de San Nicandro Garganico, colaboró con la autoridades y gracias a esa decisión de la mujer, se pudo desarticular a uno de los clanes más sanguinarios de la zona, que estuvo inmerso durante más de 20 años en una sangrienta guerra contra otra familia mafiosa. Cuando se le preguntó acerca de los motivos de su alianza con la policía, di Fiore manifestó con un gesto de absoluta honestidad: “No quería que mis hijos fueran como su padre.” Por supuesto que, desde entonces, vive bajo protección policial, porque una traición de su “calado” la convirtieron en un blanco irrenunciable para la organización que tiene como deber, asesinar a quieres actúan como “soplones.” La versión final del fiscal de Bari, Giuseppe Volpe, indica: “Su ayuda fue fundamental para comprender un fenómeno mafioso que tiene mil caras y ha sido ignorado durante cuarenta años, a pesar de contar con una larga lista de muertos.”
Empero, a pesar de las buenas noticias… el final de la mafia en Italia, de sus múltiples grupúsculos y entidades, está muy lejos de producirse y, por el contrario, cada vez se descubren nuevos clanes, nuevas familias, nuevos delincuentes, a quienes gusta vivir “en el lado oscuro de la sociedad” y al margen de la ley. La tradición sangrienta continúa…
Dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, Confrontado con Todos y Agudiza Mayormente
la Crisis Socio-política en su País
CARACAS-Nicolás Maduro Moro, su narco-dictadura de izquierdas y su séquito de delincuentes, son fáciles de descifrar e, incluso, adelantarse a los movimientos que van a hacer en contra de las personas que no están de acuerdo con su régimen de carencias, opresión y miserias. Por ello, el recién abandono del país, realizado por el ex candidato presidencial, Edmundo González Urrutia, era lo más predecible que iba a suceder, como lo será, de igual manera, la posible encarcelación o abandono de Venezuela, de María Corina Machado, quien es la que está moviendo a las masas burladas de votantes, en contra del gobierno dictatorial incrustado en el Palacio de Miraflores. Los comunistas nunca han tenido gran diversidad de movimientos represivos, porque siempre echan mano a lo mismo, que se fundamenta en la persecución, el encarcelamiento, el exilio o el asesinato de sus oponentes. No hacen algo distinto nunca.
Pero lo cierto es que González Urrutia era requerido por la fiscalía venezolana, totalmente plegada a los intereses de la dictadura y si hubiera ido a la cita que le exigían, en el edificio de la Corte Suprema en Caracas, hubiese sido detenido y puesto tras las rejas en una celda y no se sabe por cuánto tiempo. Lo mejor que se le ocurrió fue refugiarse en la residencia particular del embajador de España en Venezuela, señor Ramón Santos, quien facilitó su escape hacia España. Un avión de las Fuerzas Armadas españolas arribó a Caracas y despegó especialmente para este trámite: llevar a bordo a Edmundo González Urrutia, quien, con toda seguridad, morirá en España por su edad avanzada (75 años), sin ver a su patria liberada del grupo de gamberros encabezados por Nicolás Maduro y manejada, “a control remoto”, desde Cuba, por los comunistas de aquella isla.
¿Por qué se habla de una sociedad sorprendida?
Los cables noticiosos que se refieren a la partida de González Urrutia de Venezuela, insisten en decir que su abandono de Venezuela causó “conmoción entre las filas opositoras” y “sorprendió a la sociedad civil venezolana” por su viaje intempestivo. ¡Aunque esa situación era posible imaginársela antes de que aconteciera! Quien haya analizado, no muy profundamente, las actitudes de Maduro y su grupo de delincuentes en el poder, puede esperar una coyuntura de esas características y calado. De hecho, uno de esos cables que le ha dado la vuelta al planeta, asegura de manera textual: “La noticia (de su marcha hacia España), corrió entre las filas opositoras en pocos minutos, sembrando desolación y desasosiego.” Pero ello era previsible. El chavismo siempre ha actuado de esa forma y es la más “humana” –si el término cabe-, que pueden utilizar para deshacerse de un personaje que les incomoda; porque, en otro estado de cosas, le hubieran asesinado o encerrado en prisión, que son otros dos métodos que suelen utilizar.
En síntesis, si se es venezolano y se vive a diario con esa opresión política, económica y civil, esa clase de situaciones en contra de los opositores al gobierno, no debe sorprender a nadie. La sorpresa real podría ser el momento cuando caiga la dictadura, algo que no se contempla por lo menos en los próximos 20 años, a lo sumo; o la muerte de alguno de sus miembros; pero la disidencia, la expulsión del país, la persecución o la corrupción en sus distintas tonalidades, son asuntos intrínsecos de esta narco-dictadura, de igual modo como sucede en Cuba y Nicaragua. El mal no debe sorprender a nadie en estas naciones.
Es del todo cierto, fundamentalmente, que tanto Edmundo González como María Corina Machado, eran algo así como “piedras en el zapato” del dictador Maduro y por eso la enorme presión se cernía sobre ellos y de manera apabullante. La fiscalía lo había mandado a llamar en tres ocasiones, para que llegara por sus propios medios y como no se presentó a esas instancias del chavismo, se ordenó la captura. Fue cuando él decidió refugiarse en la casa del embajador español. Mientras tanto, en las afueras, y mientras la comunidad internacional y la prensa no dejaban de comentar y vociferar en contra del robo de las elecciones en Venezuela, el régimen de Maduro continuaba con su campaña de terror contra los dirigentes opositores, activistas y ciudadanos que estaban identificados como simpatizantes de los verdaderos vencedores en las recién acaecidas elecciones nacionales. Es decir, Maduro mandó a perseguir desde ciudadanos comunes, hasta los testigos encargados de la logística y de recoger las actas de votaciones, en las que se decía con toda claridad que González Urrutia había ganado los comicios de manera contundente y convincente.
De tal manera, según el Foro Penal que analiza la situación en Venezuela de los encarcelados, la cifra de presos políticos ascendió, en los últimos días, de 350 que había antes de las elecciones, a 1,793; y de los cuales, 59 son menores de edad y 225, mujeres. Una cifra que va a crecer con el paso de los meses, sin dudarlo un ápice siquiera, pues el gobierno está dispuesto a recobrar su seguridad a cualquier precio.
Para el politólogo Walter Molina, analista de las incidencias en Venezuela: “Querían forzar el exilio de Edmundo González, porque es el presidente electo y tenerlo en el país era una presión constante. Lograron lo que querían. Y es un golpe muy, muy grande para muchos. Para millones. Mi admiración y respeto eterno a quienes han liderado.” Comentó.
Todo esto sucede en Venezuela ante la pasividad de hecho, aunque no de palabra, de parte de la comunidad iberoamericana, que se dedica a ver los acontecimientos, hacer exigencias verbales, pero no se presta para actuar de lleno y liberar a los venezolanos de ese régimen despótico, asesino y avasallante que tienen sobre ellos. Incluso, llama poderosamente la pasividad de la Casa Blanca durante la Era Biden, y lo mismo sucedió con el flemático Donald Trump quien, para formarnos una idea más completa de su falta de compromiso con las naciones oprimidas, más bien entregó al Afganistán modernizado y democrático, a los retrógrados talibanes, mediante un tratado que su secretario de Estado, Mike Pompeo, firmó con los fanáticos y fundamentalistas talibanes en un emirato árabe. Es decir, en los cuatro o cinco últimos mandatarios estadounidenses, el problema venezolano no ha significado nada para ellos. No califica siquiera como “inconveniente.” Y dejan entrever que los Estados Unidos solo actuarían decididamente a favor de Inglaterra, Francia e Israel, en el caso de que se encontraren en problemas. Es por esa razón que se vislumbra una larga vida (en este caso muerte), de la dictadura chavista en Venezuela, sin que nada ni nadie ose importunarla.
Retornando al caso de Edmundo González Urrutia, durante su permanencia en la casa del embajador de España en Venezuela, se hizo acompañar por seis estrechos colaboradores de María Corina Machado, su socia en estos avatares de la política. Y mientras estuvo refugiado allí, la presión del régimen de Maduro, por medio de la policía y los militares, fue insoportable; y eso tuvieron que sufrirlo, por supuesto, los españoles que allí residen.
Roce mayor y más fuerte con Argentina
Es evidente que Maduro no se queda nada para sí y está dispuesto a eternizarse en el poder, así, de cualquier manera. En otra faceta de esta aguda crisis que él está azuzando o echando más gasolina al incendio que él ha provocado, el enfrentamiento con el gobierno de Argentina ha subido más escalones y el roce ya alcanza índices nunca antes visto entre estos dos países.
Para comenzar, el chavismo está acosando a los colaboradores de María Corina Machado que están refugiados en la embajada de Argentina en Venezuela. Leamos a continuación lo que han declarado a la prensa algunas de esas personas: “Estamos con la electricidad cortada y con los accesos a la sede tomados,” dijo Magalli Meda, considerada la mano derecha de Corina y es una de los seis colaboradores que están en esa legación diplomática extranjera.
Pero la mayor acción en contra de los argentinos, la ejecutó el propio Nicolás Maduro, quien ordenó revocar la protección que se le había concedido al gobierno de Brasil, para que representara los intereses de Argentina en Venezuela. Es decir, ya ni los brasileños podrán hacerse cargo de las negocios argentinos y solamente queda por esperar una ruptura absoluta entre Venezuela y Argentina, en las fechas próximas. Ante tal decisión, la Cancillería argentina expresó su rechazo a la decisión de Maduro, de revocar unilateralmente la autorización a Brasil de representar los intereses de los argentinos en suelo venezolano y de ejercer la custodia de sus instalaciones diplomáticas y todo lo que hay allí adentro, incluyendo a los seis opositores a la dictadura que son perseguidos y refugiados políticos. Este fue el comunicado emitido por Buenos Aires: “La República Argentina rechaza dicha medida unilateral y advierte al gobierno venezolano que debe respetar la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, que consagra la inviolabilidad de los locales de las misiones. Asimismo, Argentina denuncia ante la comunidad internacional que en estos momentos patrullas de los servicios de inteligencia y fuerzas de seguridad venezolanas, rodean la residencia oficial en Caracas. El régimen de Maduro ha anunciado que ha revocado unilateralmente la autorización conferida al Brasil, para custodiar el inmueble oficial.” Cita el Ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Argentina.
Y es que desde que Brasil se hizo cargo de la legación argentina, a principios de agosto del presente 2024, los agentes venezolanos habían amainado en sus intenciones de molestar a los refugiados en la sede; de tal manera que Meda, Claudia Macero (responsable de Comunicación del Comando con Venezuela que lidera Corina Machado), Pedro Urruchurtu (coordinador de Asuntos Internacionales de Vente Venezuela, partido de Machado), el ex diputado Omar González (miembro de la dirección nacional de Vente Venezuela), Humberto Villalobos (coordinador electoral del comando) y Fernando Martínez Mottola (uno de los principales asesores de Machado), habían encontrado cierta paz en el interior de esa sede argentina emplazada en Caracas; empero, esa calma relativa cambió repentinamente, cuando el presidente de Brasil, Lula da Silva, criticó acremente a Nicolás Maduro, al decir de aquel: “Su comportamiento (al no presentar a su país y al mundo las actas electorales), es decepcionante y debe demostrar que ganó (las elecciones).”
A partir de esas “desafortunadas” palabras del mandatario brasileño, Patrullas de funcionarios del Servicio Bolivariano de Inteligencia (SEBIN), y de la Dirección de Acciones Estratégicas y Tácticas (DAET), que han reemplazado a las temidas “brigadas de exterminio” de las FAES, rodearon a la embajada argentina, encapuchados y fuertemente armados. Se acabó, de repente, la seguridad y la calma que allí hubo reinado alguna vez. El temor a un asalto por parte de las fuerzas chavistas, al interior del edificio, que es propiedad del gobierno argentino y por lo tanto es inviolable desde cualquier ángulo en que se mire, ha cundido entre los seis dirigentes venezolanos que están allí refugiados y han contado con la protección de los argentinos desde que ingresaron a esta sede.
En otro aspecto de esta crisis agravada por el propio Maduro, la cancillería argentina instó a la Corte Penal Internacional (CPI), para que dicte una orden de detención contra el dictador venezolano, Nicolás Maduro, y otros cabecillas del régimen y ante el agravamiento de la situación, luego de los comicios presidenciales que allí se dieron el pasado 28 de julio. La nota enviada hasta La Haya, Países Bajos, sede de la CPI, dice así: “Ante el agravamiento de la situación en la República Bolivariana de Venezuela a partir del 28 de julio pasado y la comisión de nuevos hechos que pueden ser considerados delitos de lesa humanidad, la República Argentina exhorta al fiscal de la Corte Penal Internacional que solicite a la Sala de Cuestiones Preliminares, el dictado de órdenes de detención contra Nicolás Maduro y otros cabecillas del régimen. La evidencia recogida en el curso de las investigaciones que lleva adelante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional y los hechos ocurridos con posteridad a los comicios presidenciales del 28 de julio, son elementos suficientes para considerar el mérito del dictado de las mencionadas órdenes de detención.”
La canciller argentina, Diana Mondino, señaló, por su parte, durante el III Encuentro Regional del Foro Madrid, en el que participó, que “la situación en Venezuela es triste y si existe alguna manera para que podamos ayudar para que haya una solución rápida y pacífica, mejor será.” Por supuesto que lo que ha molestado a Maduro, además de los refugiados venezolanos que están en la embajada argentina, fue el comentario que hizo Javier Milei cuando finalizaron las elecciones venezolanas: “Edmundo González Urrutia es el ganador indiscutido de las elecciones.” Dijo el mandatario de los argentinos y ello fue motivo para que el dictador venezolano “hundiera más el puñal en el alma de Milei” y lo considerara un enemigo suyo a ultranza y de su dictadura. En acto seguido, ordenó la expulsión total del personal argentino acreditado en Venezuela.
Para concluir el presente reportaje, treinta ex presidentes iberoamericanos firmaron un documento que fue presentado por el ex mandatario colombiano Andrés Pastrana, ante la Corte Penal Internacional (CPI), en el que se acusa a la tiranía venezolana de violaciones exacerbadas contra los derechos humanos. Todos los jefes de Estado españoles firmaron, junto a los latinoamericanos, excepto José Luis Rodríguez Zapatero, profundo y decidido amigo de Maduro y su narco-dictadura.
Un Vistazo Introspectivo a la Mega-Cárcel Construida por la Administración de
Nayib Bukele en El Salvador
SAN SALVADOR-Ha sido algo así como “la manzana de la discordia” que ha puesto a pelear, a discutir y debatir a los acérrimos defensores de los derechos humanos -quienes no son otros que aquellos que defienden a los gamberros, a los delincuentes de “las maras” y nunca acudieron en defensa de las víctimas inocentes en la sociedad civil-, y quienes tomaron la impostergable decisión de construir este mega-edificio, para encerrar adentro de sus muros a esos mismos “mareros” para darle paz y seguridad a los salvadoreños en general.
Extrañas son las actitudes del ser humano en ocasiones, porque cuando deberían actuar en consecuencia por las situaciones que se han venido presentando en perjuicio de la sociedad, por el contrario, se han venido en contra de los ejecutores policiales y de la justicia clara y centrada emitida por los jueces. Eso precisamente ha sucedido en El Salvador, donde cada vez son más quienes atacan al presidente del país, Nayib Buhele, por su determinación de levantar la mega-estructura carcelaria, en lugar de aplaudir su valentía y denodada lucha contra el hampa asesina que mataba en las calles de las ciudades salvadoreñas, a diario, y a toda hora que quisiera.
Algunos le llaman “el Alcatraz de Bukele”
En su interior y en sus muros, siempre hay una claridad otorgada por las potentes lámparas que están encendidas durante toda la noche, de todas las noches. Esa misma luminosidad está presente en las celdas donde yacen los peores asesinos juveniles que dio El Salvador a su realidad. “Es imposible escapar. Estos psicópatas van a pasar la vida entera entre estas rejas”, dijo un alto funcionario de justicia del actual gobierno salvadoreño, en una descripción escueta pero cierta de lo que es esta mega-cárcel, la más grande del continente americano, contando a las erigidas en los Estados Unidos.
Esa luz artificial significa que aquí nunca se hace de noche, porque irradia en las celdas y en el patio interior las 24 horas del día, mientras los reclusos que tienen en sus consciencias los más horrendos crímenes y extorsiones conocidas en este país centroamericano, el más chico territorialmente de todos, tienen que dormir sobre una plancha metálica que conforma a los camastros de hierro, que llegan hasta los techos de los cubículos donde están encerrados. Además, las cámaras que transmiten su realidad por circuito cerrado, los observan durante esas 24 horas, ininterrumpidamente.
Cuando es la hora de ingerir los alimentos, esos mismos que les quitaron las comidas a miles de salvadoreños que tuvieron que renunciar a sus trabajos, y otros se hicieron a las carreteras para caminar hasta la frontera con los Estados Unidos, huyendo del flagelo de “las maras”, ahora tienen que comer con sus propias manos el escaso arroz y los frijoles que les dan aquí en esta cárcel, pues no les facilitan cubiertos ni de cartón siquiera, para que no los conviertan en armas mortales. Tampoco esa dieta es para consentirlos en modo alguno: “se come lo que hay, lo que el comandante del penal ha decidido y justamente no son manjares”, como los defensores de los derechos humanos quisieran para estos criminales.
Tienen que bañarse a diario y lavarse los dientes en pilas de piedra y hacen sus necesidades en retretes colocados de dos en dos, en el fondo de cada celda y a la vista de los guardianes. Aun así, se les permite salir un máximo de 30 minutos al día a un enorme pasillo interno, pero siempre con sus permanentes grilletes en pies y manos, que los mantienen encorvados, según las fotografías que el mismo gobierno de Bukele ha difundido a la prensa nacional e internacional. ¡Nada de contemplaciones, de condescendencia con estos supra-asesinos que llenaron las calles salvadoreñas de sangre inocente, que raptaron a hijas, nietas, esposas; secuestraron a quienes ellos quisieron y sembraron el peor terror jamás visto en esta población!
Van vestidos apenas con algo parecido a un calzón blanco y con el torso descubierto, totalmente rapados en sus cabezas y con sus miradas puestas en el suelo. Mientras tanto, y sin que ellos lo sepan con certeza, varios policías con sus cabezas dentro de una capucha, y armados con fusiles de asalto, los vigilan atentamente, sin perderles movimiento alguno. Están prestos a disparar si el momento y estos asesinos así lo demandaren. Esos centinelas los observan desde los techos y desde la misma rampa del patio por donde caminan los delincuentes.
No todo es “inhumano” como recitan cansinamente sus defensores, más allá de las fronteras de El Salvador, porque se les permite hacer ejercicios corporales. La gran mayoría de ellos gozan de excelente salud, están pesados y obesos, debido a las leyes criminales que ellos mismos montaron en el país y al dinero que les arrebataban a los salvadoreños trabajadores que ellos encimaban, maltrataban y asesinaban.
Pero la mayor parte del tiempo, “los mareros” presos en esta mega-cárcel mandada a construir por el presidente Bukele, permanecen en sus celdas sin poder leer otra cosa distinta a las Biblias que el gobierno les facilita, pero no pueden ver periódicos, ni telediarios ni “alcahueterías” de ese tipo, como se acostumbra en otras penitenciarías de América Latina. Allí solo tienen oportunidad de sumirse en sus propios pensamientos y recuerdos y, si lo desean, hacer recuentos de las fechorías que cometieron cuando El Salvador les pertenecía y les rendía pleitesía. A pesar de esas Biblias, no reciben ninguna clase de asistencia espiritual, no sea que algún sacerdote de estos, presumiendo de su humanismo, les facilite algún cuchillo o un medio para someter a algún guardia y causar el caos en el penal.
Lo cierto es que, si quisieran escapar, tendrían que vencer a cuatro muros de 60 centímetros de espesor y tres metros de alto, que tienen en lo más alto a una alambrada de espino (púas), en forma de “alambre de navaja.” El peor creado hasta el momento por el hombre, para estas circunstancias precisamente. Y una vez que les observaran correr en su intento de escape, las ráfagas de la fusilería les matarían sin contemplaciones. Es justamente lo que merecen, de acuerdo al inmenso daño que hicieron a la población de este país. Un periodista español que tuvo la oportunidad de entrar a esta mega-cárcel, lo describió de esta manera, no sin un toque de lirismo o poesía: “El suelo de grava haría música con sus pasos. Nunca más conocerán el amor en libertad, ni probablemente el sexo. No tienen derecho a llamadas ni visitas. Se han deslizado hacia un agujero negro, un lugar eterno, frío y desangelado.” Probablemente, cada noche antes de cerrar sus ojos para intentar dormir y al amanecer, al primer llamado del alba, maldicen a Bukele, el presidente que les presentó batalla, los capturó y los ha hecho pagar por sus desmanes y gollerías.
Su verdadero nombre es Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot)
El director del presidio, a quien le está prohibido decir su nombre por razones obvias de seguridad, se trata de un hombre fornido, con anteojos y con el acento propio de los salvadoreños, y explica a la prensa que ha sido invitada para conocer el “claustro”: “Es imposible escapar. Estos psicópatas van a pasar la vida entera entre estas rejas.” Se le nota un dejo de orgullo, de bien cimentada arrogancia, pues es el primer director del Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), la cárcel más segura, grande y polémica de todo el continente americano. Algún día se hablará de esta penitenciaría como se ha hablado, filmado en películas y escrito en revistas y libros, de lugares de confinamiento humano, realmente célebres, como Alcatraz, en la famosa “roca”, en la Bahía de San Francisco, California, donde purgó su pena carcelaria Al Capone, para citar a su prisionero más prominente. El Cecot salvadoreño tiene todas las garantías y condiciones para convertirse en una celebridad entre las cárceles del mundo.
Mientras tanto, los humanistas, esos mismos que volvieron sus rostros al lado contrario, cuando El Salvador entero estaba entre las garras de “las maras” no hace mucho tiempo atrás, siguen luchando porque a estos criminales se les trate como si fueran “belladonas” o “angelitos caídos del firmamento etéreo.” Pero a Nayib Bukele, “el padre de esta idea”, le brillan los ojos cuando se refiere a este lugar. Él es el hombre que, en apenas 20 meses, fulminó a las pandillas principales que aterrorizaban a su país: “la mara salvatrucha” y “la barrio 18”.
Recordemos que el mandatario primero implantó en todo El Salvador el régimen de excepción –furiosamente criticado por sus adversarios ubicados en las ONGs de tinte humanista-; luego sacó al ejército a las calles y después suspendió las libertades constitucionales ante el estupor de esos mismos adversarios que no podían creer y mucho menos digerir lo que estaban presenciando. Posteriormente vinieron las detenciones de más de 70,000 delincuentes que engrosaban las filas de “las maras”; los soldados y los policías entraron a sus barriadas donde era peligrosísimo penetrar; y finalmente ordenó la construcción del mega-proyecto que dejó sin aliento a sus enemigos atrincherados en la oposición y en esas ONGs mencionadas.
Y para causar todavía más desasosiego e indignación, se postuló nuevamente a la presidencia de El Salvador, cuando la Constitución no se lo permitía; pero sus diputados, de mayoría congresista, cambiaron esos artículos que lo vedaban y Bukele consiguió ganar los últimos comicios a nivel nacional, con el 85 por ciento de los sufragios emitidos por el pueblo, a su favor. Iba a estar en el gobierno otros largos cinco años, mientras las voces en el exterior gritaban que había cometido fraude en todos los sentidos posibles y era el nuevo dictador del país. “La oposición ha acabado convertida en cenizas”, escribió un periodista internacional, presente en las votaciones. Ciertamente, los dos grandes movimientos representantes de las izquierdas y las derechas, el Frente Farabundo Martí para la Liberación nacional (FSLN), la ex guerrilla convertida en partido político; y la Alianza Revolucionaria Nacionalista (ARENA), donde se aglutinaba la oligarquía salvadoreña y los militares, pasaron a ser prácticamente un oscuro pasado del que nadie quiere acordarse. Bukele acabó con esas dos organizaciones que permitieron y toleraron irresponsablemente a “las maras”, sus asesinatos y demás delitos.
Es cuando la prensa europea así lo ha descrito de maneta textual: “Los salvadoreños, aliviados tras décadas de violencia, le han dado el poder absoluto. Él se ha valido de esta notoriedad para perpetrar una deriva autoritaria con la que controla al Poder Judicial y a las Fuerzas Armadas, que se multiplicarán por cinco en breve. Así, esta pequeña nación ha pasado de registrar la mayor tasa de homicidios del mundo, a una de las más bajas de la región. Bukele ha prometido alcanzar los ratios de Canadá. La impenetrabilidad y la fastuosidad de esta cárcel hermética, casan con la personalidad de un presidente con tendencia a la megalomanía (delirio exacerbado por el poder).”
Para finalizar el presente reportaje, retornamos al Cecot, la mega-cárcel salvadoreña. Para ingresar a este complejo penitenciario, el más grande del continente entero, hay que pasar primero por cuatro puestos policiales que están en amplias habitaciones de hormigón. Los funcionarios tienen sus rostros cubiertos con pasamontañas y proceden a registrar por todo el cuerpo al visitante. Nada se deja al azar. Preguntan a la persona si tiene tatuajes y los arcos de seguridad poseen rayos X, con los que pueden ver las vísceras de las personas que han llegado al lugar.
Adentro hay ocho módulos con equis cantidad de prisioneros de “las maras”, pero los administradores no dan la cantidad de esos prisioneros, pero cada módulo puede albergar perfectamente a 40,000 delincuentes. Una de las personas que aquí trabajan, dice: “Tras las rejas se encuentran los presos más peligrosos del país. Sicarios con decenas de asesinatos a sus espaldas que cumplen condenas de 700 años.” Les afeitan las cabezas cada cinco días, donde se les pueden ver los tatuajes que les identifican como miembros de las pandillas. Aun así, las ONGs aseguran que muchos de ellos son inocentes, que no deberían estar en esa mega-cárcel; pero en sus cabezas sin pelo se puede leer “mara salvatrucha” o “la barrio 18.”, para disipar cualquier duda existente o argumento que pretenda sacarlos a la libertad.
Observan a los visitantes con miradas profundas, como queriendo adivinar lo que cada periodista piensa de ellos, pero aquellas miradas de desafío que les hicieron famosos y terroríficos, ya no existen: se han acostumbrado a la idea de que allí ya no son nadie. Otro comunicador europeo ha dicho: “Afuera eran temibles, producían terror; ahora solo tienen semblante triste.” Pero todos tienen las manos manchadas de sangre y ese dato hará que no salgan de allí en lo que les resta de vida… una vida que en realidad, hoy y ahora, es muerte.
Afganistán,
Talibanes Cumplen Tres Años en el Poder con el
Terror de la Sharía
KABUL-El sendero que llevaba transitado Afganistán, a partir de la presencia de las tropas estadounidenses y de la OTAN en su territorio, era de modernismo, de una sociedad pujante que buscaba el progreso al más puro estilo occidental, con todos los adelantos tecnológicos, económicos y de mercado, tal y como se concibe en el mundo actual. Se podría decir incluso, sin temor a equivocaciones, que los afganos vivían, por fin, felices por lo logrado y lo que estaban por alcanzar en relación con la civilización y la innovación para sus vidas y actividades generales.
Sin embargo, no estaban alerta con lo que podría suceder en corto espacio de tiempo: la llegada a la Casa Blanca de un individuo analfabeto, tanto en lo político como en la mayoría de las situaciones que plantea el mundo actual, que iba a trastornar y destruir el modo de vida de los afganos de una manera radical y absoluta. Se trataba de Donald Trump, quien en su voraz intención de que le otorgaran el Premio Nobel de la Paz, pactó con los talibanes, acantonados en el vecino Pakistán, para devolverles el poder que las mismas tropas estadounidenses les habían quitado de sus manos, cuando fueron en busca de Osama bin-Laden, el jeque renegado que ordenó la voladura de las Torres Gemelas (The World Trade Center), en Nueva York.
¡Y cumplió! Trump sacó al ejército norteamericano de Afganistán en su último año, después de enviar a su enésimo Secretario de Estado, el obeso Mike Pompeo, el único que soportó los violentos y trogloditas cambios de humor en la Oficina Oval, que incluían gritos y humillaciones de parte de Trump a sus empleados. Pompeo parecía fascinado con su jefe, Donald Trump y éste también parecía extasiado con el “corpulento” emisario de la Casa Blanca, porque, con base en un servilismo a toda prueba, cumplía las órdenes del díscolo y equívoco mandatario, al pie de la letra.
Cuando Joe Biden llegó al gobierno en Washington, después de haber derrotado inobjetablemente a Trump en las elecciones nacionales, no tuvo otra alternativa que cumplir lo pactado, lo firmado entre Trump y los talibanes. Fue cuando observamos por la televisión internacional a miles de afganos tratando de salir de su país, en clara huida del talibán y al ejército democrático afgano cuando deponía las armas sin luchar, obedeciendo a los tratados firmados entre Trump y la dirigencia de los fanáticos talibanes. Recordamos a los ciudadanos afganos cayendo del fuselaje de los aviones militares que despegaban del aeropuerto de Kabul, llevando a los marines de regreso a sus casas en USA, y precipitándose al vacío en su desesperación por huir del talibán. Recordamos también la cara sombría, entristecida de Biden, en una conferencia de prensa, mostrando su pesadumbre y su impotencia ante la tragedia que se estaba dando en Afganistán, por culpa de su predecesor, el peor presidente de los Estados Unidos en toda su historia, solo comparable con el obtuso Jimmy Carter, al final de la década de los 70s.
Un país aislado, anclado en el retroceso
Desde aquellos aciagos días en los que se concretó la gran traición perpetrada por Donald Trump a los ciudadanos afganos, quienes gozaban de progreso, democracia y libertad, han transcurrido tres años que se han ido lentamente, como si los relojes trabajaran con deficiencia o el tiempo mismo en esta nación, corriera de otra manera, diferente al resto del mundo. Hasta el momento, a pesar de las épocas que se han ido, ningún otro país reconoce oficialmente al gobierno talibán, aunque éste ha logrado establecer relaciones diplomáticas de facto con otros gobiernos.
En agosto del 2021, el último Gabinete de corte democrático en Afganistán, dejó de existir, para dar paso a la administración inhumana y retrógrada de los talibanes, quienes aplican la famosa Sharía, que no es otra cosa que “el cuerpo del derecho islámico” o código detallado de conducta de quienes son regidos por estas leyes, que incluyen normas a los modos de culto, criterios de moral y que decide sobre lo que es permitido o prohibido y define la separación entre el bien o el mal. Una definición más gráfica de lo que significa la Sharía, se describe en estos términos: “Denota un modo de vida islámico, que es más que un sistema de justicia o derecho criminal. Como una cuestión de consciencia personal y guía moral de conducta. La Sharía es adoptada por la mayoría de los creyentes y practicantes musulmanes en distintos grados; pero, a diferencia de las orientaciones morales de la Biblia para los cristianos, no solo constituye un código religioso de su orientación vital, sino que codifica específicamente su conducta y rige todos los aspectos de su vida (…).” Y quienes incumplan las leyes establecidas en ese código de conducta, se arriesgan a ser ajusticiados (asesinados) por quienes tienen en su poder la aplicación de estas normas. En tal caso, no se conoce el número de afganos que han sido ajusticiados por el régimen talibán desde su regreso al poder y a la oscuridad de la Sharía. Pero se cree que han sido cientos de ellos, quienes nunca se pudieron amoldar ni acostumbrar al nuevo régimen y fueron detectados por “la policía de la moral”, detenidos, encarcelados, procesados y después asesinados por desobedecer lo escrito y que es esencial en el funcionamiento de la dictadura talibana.
Retornando al caso que nos ocupa, los talibanes celebraron el tercer aniversario de su llegada al gobierno en Afganistán y en una antigua Base militar estadounidense, en Bagram, se oficiaron discursos y un desfile militar, en reminiscencia cuando Donald Trump retiró a las tropas de los Estados Unidos y permitió el regreso de uno de los peores grupos de fanáticos que existen en toda la Tierra, causando, en consecuencia, el dolor y la tragedia de este pueblo que vivía en libertad, democracia, modernismo y avance en todos los campos del quehacer humano. No obstante esos clamores de victoria, los talibanes y su penosa administración, están aislados, y solo han conseguido algunos lazos diplomáticos de facto, con Rusia, China, Pakistán, India y algunos otros Estados del Asia Central. Evidentemente, esos amigos del talibán son del talante o gobiernos parecidos: antidemocráticos, dictatoriales, represivos, militarizados y anti-occidentales.
Empero, en palabras de Zabiullah Mujahid, portavoz del actual gobierno afgano, “Nuestro grupo mantiene muy buenas relaciones con todos los países del mundo.” Lo cual es una mentira del tamaño del Himalaya, porque el aislamiento ha sido “la moneda de cambio” con la que han pagado a los talibanes casi todas las naciones del planeta, al conocer la naturaleza de ese régimen instaurado en Kabul, Capital afgana. Esa falacia la pronunció el vocero en Doha, Capital de Qatar, durante una reunión que fue liderada por las Naciones Unidas y donde trataron de demostrar que “Afganistán no es un país aislado.” Pero sí lo es.
En aquel encuentro bilateral entre el organismo mundial y los talibanes, no se trató de dar reconocimiento a dicho gobierno, sino de debatir sobre el logro de una paz sostenible en Afganistán, su adhesión al derecho internacional y los derechos humanos, entre otros temas. Aspectos que son tan ajenos, tan irreconocibles por los talibanes, que aquella reunión quedó en “punto muerto”, sin resultado positivo alguno.
Por el contrario, con el paso de los días, el régimen represivo ha ido intensificándose y lo han sufrido la gran mayoría de los afganos, quienes perdieron libertades individuales, como el derecho a opinar libremente, a un salario digno y competitivo, sus puestos de trabajo a la usanza occidental, el derecho de usar tecnología moderna, como los teléfonos celulares, computadoras de cualquier tipo y estilo, comprar sus propios automóviles, viajar al exterior, al país de sus deseos, etcétera, etcétera. La vida para ellos es una completa “veda”, una limitación tras otra, so pena de persecución, cárcel y ajusticiamiento, si quisieran atreverse a interferir en el cauce que llevan las imposiciones decretadas por este gobierno basado en la Sharía y en franco retroceso en el tiempo y en todo lo que represente el modernismo.
En lo que se refiere a los roces con la comunidad internacional, el resto de la humanidad que goza de esas libertades que a los afganos les han sido arrebatadas, producto del pacto Trump/talibanes, uno de los principales puntos de fricción es el trato a las mujeres en Afganistán. Incluso, se habla de “apartheid de género”; es decir, las mujeres son menos que nada, de igual manera como lo fueron durante el dominio breve que tuvo el criminal Estado Islámico (Isis o Daesh), en la mitad de Siria e Irak, cuando conquistaron esos territorios de Oriente Próximo. En otras palabras, los talibanes, desde que retornaron al poder, con el pleno apoyo del bestial Donald Trump, entonces en la presidencia de los Estados Unidos, han echado por tierra los avances logrados en las dos décadas anteriores, en materia de derechos de la mujer. Esto significa que han desterrado a las mujeres de todas las edades, de los ámbitos de la vida pública en Afganistán y han decretado prohibiciones para ellas como asistir a centros de estudios más allá del sexto grado de la escuela primaria. Optar por los colegios secundarios o Universidades, ni soñarlo siquiera, porque les está totalmente vedado por el sistema implantado por los talibanes.
Los salones de belleza han sido cerrados en todo el país, lo mismo que los gimnasios y parques y no pueden salir a la calle si no van acompañadas por un hombre, pariente suyo o esposo. También deben ir vestidas con el burka, el atuendo de pies a cabeza, de color negro preferentemente, que sólo les permite mostrar sus ojos a través de una rejilla. Una ordenanza promulgada en mayo del 2022. Es decir, la Sharía en toda su intensidad y aquellas que se atrevan a desafiarla, corren el riesgo de ser lapidadas frente a una muchedumbre en una calle, una plaza o donde a “la policía de la moral” se le ocurra. “El gobierno talibán ha adoptado políticas más duras contra las mujeres, los activistas de derechos humanos, los ex militares y los grupos étnicos de Afganistán. El gobierno talibán carece no sólo de reconocimiento internacional, sino también de legitimidad interna”, ha sellado en este punto, Mustafá Musassir, experto afgano en relaciones internacionales. Y para Arian Sharifi, profesor de la Universidad de Princeton y exfuncionario del anterior gobierno afgano y que pudo escapar ante la llegada nuevamente de los talibanes al poder: “El pueblo afgano quiere una forma de gobierno basada en el Estado de Derecho y la ley debe reflejar la voluntad colectiva de la nación.”
Si quisiéramos resumir cuáles son los problemas más acuciantes que sufre este país enclavado en las faldas de la cordillera del Himalaya, en el centro de Asia, podríamos enumerar que se enfrenta a una serie de retos dignos de preocupación, con una economía paralizada y una educación general restringida (no apta para mujeres), hasta los continuos atropellos a los derechos humanos. Su economía está sufriendo las sanciones internacionales de los gobiernos que quieren un “golpe de timón” en el Estado afgano, más la huida de miles de profesionales sumamente cualificados, quienes prefirieron irse al exterior que sufrir al actual régimen encabezado y creado por los talibanes. Todo ello ha tirado al país a una profunda recesión económica. Quienes están llevando la peor parte, son las mujeres y los niños, los seres más vulnerables de esta sociedad extraordinariamente restringida.
No obstante, en la opinión del vice primer ministro, Maulvi Abdul Kabir, “el Emirato Islámico eliminó diferencias internas y amplió el alcance de la unidad y cooperación en el país. (Y) no se permitirá que nadie interfiera en los asuntos internos y el suelo afgano no se utilizará contra ningún país.” Posiblemente esto último lo dijo en reminiscencia del ataque a la ciudad de Nueva York, por parte de Osama bin-Laden, que se fraguó y gestó desde tierras afganas contra el World Trade Center o Torres Gemelas, el 11 de septiembre del 2001. Pero lo que presenta Afganistán actualmente y en contraste con lo dicho por este funcionario, hay gran inestabilidad en la sociedad, con millones de personas al borde del hambre y la hambruna y con un desempleo imparable, altísimo y sumamente preocupante.
En esta celebración de los tres años en el poder, los talibanes, como suele suceder con todos los regímenes totalitarios e inhumanos, cayeron en el absurdo de invitar a quienes abandonaron el país, a regresar; y a los gobiernos Occidentales, especialmente los europeos y al estadounidense, a interactuar y cooperar con el gobierno talibán, “porque estamos orgullosos de los logros obtenidos en estos tres años, como el refuerzo de la ley islámica y la imposición de un sistema militar que ofrece paz y seguridad.” Indicaron los oradores durante la celebración en la que asistieron unos 10,000 hombres (y ninguna mujer), donde fue oportuno observar al ministro de Defensa, Mullah Yaqoob; el de Interior, Sirajuddin Haqqani; pero el líder supremo, Hitabullah Akhundzada, no estuvo en el lugar del desfile. Un detalle digno de ser tomado en cuenta durante este desfile, fue observar el material militar que los soldados de la OTAN y del ejército de los Estados Unidos abandonaron al partir precipitadamente de Afganistán. Principalmente de los estadounidenses, quienes utilizaron helicópteros para trasladar a su personal diplomático de su embajada en Kabul, hasta el aeropuerto internacional hasta los grandes aviones que transportan tropas. Entre ese material fue posible ver helicópteros, vehículos Humvee y tanques.
¿Pero… quiénes son los talibanes? Conozcámoslos
Talibán significa en castellano “estudiante” y el término original es en lengua pastún. Surgieron a principios de la década de los años 90s, en el Siglo XX, en Pakistán, después de que el ejército soviético se retiró de su invasión a Afganistán y que significó posteriormente el desplome de la Unión Soviética como país e imperio.
En primera instancia, el movimiento talibán, de origen pastún, apareció por vez primera en seminarios religiosos, en su mayoría pagados con dinero provenido del gobierno de Arabia Saudita, donde se predicaba con dureza el islam sunita. Poco tiempo después, comenzaron a interactuar con las poblaciones del suroeste de Afganistán y fueron ampliando rápidamente su influencia. Prometieron, de paso, restaurar la paz y la seguridad y hacer cumplir su propia versión austera de la Sharía, una vez en el poder. La intención de los talibanes, desde que abandonaron Pakistán, fue la de conquistar el gobierno en Afganistán, aunque para ello significara la guerra, tal y como realmente aconteció; y en septiembre de 1995, capturaron la provincia de Herat, fronteriza con Irán; un año posterior, se hicieron con la Capital, Kabul, al derrocar al presidente Burhanuddin Rabbani, uno de los padres fundadores de los muyahidines afganos que resistieron a la invasión soviética. En 1998, los talibanes controlaban casi el 90 por ciento de Afganistán. A pesar de ese gran esfuerzo bélico, los talibanes fueron bajados del poder por el ejército de los Estados Unidos, en respuesta al ataque fraguado desde suelo afgano por Osama bin-Laden, el jeque saudita que declaró “la guerra santa contra los infieles” extranjeros.
Pero durante las conversaciones directas con el gobierno de Donald Trump, en el 2018, en Doha, llegaron al acuerdo “irreversible” de que las tropas norteamericanas se iban a retirar de suelo afgano, mientras los talibanes no iban a atacar a esas mismas tropas. También acordaron no permitir que al-Qaeda, el mismo grupo de bin-Laden, ni otros parecidos, operaran desde suelo afgano. Pocos meses después, las tropas estadounidenses abandonaron precipitadamente Afganistán, dejando atrás 20 largos años de ocupación y a una población sumida en el terror ante la llegada nuevamente de los talibanes al poder. Donald Trump sellaba así su traición a un gobierno democrático, el del presidente Ashraf Ghani, quien tuvo que abandonar el país, y todo porque el norteamericano buscaba desesperadamente el Premio Nobel de la Paz, que también esta vez le fue esquivo para dicha del resto del mundo libre.
Una faceta importante en la formación del grupo talibán, la marca justamente Pakistán, el país vecino, que le dio cobijo a esta agrupación islámica. De hecho, los analistas señalan a los pakistaníes como los “padres” o por lo menos, “los auspiciadores” de los talibanes, ya que residieron en su territorio hasta que tomaron la decisión de atacar Afganistán. Pero esa versión la han negado incansablemente los pakistaníes de que ayudaron a darle forma al talibán. Sin embargo, los hechos no dejan mentir, porque muchos afganos que inicialmente se unieron al movimiento, fueron educados en “madrasas” (escuelas religiosas), ubicadas en Pakistán, con el conocimiento, el consentimiento y el beneplácito del gobierno de Islamabad. Además, Pakistán quedó al descubierto cuando, al lado de Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos (EAU), fueron los tres primeros países que reconocieron a los talibanes cuando tomaron al poder por vez primera; y la última nación en romper relaciones diplomáticas con este grupo, fue precisamente Pakistán.
Otro dato para ser tomado en consideración sobre el hilo que une a los talibanes con los pakistaníes, fue el atentado mortal, en octubre del 2012, contra Malala Yousafzai, meses antes de que le otorgaran el Premio Nobel de la Paz, cuando se dirigía a su casa en la ciudad de Mingora, cuando el perpetrador fue un talibán pakistaní, quien le disparó sin poder quitarle la vida, dichosamente.
Fuere como fuere, los talibanes no despiertan confianza, ni tranquilidad, a los servicios secretos y de seguridad de Occidente y de los Estados Unidos, primeramente porque despertaron sospechas tras los ataques contra el World Trade Center de Nueva York, el 11 de septiembre del 2001, por la facción armada dirigida por el jeque saudita Osama bin-Laden, quien tenía su base de operaciones en el Afganistán gobernado por los talibanes. Posterior a la voladura de las “Torres Gemelas” por medio de dos Boing desviados de sus rutas y lanzados contra los dos rascacielos, la inteligencia estadounidense señaló al gobierno talibán de servirle de santuario a los terroristas; es decir, al movimiento al-Qaeda. Seguidamente, el 7 de octubre del mismo 2001, una coalición militar liderada por los Estados Unidos, invadió Afganistán en busca de Osama y para diciembre de ese mismo año, el régimen talibán ya había caído y se precipitaba en clara huida hacia el exilio… ¡A Pakistán, desde luego! En esta nación, los principales líderes de este grupo, se refugiaron en la ciudad pakistaní de Quetta, desde donde dirigieron a sus “afiliados.” Incluso, la noche del asesinato de Osama bin-Laden, éste se encontraba viviendo en Islamabad, Capital de Pakistán, cerca de un cuartel del ejército de ese país. Siempre se ha dicho que el régimen de Pakistán, islámico de principio a fin y en esencia, juega un doble rasero; es decir, amigo de los Estados Unidos y amigo de los terroristas de confesión musulmana también.
En la actualidad, de acuerdo a análisis militares hechos por la OTAN, el talibán está más fuerte que nunca con unos 85,000 combatientes a tiempo completo; pero el general Austin Miller, comandante de la misión liderada por los Estados Unidos en Afganistán, dijo en junio pasado que el país podría estar dirigiéndose hacia una caótica guerra civil, debido a la gran inestabilidad en la que se asienta su población y a los grupos insurgentes que permanecen en las montañas y que están en desacuerdo con el talibán.
Por ahora, los fundamentalistas islámicos que gobiernan a este indómito país de Asia Central, están de plácemes, celebrando sus tres primeros años en el poder. ¿Podrán celebrar otros tres años más o estamos ante el principio de su final?
Ex Presidente de Argentina, Alberto Fernández, Presunto Agresor de su Ex Mujer
BUENOS AIRES-El pasado reciente y la actualidad de este personaje argentino, llamado Alberto Ángel Fernández, nacido en la Capital de esta nación el 2 de abril de 1959, además de triste, es deprimente, y hay quien dice que es “repulsiva.” Y no le falta razón a quien opina y lo describe de esa manera.
Las dos razones más importantes por las cuales media población de Argentina y unos miles más, piensan así de este ex mandatario, se debe al hecho de que fue usado por la ex dictadora Cristina de Kirchner, para sostener un poder que se le estaba escapando de sus manos (o garras en su caso), y él se prestó, servilmente, a esta mujer, para ser utilizado y llevado aquí y allá, sin que su voluntad se opusiera o marcara su propio camino. Eso, por un lado; y por el otro, cometió tantos errores, dijo tantas cosas desatinadas, que apareció ante su pueblo a manera de un inepto, un descerebrado y un “cabeza hueca”, para llamarlo jocosamente y restarle peso a la descripción de su casi nula inteligencia. Cada día que decía algo, al siguiente volvía a aparecer ante los medios para disculparse por lo errático de sus palabras, sino recordemos la visita que realizó a este país, el presidente de España, Pedro Sánchez, y Fernández, su colega, aprovechó la ocasión para desatar su “argentinismo” y reafirmar lo que todo argentino siente en el alma y en su cabeza: “somos europeos” dijo. “Europeos pero nacidos en el confín del mundo, en la zona Austral suramericana”, le gritó la realidad a él y a todos aquellos argentinos que asintieron o estuvieron de acuerdo con su desaguisado.
Acusación tras acusación
Después de haber sido derrotados por el emergente y desconocido Javier Milei, Alberto Fernández y “su ama”, Cristina de Kirchner, regresaron a la vida doméstica, a sus casas comunes y corrientes, para vivir una vida lejos del glamour del poder. Atrás dejaron a una Argentina “en llamas”, en medio de un incendio financiero que el pueblo ahora mismo está sufriendo en forma de hambre, literal y evidente. Pero los problemas para Alberto, quien se dice ser abogado, profesor y político en una nación donde no hay gente sencilla y, por el contrario, todos afirman que una vez fueron “a la Luna” con el Apolo XI, no terminaron con su abandono de la Casa Rosada, sede del gobierno argentino.
Veamos: nadie quiere estar en los pantalones de Alberto Fernández, quien está en medio de varios problemas peliagudos que tienen que ver con seguros, en una causa en la que se le investiga por supuesta defraudación del Estado; y ahora, hace pocos días, la ex primera dama, Fabiola Yáñez, lo ha acusado de violencia de género por maltratos que se suscitaron cuando estaba al frente del país, en condición de gobernante. De hecho, esta mujer presentó un chat con imágenes (fotos), donde aparece ella golpeada por Fernández, su entonces pareja. Por supuesto, ahora está “en la mira” de millones de mujeres de este país, donde la emotividad, los desafueros, el melodramatismo, es “la moneda de cambio” de sus habitantes; es decir, los argentinos son “muy sanguíneos” y explotan ante la menor circunstancia que les es adversa o que no les gusta o satisface. Es por ello que las mujeres argentinas tienen en su objetivo al ex presidente, como si hubiesen sido todas ellas las agredidas y no le perdonarán lo que hizo con su ex mujer, así… de ninguna manera.
En lo que estriba al caso de los seguros, el ex mandatario está en medio de una investigación en la que es sospechoso, acusado de irregularidades en la contratación de pólizas de seguro para organismos Estatales, y ahora ha tenido que sumarle la denuncia provenida de su ex compañera sentimental, quien ha revelado el chat que ella escribió en aquel momento con quien era secretaria del ex presidente, María Cantero. Esto significa que la ex primera dama le contó en el chat a la ex secretaria, todos los desmanes, los actos violentos que ella sufría a manos de Fernández, quien se portaba con su mujer como un verdadero déspota o un martirizador de la peor calaña. Así consta en dicho documento, ahora en manos de un juez. Fabiola Yáñez, según consta en actas, es actriz y periodista, y en las fotografías dentro del mismo chat, aparece con signos físicos causados por las agresiones del machista.
La pareja ya no convive, porque, ante tales hechos aparentemente irrefutables, cada uno tomó un camino distinto al de la relación esposo-esposa; y el diario Clarín, uno de los dos más importantes de la Argentina, junto a La Nación, ha publicado lo siguiente: “En el teléfono habría fotos de la ex primera dama: una con un ojo y parte del maxilar superior, muy hinchados por supuestos golpes y otra, con visibles moretones en todo el costado derecho del tronco, con las costillas y la axila amoratadas de ese lado. La justicia también tendría en su poder un vídeo en el que se vería una persona identificable como Fernández, en una supuesta actitud violenta hacia su pareja.” Utilizando un poco la psicología sencilla y simple, posiblemente esa posición humillante en la que él no tenía voz ni voto al frente del gobierno, que era solamente un “fantoche” manejado y manipulado por el verdadero poder que era Cristina de Kirchner, lo trastornaba y no podía contener ese sentimiento de vasallo y de ser humano hueco, vacío, denigrado hasta lo más bajo. Esos episodios en los que Fernández supuestamente descargaba toda su desazón y su humillante frustración en la que todos decían de él que era el presidente “títere” de una marionetera (Cristina), ocurrieron presuntamente en la Quinta de Olivos, donde los esposos residían en aquellos años no muy lejanos, pues ambos acaban de abandonar el poder después de la derrota electoral sufrida por el peronismo.
El juez que ha tomado la causa en sus manos, es Julián Ercolini, el mismo que lleva el tema de los seguros en los que está hasta “la médula” el ex gobernante. De hecho, este magistrado ha iniciado un legajo reservado en el expediente y después lo envió a la Oficina de Violencia de Género, de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
Imágenes irrefutables por su claridad
“Contundentes.” Así las describen periodistas y jurisconsultos que han visto las fotografías que aparecen en el famoso chat; es decir, Alberto Fernández gusta de pegar con su puño cerrado a sus mujeres, en este caso específico a quien convivió con él, en situación de consorte, la ex primera dama Yáñez, quien dio declaraciones a la emisora Radio Mitre, en estos términos: “No quiero seguir con esto (con el caso), me hace mal. Tengo un problema de depresión en este momento”, más aun cuando todo el país está pendiente de la situación, mientras el supuesto agresor guarda silencio y no asoma siquiera su “europea nariz” por ninguna parte.
Empero, la Policía Federal no “está para nada deprimida” y allanó la casa de Fernández y le incautó el celular, su computadora laptop, la de escritorio también y otros aparatos electrónicos que podrían servir al juez para sacar valiosas conclusiones sobre este tema. Los uniformados federales se apersonaron en la casa del ex mandatario, ubicada en el barrio bonaerense de Puerto Madero, siguiendo las instrucciones emitidas por el fiscal Carlos Rivolo y su colega Ramiro González. Antes de esta acción policial, el mismo fiscal Rivolo ofreció a la mujer, Fabiola Yáñez, asistencia de la unidad especializada en violencia contra las mujeres. Evidentemente, la imagen, el prestigio del ex presidente Fernández, está “en el subsuelo”, navegando en las cloacas de Buenos Aires, donde ni los indigentes que pululan por esta Capital, quieren bajar, debido al poquísimo decoro que queda en sus vidas acabadas por la profunda recesión económica que les ha dejado el último gobierno que encabezó la dupla Fernández-Kirchner.
La denuncia de Yáñez contra su esposo, responde al delito de “lesiones leves en contexto de violencia de género,” según las leyes al respecto en este país suramericano (no europeo, como dicen los argentinos tozuda y con ridiculez). Así mismo, las autoridades policiales y judiciales tienen en su poder el teléfono celular de María Cantero, la ex secretaria de Alberto Fernández, en el que se muestran las imágenes y conversaciones de chat, que indicarían la posible comisión de ese delito. También, en una tercera denuncia, la justicia argentina está investigando al ex mandatario por presunto tráfico de influencias. Lo cual significa que no puede estar más hundido de lo que ya lo está en estos instantes, con una población que se muestra deseosa de verlo ingresar a prisión por causa de los supuestos tres delitos o hacerse justicia por sus propias manos, según se estiliza en este país.
El juez federal, Julián Ercolini, ha prohibido al ex presidente salir de Argentina y no acercarse ni contactar por ninguna vía a su ex mujer Yáñez, quien vive actualmente en Madrid, España, y que manifestó a medios de prensa “estar padeciendo terrorismo psicológico por parte de su ex esposo.” Este ha negado todos los cargos en su cuenta en la red social X y dijo que presentará pruebas ante los tribunales, de la falsedad que se le endilga. También informó que ha nombrado a la abogada Silvina Carreira, especialista en derecho de familia, para que lo defienda en este asunto que aparece “indefendible.”
Triste final para este “europeo que vino a América” en una maternidad de Buenos Aires y cuyo paso por la Casa Rosada solo fue “una pavada”, como dicen los argentinos… una mentira del tamaño del obelisco de la Avenida Corrientes, “348, segundo piso ascensor, no hay empleados ni botones y arriba coctel de…” ¿Puñetazos?
Disparan Contra Donald Trump y le Hieren en una de sus Orejas, Cuando Hacía un Discurso
en Pensilvania
ESTADOS UNIDOS-Todos vieron a Donald Trump agazaparse detrás del podio para oratoria; pero muy pocos vieron subir al techo del edificio cercano, al magnicida, un joven de 20 años de edad, llamado Thomas Matthew Crooks, portando el rifle con el que disparó en repetidas ocasiones contra el ex presidente y la concurrencia.
Fue en el preciso instante cuando Trump comenzaba su discurso, con su habitual estilo confrontativo y con esa seguridad que le ha dado el saber que su oponente Joe Biden, pasa por horas amargas y las encuestas le dan la ventaja sobre el demócrata, quien sufre lapsus mentales que le traicionan y le hacen ver mal en los debates y en otras apariciones públicas dentro de la campaña electoral que finalizará en noviembre próximo con las votaciones a nivel nacional. De repente, se vio sangrando a Trump en una de sus mejillas. El hilo de sangre le llegaba a la nariz y a su labio superior y el caos y la confusión eran totales en Butler, Pensilvania.
Los analistas e historiadores del pasado reciente, han llegado a la conclusión de que esos atentados contra presidentes y políticos, forman parte de una “tradición” nefasta en el país, debido al asesinato de varios ex mandatarios, desde Abraham Lincoln, pasando por John F. Kennedy, hasta llegar al intento fallido contra Ronald Reagan. Muchas personas alrededor del mundo, identifican a los Estados Unidos precisamente con los magnicidios de sus gobernantes y el atentado contra Trump ratifica esta afirmación.
Trump escribe en su red social
Después de que lo sacaron del sitio del mitin y del atentado y luego de que dieran de baja (mataran), al joven homicida, el ex presidente utilizó su red social Truth, para informar acerca de su estado de salud: “Me dispararon con una bala que perforó la parte superior de mi oreja derecha. Es increíble que un acto así pueda ocurrir en nuestro país.” Pues esto último no resulta “increíble”, tal y como lo redactó Trump, según hemos repasado en las líneas de arriba, porque es una “tenebrosa costumbre” que deviene desde épocas ya lejanas en la historia de esta nación. Más bien, no debería sorprender en un país donde han matado y han atentado fallidamente, contra varios de sus gobernantes.
Por su parte, el portavoz de la campaña de Donald Trump, Steve Cheung, informó: “Trump está bien y está siendo examinado por los equipos médicos. El ex presidente agradece a los servicios de seguridad y de primeros auxilios la rapidez de acción durante este acto despreciable. Él está bien y está siendo atendido en una instalación médica local.”
Así mismo, hay que tomar en consideración que murieron dos personas más, ajenas al equipo de campaña de Trump y que estaban en el lugar para escuchar el discurso del magnate, de acuerdo a una crónica aparecida en The Washington Post, además del magnicida que fue dado por muerto, como hemos dicho. Esos participantes en el mitin cayeron por la acción de la lluvia de balas que fueron disparadas sobre la concurrencia, según el fiscal del condado de Butler, Richard Goldinger, al periódico de la Capital estadounidense. Un detalle interesante se dio en el mismo sitio de los hechos, cuando el servicio secreto sacaba a duras penas a Trump, quien se valió de sus propios pies para salir de allí: grupos de seguidores del candidato republicano comenzaron a corear “U-S-A, U-S-A” y otro grupo que se mostró más exaltado, se dirigió, fuera de sus cabales, hacia donde estaban los periodistas para culparles de lo sucedido contra su líder. Increparon a los comunicadores de la prensa, llamándoles “izquierdistas” y “ustedes son los culpables (de todo esto).” Solo la presencia de la policía uniformada pudo evitar que el asunto llegara a mayores, con violencia manifiesta.
Otro detalle señala que los disparos comenzaron a sobrevolar por el lugar del mitin, justamente cuando Trump se refería con suma dureza, de acuerdo a su estilo de decir las cosas, a los inmigrantes. Precisamente estaba diciendo, en el momento cuando iniciaron los disparos, que en los Estados Unidos hay 20 millones de inmigrantes irregulares, a los que hay que deportar sin dilación. Pocos segundos después, se llevó su mano derecha a la oreja de ese mismo sector de su cabeza y se pudo ver la emanación de sangre que recorría su rostro hasta la nariz y la boca. Pocos instantes después, comenzaron las ráfagas de disparos del personal de seguridad del ex mandatario, que tenían la obligación de cuidar su integridad, hasta que circuló la noticia de que el magnicida había sido dado de baja en un techo de un edificio aledaño.
El FBI interviene y aporta los datos iniciales
El Buró Federal de Investigación de los Estados Unidos, el famoso FBI, comenzó a hacer las investigaciones pertinentes y de rigor e identificó rápidamente a la persona que atentó contra la vida de Donald Trump: se trata de Thomas Matthew Crooks, de 20 años de edad, residente en Bethel Park, Pensilvania, a una hora en auto del sitio de la congregación política en la que participaba como figura principal el ex presidente Trump. Abrió fuego desde el techo de un edificio cercano, en dirección diagonal a Trump. Usó un rifle AR-15, el arma más usada en los distintos tiroteos masivos que han ocurrido en este país, debido a su versatilidad y potencia. “Es el arma fetiche de los tiradores estadounidenses,” dijo un observador del acontecimiento sangriento.
Es un arma semiautomática y su uso y fama se remonta a la década de los años 50, en el Siglo pasado por su brutal eficacia. Fue usado durante la Segunda Guerra Mundial, en un momento cuando el ejército estadounidense buscaba renovar parte de su arsenal y hacerlo más letal para enfrentar al enemigo. Fue diseñado por Eugene Stoner. En 1963 se usó una versión automática en la guerra de Vietnam y su bala de tamaño pequeño, permitía a los soldados llevar gran cantidad de estas municiones, más que en otros casos y calibres.
Los aficionados a las armas hablan muy bien de este rifle, porque aducen que es muy versátil, se puede modificar con facilidad y por ello le llaman “lego”, porque se pueden montar y desmontar sus piezas muy fácilmente. En las armerías de toda la nación se venden numerosas piezas que se pueden ensamblar al fusil, desde miras telescópicas y cargadores de más capacidad, hasta dispositivos de mitigación de explosiones; y se le puede combinar con cascos, corazas de camuflaje y demás equipo táctico. Además, la recámara de balas se carga automáticamente.
Los expertos en armas señalan también que, además de su ligereza y gran potencia, este rifle, que bien podría ser “el arma nacional de los Estados Unidos”, es el predilecto de los amantes de los fusiles y está pensado para provocar una destrucción masiva de los órganos y los huesos con sus balas y por ello reduce las posibilidades de supervivencia. Michael Danone, ex policía, comentó a la prensa que “la bala salida de un rifle semiautomático no solo atravesará con facilidad a una persona, sino que puede perforar la pared que está detrás de esa persona y potencialmente, a través de esa habitación y hacia la siguiente pared. A los chalecos antibalas los puede atravesar como ‘mantequilla.’ Ese poder y precisión son útiles para fines militares, que es obviamente para lo que fueron diseñados. Pero es mucho más poder del que debería (tener).” Afirma el ex oficial. Desgraciadamente, se puede comprar con una facilidad pasmosa en todos los Estados Unidos, una venta legalizada de las armas a la que el mismo Trump ha defendido en más de una oportunidad y ahora ha sido víctima, precisamente, de esa legalidad.
En conclusión, el candidato republicano está sano y salvo por un extraño “sortilegio” o un milagro inesperado, pues la posición del magnicida era la idónea para darle muerte con relativa facilidad (todavía no hay explicación del por qué falló). Las investigaciones están en curso para determinar las razones que indujeron al joven a atacar a Trump y han informado que Crooks no llevó ninguna identificación al lugar del tiroteo y tuvo que ser identificado por otros métodos. “Ahora mismo estamos mirando fotografías y estamos intentando analizar su ADN y obtener una confirmación biométrica.” Explicó Kevin Rojek, agente especial del FBI,
Esposa de Joe Biden Insiste para que su Marido Continúe con la Candidatura
por la Presidencia de los
Estados Unidos
WASHINGTON, USA-(Especial para The City Newspaper) No es propio de una persona sensata y menos de una esposa, en el caso de Jill Biden, “empujar hacia el desfiladero” a su anciano y enfermo marido Joe, el actual presidente de los Estados Unidos, cuando la memoria, la vocalización y la retentiva hacen estragos en su condición cognitiva. Incluso el peso de dirigir a un país como los Estados Unidos, no es para un hombre con su fortaleza ausente, que se manifiesta en una evidente y convincente debilidad física y mental. Si Jill Biden tuviese la capacidad para reflexionar, para meditar a solas en su habitación u oficina, cuando su esposo no está presente, debería tocar su corazón en la más profunda introspectiva y convencer al viejo Joe para que dé un paso al costado, para que se retire y se dedique a descansar en una de sus mansiones, antes de que el progreso de sus enfermedades sea incontenible para él y sus médicos.
Por otra parte, en primer lugar la derrota para el buen Joe Biden está asegurada en este noviembre próximo, mes de las elecciones nacionales y generales en la Unión Americana. Será el triunfo de Donald Trump, donde este gamberro se vengará de todos los que lo han vilipendiado y han pedido a la justicia que le encierren, como el preso que debería ser sin apelaciones, y Joe Biden facilitará ese triunfo en el tanto no se retire de la candidatura por el Partido Demócrata, donde cada vez las voces preocupadas son más y mayormente audibles. En segundo término, desde el punto de vista médico, podría ser peligrosamente perjudicial para Biden, someterse a unas elecciones que serán “electrizantes”, cuando Trump lance contra él una andanada de ataques que, con toda seguridad, no tendrán las respuestas adecuadas que el candidato-terrorista republicano se merece. Ese esfuerzo descomunal le podría pasar “la factura” médica a Joe Biden, un individuo que, hace algunos años atrás, sufrió aneurismas y otras enfermedades no menos complicadas.
Jill Biden continúa con su tozudez
Cuando finalizó el debate en el que Joe Biden puso “todo el marrón en la acuarela”; es decir, fue un desastre de principio a fin, los demócratas lo buscaron allí donde se había ido a refugiar en su mundo de negros y grises, propio de una condición mental caótica y que en nada le beneficia, para pedirle que renunciara a la candidatura por la presidencia de la nación. Otros, más respetuosos, dialogaron con su esposa, la Primera Dama, Jill Biden, para que ella, en la quietud de su hogar, lo tranquilizara y le hiciera ver que, de continuar en las batallas electorales, significaría, además de una humillación sin precedentes, el triunfo inobjetable de Donald Trump, un individuo que le hará mucho daño a este país y al mundo entero, en especial a los ucranianos en guerra con los invasores llegados desde Rusia. Pero la respuesta de Mrs. Biden fue inesperada, ilógica, anti-natural y… ¡Suicida! “Un debate televisado no definirá la carrera de mi esposo. ¡Seguiremos luchando!” Respondió la Sra. Biden, dejando boquiabiertos a quienes le rodeaban en ese instante.
Y esas mismas palabras fueron las que usó en su entrevista concedida a la mundialmente famosa revista Vogue, cuya fotografía de cuerpo entero la sacó en su portada del 30 de junio recién finalizado. Recibió a los periodistas de esta revista en la residencia presidencial de Camp David, donde yacía reunida con el resto de su familia, incluyendo al “perdido” presidente de los Estados Unidos, quien utiliza frases y oraciones sin terminar, donde confunde “coronavirus con medicare” y tuvo la inmensa suerte –y no sabemos por qué razón-, de que Donald Trump no lo pulverizara e hiciera guasa de él en el debate recién acontecido. También, los telespectadores lo notaron titubeante, nada claro en su vocalización en varios tramos de sus intervenciones, incoherente, equivocándose una y otra más con los vocablos y conceptos y, como ya se ha dicho… sin finalizar las expresiones o frases. Pero él y su esposa, los Biden, han afirmado desde entonces, una y otra vez, que no se retirarán de la contienda electoral y lo peor.., van a derrotar a un agigantado y enardecido Donald Trump. Un imposible que todos sabemos que es eso precisamente… un imposible.
Sin equívocos, la presencia de Jill Biden, a lo largo de casi 50 años de matrimonio, según quienes les conocen, significa ser su confidente, la persona más cercana, su apoyo en los momentos malos, “su ancla” y su motivación. Algo así como “el viento a favor” que hincha sus velas y lo lleva por mares de calma y éxito; pero en esta ocasión se está equivocando de palmo a palmo, porque le está empujando para que continúe en busca de su reelección y se ha aferrado a esta frase: “El presidente –su esposo-, siempre hará lo mejor para el país.”
En la entrevista con Vogue, Jill Biden aseguró entre otras cosas que “cada campaña es única. Pero en este caso la urgencia es diferente. Sabemos lo que está en juego. Joe está pidiendo al pueblo estadounidense que se una para poner fin a toda esta virulencia. Ese hombre solo traería el caos y más división al país (en referencia indirecta a Trump, a quien no mencionó por su nombre en ningún momento de la entrevista).” Es evidente entonces, que la Primera Dama sigue aferrada, con terquedad inaudita, a la idea de que su esposo “está bien” y puede continuar con el enfrentamiento contra el republicano. Es donde cabe aquel viejo y popular adagio que dice que, “no hay peor ciego que aquel que se niega a ver.” Porque ella no quiere aceptar que Joe Biden está realmente mal; es más… su integridad física peligra, pues le podría sobrevenir otro aneurisma o un derrame o posiblemente su mente le juegue una mala pasada y se eche a andar por una concurrida avenida y resulte atropellado por un vehículo. ¡Hay tantas cosas que podría sufrir un hombre de su condición y con 81 años de edad! Incluso, él mismo reconoció que casi se queda dormido durante el debate con su archirrival Trump; y atribuyó el hecho al cansancio que le deparan los constantes viajes que, como presidente de la nación, está obligado a emprender a diario y a casi toda hora. Unos pocos días había estado en Normandía, Francia; y también en Brindisi, al sur de Italia, en la Cumbre del G7 y añadió a su respuesta: “Decidí dar la vuelta al mundo un par de veces poco antes del debate, no escuché a mi equipo y luego casi me duermo en el escenario.” Así sus propias palabras durante un evento de recaudación de fondos para su campaña política, celebrado en McLean, Virginia, y también en Washington. “No es una excusa, sino una explicación.” Añadió el mandatario.
Karine Jean-Pierre, portavoz de la Casa Blanca, casi de inmediato aseguró que el presidente interrumpió la medicación normal y rutinaria que le recetan sus galenos, para asistir sobrio al debate y negó rotundamente que padeciera Alzheimer u otro tipo de demencia. Aprovechó para defender a Joe Biden y decir de él que puede seguir ejerciendo su labor al frente del país a pesar de su edad avanzada, misma que le ha convertido en el mandatario de más años en la historia de los Estados Unidos. En cuanto a la ronquera que hizo escuchar mal su voz, los voceros de la mansión presidencial explicaron que se debió a un resfrío de varios días que padecía Biden en este instante ante las cámaras de la CNN.
Cuando finalizó el malogrado debate contra Donald Trump, Joe Biden fue escoltado por su equipo de trabajo y seguridad a la salida del estudio de TV y allí, durante seis minutos, expresó que lamentaba su desempeño en el debate, una disertación que consideraba crucial para ganar las elecciones. Posteriormente, en otro encuentro con los periodistas, pero en esta ocasión en la Casa Blanca, no quiso referirse al debate y mucho menos a su errática actuación en él.
Pocos días después, el influyente periódico The New York Times, publicó un artículo en el que su redactor aseguraba que Joe Biden había dicho que estaba consciente de que si volvía a sufrir un lapsus parecido al del debate contra Trump, se iba a apartar de las elecciones. No se sabe por qué razón el NY Times publicó tal texto, pero fue desmentido inmediatamente por la Casa Blanca. Y nuevamente la portavoz de la mansión presidencial, Karine Jean-Pierre, dijo que su deseo era el “de pasar la página” sobre las dudas sobre la capacidad física y mental del mandatario y candidato, para presentarse (o continuar mejor dicho) a la reelección. Subrayó que lo acontecido solo fue “una mala noche por un resfriado” que no convence a los suyos siquiera y el ruido va en aumento, con una presión cada vez mayor para que reconsidere si debe seguir en la carrera presidencial. “El presidente ha intensificado su agenda para tratar de combatir esas presiones y es consciente de que los próximos días pueden resultar decisivos.” Argumentó la funcionaria.
El periódico neoyorkino afirmó que Joe Biden reconoció ante un aliado cercano, bajo condición de anonimato, que “está sopesando si seguir en la carrera.” Pero la mansión de gobierno respondió al diario: “Esa afirmación es absolutamente falsa. Si The New York Times nos hubiera concedido más de siete minutos para comentar, se lo habríamos dicho.” Y nuevamente la portavoz mencionó al respecto: “Se mantiene en la carrera y el propio presidente lo ha dejado claro en una llamada que hizo al personal de su campaña: estoy en esta carrera hasta el final.” La fuente anónima del NY Times citó que, si Biden sigue cayendo en lapsus como el acontecido frente a Donald Trump en el consabido debate, “podría no ser capaz de salvar su candidatura. Él sabe que si tiene dos actos más como ese, estaremos en un lugar diferente.” Finalmente, el diario retituló el mencionado artículo, afirmando que “vienen jornadas cruciales” y retiró aquello que había publicado de que “Biden está sopesando retirarse.” Pero sus redactores insistieron en escribir que los lapsus que sufre Biden parecen ser cada vez más frecuentes, más pronunciados y más preocupantes. “Esos episodios no son predecibles –escribe el periódico neoyorkino-, pero parecen más probables cuando se encuentra en medio de una gran multitud o cansado tras un programa especialmente agotador.” Y el aliado anónimo remata con este argumento: “Si se queda en blanco en una entrevista o es incapaz de acabar las frases en los mítines o en ruedas de prensa, la presión sobre él será irresistible. Se trata de actos decisivos para el futuro de su campaña. Su rendimiento en esas intervenciones servirá para aclarar lo que la expresidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, calificó de duda legítima sobre si lo ocurrido en el debate es un episodio o una condición.”
Karine Jean-Pierre, siempre fiel a su jefe, el presidente de los Estados Unidos, respondió: “Nó (no padece Alzheimer, demencia o alguna otra enfermedad neurodegenerativa). Y espero que le estén haciendo la misma pregunta al otro tipo (Trump).”
En una sorpresiva llamada del propio Biden, les ratificó al Comité Nacional Demócrata y a su vicepresidenta Kamala Harris: “Me presento. Soy el líder del Partido Demócrata. Nadie me está echando. Vamos a ganar porque cuando los demócratas nos unimos, siempre ganamos (…).” Y en una crónica aparecida en el portal de Die Deutsche Welle (La Voz de Alemania), Joe Biden trata de disipar todas las dudas acerca de su candidatura: “Derrotaré a Donald Trump –citan los periodistas alemanes-. A quienes me critican, me preguntan si voy a seguir adelante con mi candidatura y me reprochan por ser demasiado mayor a mis 81 años, esta es mi respuesta: soy candidato y voy a ganar de nuevo. Tuvimos un debate la semana pasada. No puedo decir que fue mi mejor presentación. Desde entonces ha habido muchas especulaciones. ‘¿Qué va a hacer Joe? ¿Va a seguir en carrera?’ Déjenme decir esto tan claramente como pueda: sigo en la carrera. Derrotaré a Donald Trump (...). Le gané en 2020 y lo volveré a hacer.” Esas palabras las dejó escuchar en Madison, Wisconsin.
Aprovechó para atacar a Trump, al recordarle los errores del pasado cuando hizo recordación de algunas celebraciones; por ejemplo, el candidato republicano dijo, “el Día de la Independencia de los Estados Unidos, en el 2019, que los estadounidenses ganaron al ejército británico a finales del Siglo XVIII, mediante la toma de los aeropuertos (¡?), aunque el primer vuelo a motor, atribuido a los hermanos Wright, tuvo lugar en diciembre de 1903. Y luego dicen que soy yo el que se equivoca.” Afirmó el presidente norteamericano en esa intervención discursiva.
Los que podrían sustituirle…
Varios de los cuadros demócratas están severa y seriamente preocupados por lo que está sucediendo con los lapsus que sufre su líder Mr. Biden, y por eso han hablado con los congresistas para hallarle una solución al problema. La crisis es más que clara: Biden no puede ni con sus 81 años de edad, ni con una mente que no le funciona apropiadamente y es capaz de jugarle varios y feos episodios en momentos clave en su intención por continuar gobernando al país, después de las elecciones de noviembre próximo; pero tampoco quiere dimitir a su candidatura, lo cual representa un problema mucho más agudo y de muy difícil solución.
De acuerdo con una encuesta hecha por el New York Times, la distancia entre ambos candidatos, después del sonado debate de la CNN, se ha ampliado a favor de Donald Trump por tres votantes más que se decantarían por el republicano. Es decir, es de 6 a 3 entre los probables, a favor de Trump; y de 9 a 6 entre los votantes registrados. Ello no es halagador para el demócrata en modo alguno y preocupa más a sus cuadros partidistas cuando conocen estos resultados aritméticos.
Para el destacado asesor electoral demócrata, Dmitri Mehlhorn, la alternativa más “a la mano o la más obvia”, es la de la vicepresidenta actual, Kamala Harris; aunque no sería afortunada dicha decisión, según otros analistas. “Kamala Harris es más amenazante para esos votantes indecisos, que un Joe Biden muerto o en coma. Así que si Joe tiene que irse, será Kamala y si es Kamala, será más difícil (el triunfo ante Trump).” Asegura Mehlhorn. Por su parte, James Carville, antiguo ayudante de Bill Clinton, manifestó que “el 72 por ciento de la gente quiere algo diferente. ¿Por qué no dárselo? Solo piden una opción diferente.” Sin embargo, el papel de Kamala Harris, como “segunda de abordo” en el gobierno de Biden, no ha sido relevante: se esperaba mucho de ella, al considerársele una mujer de innegable carisma, inteligente y simpática, pero la misma inercia de su puesto en la vicepresidencia, donde el titular no tiene que hacer mucho a favor del gobierno, la ha terminado hundiendo casi en la inacción y en un inesperado anonimato y es posible que muchísimos norteamericanos no sepan hoy en día quién es la señora Harris, para pena de ella misma.
Otro nombre con fuelle y peso electoral y personal, “con luz propia” como si se tratase de un astro del firmamento político de los Estados Unidos, es la ex Primera Dama del país, Michelle Obama. Muy respetada, bien recordada por su trabajo en las dos administraciones de su esposo, Barack Obama, y tenida en cuenta como una mujer independiente e intelectual, escritora de varios libros. No obstante, esta dama de tez negra ha dicho reiteradamente que no tiene intención de presentar su nombre ante el electorado. Tiene el apoyo de su marido, el ex mandatario, quien le ha hecho saber que se siente visceralmente preocupado por el papel que está actuando su amigo, el querido Joe Biden. Habría que conversar con ella largas horas y durante varios días, para que decline en su negativa y sustituya al buen Joe, pero, por lo pronto, sigue aferrada a su vida personal, a ser consejera de sus dos hijas convertidas en hermosas señoritas y en acompañar a su esposo Barack, allí donde él vaya y se le requiera para dictar conferencias y asesorías millonarias, con las que gana su buen dinero.
Gavin Newsom, gobernador actual del Estado de California, en la costa Oeste de los Estados Unidos, se ha erigido como otra posible pieza política para sustituir a Joe Biden. “Es una estrella emergente del Partido Demócrata”, le consideran los periodistas y analistas que le conocen; y, en un futuro no muy lejano, podría aspirar a una candidatura presidencial, si “las tornas no cambian” en su vida y carrera profesional. Empero, un sondeo reciente le colocó muy mal frente a Donald Trump, con tan solo un 39 por ciento de los votos, frente al 42 por ciento del republicano.
Andy Beshear, otro de los posibles “recambios” del candidato Biden, es el gobernador de Kentucky. Le admiran el hecho de haber resultado ganador por la gobernación en un Estado mayoritariamente republicano; aunque un 70 por ciento de los demócratas que fueron consultados en una encuesta reciente, adujo no conocerlo o no haber escuchado nunca sobre él. Otra encuesta, esta vez de Reuters/Ipsos, le dio 36 por ciento de los votos a favor, por 40 por ciento de Trump, lo cual fue sorpresivo tratándose de un desconocido. La diferencia fue nimia.
Finalmente, Gretchen Whitmer, actual gobernadora de Michigan, que se colocó detrás de Trump en otra encuesta, con un 36 por ciento a favor por 41 por ciento del republicano, resuena en los oídos de los demócratas preocupados por la situación que plantea Mr. Biden. Pero esta dama y los demás que aquí hemos reseñado, responden solamente a especulaciones, posibilidades que, inevitablemente, se han estado barajando en las tiendas demócratas, “fules” a los que se podría echar mano para “salvar la partida”, las elecciones presidenciales que, si fueran mañana, Donald Trump arrasaría sin contemplaciones a un inseguro, inestable y nada fiable Joe Biden.
Hay quienes insisten en decir que la presión en el seno del Partido Demócrata está haciendo mella en el alma y la voluntad del candidato y su esposa Jill y podría revocar su decisión de continuar al frente de la candidatura hasta la celebración de las elecciones en noviembre. Las críticas expresadas con acidez, las encuestas y el pesimismo que flota en lo interno del partido, podrían crear grietas en su confianza, “a pesar del enroque del círculo cercano del presidente.” Aunque sus colaboradores más cercanos, junto a sus familiares, han dicho categóricamente que “Joe Biden no es un candidato cualquiera, sino el presidente de los Estados Unidos, el ganador de las primarias, el hombre que tumbó a Trump en 2020 y el que más opciones tiene de volver a hacerlo. Admitieron que la imagen ante decenas de millones de espectadores (en el debate), fue mala, pero al día de hoy, siguen argumentando que se debió a un mal día, un constipado o al cansancio por el jetlag tras largos viajes (aunque llevaba más de una semana en suelo estadounidense). Sin embargo, el apremio de donantes, de la unanimidad de la prensa progresista, enormemente crítica, de sus amigos e incluso de algunas voces del partido, tibias aún en público pero brutales en privado, está haciendo que Biden se plantee si debe seguir y si sigue siendo la mejor opción para frenar al que tildan de amenaza para la democracia y dictador en potencia (Donald Trump).” Cita un analista que declinó dar su nombre y prefirió el anonimato dentro de los demócratas.
Es muy probable, tal y como se presentan los hechos en estos días, que Joe Biden no renuncie o dé el paso a un lado, para que otro “recoja el guante” y abofetee al insufrible Trump; y solo hay un aspecto que deberá tener en consideración si quiere repuntar en las encuestas y quizás ganar en las elecciones presidenciales: tiene que lucir mejor en público, convencer con brillantez y hablar con esa coherencia que parece que su mal estado mental le ha arrebatado. Si no lo hace, se hundirá más y con él, los demócratas, el gobierno de los Estados Unidos y el mundo entero, ante un troglodita, violento, irascible y con el alma podrida, llamado Donald Trump, la seria amenaza que quita el sueño a las personas buenas y de gran voluntad que viven en el mundo entero.
¿Qué Sucedió Realmente en Bolivia con el
Intento de Asonada?
LA PAZ-Que en este país enclavado en el corazón de América del Sur se dé un golpe de Estado o solamente sea un intento, no es nada nuevo, pues los bolivianos los ha vivido desde que tienen memoria, lo mismo que las dictaduras. La última fue la del izquierdista Evo Morales, bajado del poder justamente por un golpe de este tipo, de lo contrario todavía lo tendríamos en el gobierno cometiendo sus desmanes y abusos.
Hace pocas fechas, el entonces jefe del ejército, el general Juan José Zúñiga, intentó bajar al presidente constitucional Luis Arce, por medio de la fuerza de las armas, pero fracasó estrepitosamente y está encarcelado en estos instantes, a la espera de un juicio militar. El plan del general era implicar al mismo presidente si fracasaba en derrocarlo, tal y como lo hizo; es decir, argumentó ante la prensa que Arce formaba parte del complot para propinarse un auto-golpe. Sin embargo, esa versión no le ha sido creída por nadie y permanece en una celda solitario, a la espera de la acusación de la fiscalía de la República.
En detalle, una incursión violenta se produjo en el Palacio Quemado, la sede del gobierno boliviano en esta Capital, La Paz. Estaba conformada por un grupo de militares rebeldes, liderado por Juan José Zúñiga, quien esgrimió cuando fue capturado que “no permitiré el retorno o un nuevo gobierno del ex presidente (dictador para mejores señas), Evo Morales.” Cuando el golpe fue frustrado, el presidente actual, Luis Arce, convocó a la población para “que se movilice contra el golpe de Estado, (porque) no podemos permitir que retornen las intentonas golpistas.” Así dijo a los congregados a su alrededor, mientras permanecía en la Casa Grande del Pueblo, un edificio que colinda con el Palacio Quemado.
Condena desde todos los ángulos
La reacción de los distintos sectores de la sociedad boliviana, ha sido unánime: han condenado a los golpistas; el espectro político del país, en concreto, junto a la comunidad internacional, sancionó verbal y moralmente al general golpista por ese intento que dichosamente resultó en fracaso. Poco a poco la calma fue retornando y la actitud del mandatario Arce, tranquilizando a quienes yacían bajo los efectos de la euforia “revanchista” contra los militares alzados en armas, ayudó bastante a serenar después de la coyuntura: transmitió unidad y calma; y su vicepresidente, David Choquehuanca, señaló enfático: “Vamos a aplacar los apetitos inconstitucionales. Llamamos al pueblo boliviano a movilizarse y a mantener la calma. Todos juntos vamos a derrotar cualquier intentona golpista.”
La tensión fue de menos a más y explotó cuando el general Zúñiga dejó escuchar desde la Plaza Murillo, frontal al Palacio de Gobierno: “Una élite se ha hecho cargo del país, vándalos que han destruido al país. Las Fuerzas Armadas pretenden reestructurar la democracia, que sea una verdadera democracia, no de unos dueños que ya están 30 y 40 años en el poder. Vamos a liberar a todos los presos políticos, desde la expresidenta Jeanine Áñez, los tenientes coroneles, los capitanes que están presos… A las Fuerzas Armadas no les faltan cojones para velar por el futuro de nuestros niños.” Subió a un carro militar después de haber dicho lo anterior, mientras sus subalternos ponían barricadas para impedir que los ciudadanos de a pie, llegaran hasta la Plaza Murillo cuando el presidente intentara llamarlos en su defensa. Luego, comenzaron a lanzar gases lacrimógenos contra un grupo de pobladores que se manifestaban en contra de la asonada; y, minutos antes de que ingresara al Palacio de Gobierno, el general Zúñiga afirmó que se estaba produciendo la movilización de todas las unidades militares, porque estaban molestas por la situación del país. Añadió que seguía bajo las órdenes del mandatario Luis Arce, pero que no iba a seguir siendo de esa manera y que tomaría medidas para que el Gabinete del Gobierno fuese cambiado lo más pronto posible.
En este lapso de nuestra narrativa de los hechos, es oportuno recordar que la expresidenta Jeanine Áñez, lideró un golpe de Estado contra el anterior dictador, el líder sindicalista indígena Evo Morales, plegado totalmente a la nueva izquierda latinoamericana, amigo, en su momento, del venezolano Hugo Chávez, el cubano Fidel Castro, su hermano Raúl Castro y de todo lo que oliera a marxismo-leninismo en el subcontinente. Una vez apartado Morales del poder, la señora Áñez, quien respondió al llamado del pueblo boliviano, cansado de una dictadura entreguista a Cuba, Venezuela y Nicaragua, se erigió como la nueva presidenta, aunque de manera transitoria, hasta que subió al poder Luis Arce, entonces muy amigo del depuesto Evo Morales, y envió a esta mujer a prisión, junto a los militares golpistas y desde ese preciso instante, se hallan detrás de los barrotes de sus celdas.
La crisis que recién ha explotado en las manos de los soldados y políticos bolivianos, ha tenido su origen en un intercambio extenso e intenso, entre Luis Arce y Evo Morales, quienes, como hemos dicho, fueron muy amigos en el pasado, pero ahora están confrontados abiertamente. Por ejemplo, el actual mandatario acusó, ante cuadros de seguridad de la policía y la escolta presidencial, que “un golpe blando” estaba en marcha, empujado y liderado por el propio Evo Morales, con la finalidad de acortar su mandato presidencial y así lo expresó: “Detrás de demandas aparentemente legítimas, en realidad hay un plan de acortar mandatos, lo cual esconde un peligro mayor: la destrucción del Estado Plurifuncional, de nuestro modelo económico social-comunitario-productivo y de los sueños de los bolivianos.”
Evidentemente, el antagonismo entre ambos políticos, Morales y Arce, está sustentado y reconocido por todos en Bolivia; y una vez que la asonada fue controlada por las fuerzas leales al mandatario, éste nombró a un nuevo comandante, responsable de las Fuerzas Armadas, en la persona de José Wilson Sánchez, y fue él quien ordenó el regreso de los soldados a sus cuarteles, mientras que el general Zúñiga no dejaba de repetir en prisión que se trató de un auto-golpe, porque Arce lo que busca “es levantar su popularidad. Yo le pregunté (al presidente de la República): ¿Sacamos los blindados? Y éste me respondió: ‘saca’” Pero el presidente lo ha negado absolutamente todo y ha afirmado que se trata de un intento por involucrarlo a él y ensuciar su prestigio que como buen gobernante tiene. A las pocas horas, fue detenido también Juan Arnez Salvador, excomandante de la Armada boliviana, cómplice en el golpe.
El nuevo comandante en jefe del ejército, Wilson Sánchez, en su primera medida en el cargo, ordenó el retorno de los soldados a sus bases: “Pido, ordeno, dispongo que todo el personal que está en las calles, debe retornar a sus unidades. El general Zúñiga ha sido un buen comandante. Le pedimos que no deje sangre derramada de nuestros soldados. Vamos a estar pendientes de que el gobierno legalmente constituido permanezca, de acuerdo con las normas del Estado.” Y con esta ordenanza, los regimientos movilizados para perpetrar la asonada, fueron abandonando la plaza frente al palacio y regresaron a sus cuarteles.
Testigos oculares narraron que el general Zúñiga entró a la casa de gobierno y se mantuvo adentro unos diez minutos aproximadamente; después salió sin brindar declaraciones de ninguna índole. Antes de su ingreso había dicho a los periodistas: “Va a haber un nuevo Gabinete de ministros. Estamos mostrando nuestra molestia. Es deber, es obligación del soldado de la patria, recuperar esta patria. Basta de destrozar, basta de empobrecer, basta de humillar a nuestro ejército. Las Fuerzas Armadas pretenden restablecer la democracia y liberaremos a los presos políticos, como el gobernador del Departamento (provincia) de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho; y a la expresidenta Jeanine Áñez, entre otros.”
La reacción inmediata del presidente Arce, al notar la presencia irregular de unidades militares en las cercanías del Palacio de Gobierno, fue la de escribir comentarios en su cuenta de X (antes Twitter): “La democracia debe respetarse”, pudo leerse en uno de sus textos redactados. Y dos horas después de haber tomado la Plaza Murillo, los golpistas se enfrentaron con organizaciones sociales afectas al gobierno y los soldados decidieron retirarse. Fue cuando el presidente de la República, Luis Arce, despidió a Zúñiga de la jefatura del ejército y nombró a su sucesor y con esa acción el golpe quedó “descabezado” y momentáneamente abortado, porque en las calles adyacentes y en otras ciudades bolivianas, la efervescencia continuaba en los cuadros militares. Los ciudadanos comenzaron a llenar los mercados para abastecerse de alimentos, en caso de que el asunto fuera a más y se prolongara indefinidamente en el tiempo. Empero, el mandatario arribó a la Plaza Murillo para transmitir un mensaje de calma a la ciudadanía, que poco a poco fue recobrando su habitual tranquilidad y las cosas comenzaron a normalizarse.
Unas dos horas después, el general Zúñiga fue detenido y llevado a dependencias de la policía capitalina, donde declaró falsamente que el mandatario fue quien le dio la orden de sacar los blindados a las calles y “preparar algo, para levantar su popularidad. Todo fue planificado entre el pasado domingo y el lunes.” Mintió el oficial que ahora está preso.
El rostro del sublevado y la crisis del país
¿Pero quién es este hombre que de repente saltó a la fama en el panorama político/militar suramericano? Juan José Zúñiga, antes y durante el intento golpista contra el gobierno legalmente constituido en Bolivia, era el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas bolivianas, cargo que le fue arrebatado por el presidente del país, según lo que hemos observado a lo largo de este reportaje. Comenzó intranquilo cuando lanzó una serie de amenazas contra el ex dictador Evo Morales, ya que éste intenta regresar al poder, así de cualquier manera, según estilizan los comunistas alrededor de la geografía mundial. Ello detonó la furia del general Zúñiga. De hecho, se opone a la candidatura de Evo Morales, prevista para el 2025, de acuerdo a anuncios que el mismo líder indígena hizo recientemente a los medios de prensa. Afirmaciones que hicieron que el general saliera en la televisión, para asegurar que “Morales no puede ser más presidente de este país.” Y en una entrevista para un medio boliviano, el mismo general reafirmó: “Soy un militar de honor que está dispuesto a ofrendar su vida por la defensa y la unidad de la patria. Nuestra patria, una vez más, está bajo el acecho de los enemigos internos y externos que buscan la división, la desestabilización y el odio entre los bolivianos, para apoderarse de los recursos naturales, en beneficio de intereses mezquinos y de grupos de poder que responden al caudillismo.”
Desprendiéndose de sus palabras arriba expuestas, se deduce que la crisis golpista se originó por el temor del general Zúñiga ante la candidatura prevista por Evo Morales, quien ya estuvo largo tiempo en el poder y causó mucho daño a la sociedad, la economía y la imagen de Bolivia en el exterior. Es por ello que llama profundamente la atención el hecho de que ingresó al Palacio de Gobierno por unos pocos minutos y salió de ahí con muestras de serenidad y poco después, el golpe fue abortado con relativa facilidad. Algunos observadores y analistas creen que conversó con el presidente Arce y le pidió que le entregara a Evo Morales para sacarlo del panorama político del país y encerrarlo en prisión y como el mandatario se negó a tal petición, el general Zúñiga se retiró a la plaza ubicada al frente de la Casa gubernamental. Es notorio también que Juan José Zúñiga vio con buenos ojos cuando la señora Jeanine Áñez depuso del poder a Morales y la acuerpó militar y moralmente en aquella acción considerada por muchos bolivianos, patriótica, ya que acabó con la dictadura corrupta de Evo Morales, el líder de izquierdas.
Alrededor, la situación del país sigue siendo de las peores en América Latina, ya que Bolivia está en el renglón de los seis países más pobres del continente, junto a Nicaragua, Haití, Cuba, Honduras y Venezuela. En la actualidad, sufre una crisis económica severa con escasez de dólares y combustibles; más los anuncios de protestas sociales que el gobierno cree que detrás de ellas, está el sempiterno Evo Morales. Recordemos que este indígena ha sido gran parte de su vida, un líder sindical efectivo y efectista.
La Asamblea Legislativa o parlamento, en su mayoría en manos de la oposición al oficialismo, está paralizada debido a una intervención de parte del órgano judicial y por la suspensión de las sesiones, ordenada por el presidente de esta Cámara, David Choquehuanca.
De modo que el intento de golpe de Estado ya ha quedado un poco en el pasado, con el transcurrir de los días; pero la inestabilidad social, permeada por la caótica situación económica, sigue allí, latente, y es una realidad que ha acompañado a los bolivianos desde tiempos inmemoriales. A esto hay que sumarle las ansias golpistas y las dictaduras que ha sufrido esta nación que no tiene salida al mar y ha sostenido un diferendo con Chile, justamente para que se le “regale” esa salida al Océano Pacífico que tanto necesita por razones económicas.
Si echamos un vistazo retrospectivo a lo que ha experimentado Bolivia, política y gubernamentalmente hablando, podríamos citar que ha vivido un auténtico “rosario” de dictaduras militares y civiles, en sus 180 años de existencia como nación. Lo cual significa que ha tenido 97 años de mandatos dictatoriales militares, 82 años de civiles y uno solo bajo la dirección de juntas cívico-militares. En el lejanísimo 1964, Bolivia comenzó a experimentar una serie de regímenes autoritarios, reñidos con la Constitución Política y fueron gobiernos de factos, que siguieron a unos 30 golpes dados por los soldados, lo cual quiere decir que en 180 años de independencia de España, el promedio ha sido de un gobierno cada 25 meses.
Es así como Bolivia, desde su fundación como república en 1825, ha sufrido dictaduras militares y civiles, triunviratos, juntas de gobierno, presidentes que no terminaron sus mandatos y decenas de golpes de Estado, más los alzamientos militares frustrados del mismo talante del último, del general Zúñiga. Y para no hacer más extenso el presente trabajo, caemos en la figura de Evo Morales, el causante directo e indirecto del último intento golpista, quien ganó las elecciones del 2005 y en el 2013, el Tribunal Constitucional permitió que este mismo líder indígena optara por un tercer mandato, al considerar que el primero que tuvo, no contaba porque el país fue refundado como Estado Plurinacional, en el 2009.
El 20 de octubre del 2019, Bolivia celebró nuevas elecciones y Evo Morales volvió a resultar ganador, pero se descubrió que había cometido fraude y se desataron protestas en todo el país. Además, la OEA evidenció “graves irregularidades en las votaciones” y el 10 de noviembre, el líder indígena anunció su renuncia, forzado por las Fuerzas Armadas y huyó del país, no sin antes denunciar un supuesto golpe de Estado en su contra. Y para finalizar este reportaje, recordamos que la senadora opositora a Morales, Jeanine Áñez, del Movimiento Socialdemócrata, asumió en calidad de presidenta interina de Bolivia, con la promesa de convocar a nuevas elecciones, mientras la nación se debatía entre la inestabilidad política y el caos en las calles con enfrentamientos ciudadanos, muertos y heridos.
El 18 de octubre del 2020, Luis Arce ganó las elecciones; y en marzo del 2021, ordenó la detención de la señora Áñez, quien fue condenada a 10 años de prisión, supuestamente por “incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución cuando asumió el poder en el 2019.” Hoy yace en prisión y sin aparente opción alguna de recobrar su libertad.
Evo Morales, el causante, entre bastidores, de toda esta molesta historia, regresó a Bolivia a finales del 2020 y en septiembre del 2023 anunció su candidatura a las presidenciales del 2025. Esto enardeció los ánimos y llevaron a la “leve asonada” que aquí hemos descrito, pues Evo es piedra de choque y ha forzado al militar golpista a decir: “No puede ser más presidente de este país. Llegado el caso, no permitiré que pisotee la Constitución, que desobedezca el mandato del pueblo (…). Este señor (Morales), es un verdadero mitómano, utiliza la mentira como estrategia para retomar el poder.” Lo cierto es que el general Juan José Zúñiga ha sido pasado a otro penal de mayor seguridad, llamado Chonchocoro, donde cumple prisión preventiva. Pero la pregunta que a él le molesta e inquieta a muchos bolivianos es… ¿Volverá Evo Morales al poder?
Eslovaquia
Intentan Asesinar al Primer Ministro
Robert Fico
BRATISLAVA-Fuee trasladado al hospital con heridas de bala en el pecho y en el abdomen, después de que un alienado intentara quitarle la vida. Los médicos le han dicho que deberá descansar por espacio de algunos meses para recuperarse totalmente, después de sobrevivir a duras penas, por poco, a este intento de magnicidio que acaba de sufrir.
Quien intentó asesinarlo es un hombre anciano, quien, al ser interrogado por la policía, argumentó un discurso en el que dejó ver la perturbación que padece, ya que sus preferencias políticas no están claras; sin embargo, es “el signo de los tiempos”, la época convulsa por la que atraviesa este país centroeuropeo que una vez formó la otra mitad de lo que fue Checoslovaquia y que ahora tiene solamente 5 millones de habitantes dentro de su demarcación territorial.
Perfil del magnicida
Quien disparó repetidamente contra la humanidad del primer ministro eslovaco, Robert Fico, es un adulto mayor de 71 años de edad, llamado Juraj C. (la policía tiene en secreto su identidad completa), oriundo de la pequeña ciudad de Levice, al suroeste de Eslovaquia. Trabajaba en una empresa de seguridad y, de acuerdo a las averiguaciones policiales realizadas después de su captura, quiso ser un escritor y poeta, pero prontamente se sintió frustrado al ver fracasados sus anhelos.
En lo que respecta a su intento de asesinato, las razones de tal acto no han sido aclaradas todavía y tampoco las circunstancias y parece tratarse de un solo agresor; es decir, no hay una organización detrás de la persona perpetradora; aunque llama la atención que Juraj pertenece, supuestamente, a una asociación de escritores de derechas y, en el pasado reciente, publicó contenidos contra los inmigrantes y los gitanos de la raza romaní, en las redes sociales. También ha dado muestras de ser un opositor a la coalición del gobierno nacionalista de derechas que encabeza el primer ministro Fico; pero los psicólogos de la policía le ubican como un hombre profundamente frustrado y políticamente confuso.
Es del todo cierto que la panorámica que presenta gran parte de Europa en estos momentos, es la de un descontento generalizado en los votantes y en el caso particular de Eslovaquia, se observa que se trata de una nación visceralmente dividida desde el ángulo político, donde los discursos de los líderes de los partidos tampoco ayudan a fomentar la paz, ya que son extraordinariamente demagógicos y violentos. Aunque el intento de asesinato contra Robert Fico ha consternado a sus oponentes; el principal partido de la oposición, por ejemplo, canceló, al enterarse de la noticia, las protestas contra la reorganización de la radiotelevisión pública, prevista por el actual gobierno. De inmediato, cuando la información sobre el hecho le dio la vuelta al país, la presidenta de Eslovaquia, Zuzana Caputova, acosada así mismo por continuas campañas de desprestigio, hizo un llamamiento a la élite política y a la opinión pública, para que renuncien al clima de odio y violencia verbal puesta de manifiesto en las intervenciones discursivas.
Historia sangrienta
Este intento de asesinato es la culminación de la creciente violencia contra los políticos en varias naciones del Viejo Continente; y en el caso de Robert Fico, quien era un reconocido socialdemócrata, pasó a ser en los últimos años un nacionalista de derechas y un crítico severo de la Unión Europea (UE), el liberalismo, la ideología LGTBTQ y de los enemigos de los valores tradicionales. Así también, y esta es la parte más deleznable en él, se le reconoce como un prorruso y un antiucraniano y la valoración que da a sus opositores y comunicadores de la prensa, también es muy fuerte y no ayuda a hacer decrecer el clima de violencia política que se respira en el país; por ejemplo, llama a los periodistas que son críticos con él, “hienas, idiotas o prostitutas antieslovacas.” Los periodistas eslovacos insisten en decir que “el propio Fico ha contribuido decisivamente a crear un clima pesado y peligroso, que se ha devuelto contra él.” Es cuando la misma presidenta del país, Zuzana Caputova insiste: “La retórica de odio que estamos viviendo, conduce a actos de odio. ¡Por favor, paremos esto!” Exclama angustiada.
El intento de magnicidio contra Robert Fico no es nada nuevo en esta nación del corazón de Europa, porque el atentado recién perpetrado forma parte de una larga historia de graves actos de violencia en la política y el crimen organizado en Eslovaquia.
Y es que, después de la partición geográfica y administrativa de la antigua Checoslovaquia, que se hizo de manera pacífica y convenida entre ambas nacionalidades (checos y eslovacos), en 1993, Eslovaquia, bajo el mandato del primer ministro Vladimir Meciar, se encontró durante años en una encrucijada entre un régimen autocrático (dictatorial), que tenía vínculos muy estrechos con el crimen organizado (la mafia eslovaca) y un desarrollo que se fundamentaba en el Estado de Derecho.
Durante esa nefasta época, se presentó la delincuencia económica y las privatizaciones, brutales asesinatos mafiosos y numerosos graves atentados contra los críticos del sistema encabezado por Meciar, que casi siempre terminaban con las vidas de las víctimas. Hay quienes dicen que la entrada de Eslovaquia a la Unión Europea (UE), en el 2004, marcó el final de aquella etapa criminal o sangrienta en este país. Fue cuando la carrera política de Robert Fico comenzó a andar, quien es un abogado que se dio a conocer por sus ideas socialdemócratas y un luchador insigne contra la corrupción y el neoliberalismo que amenazaba con apoderarse del país.
No obstante lo anterior, y tras convertirse en primer ministro eslovaco, en el 2006, comenzaron a correr fuertes rumores de que estaba implicado en escándalos de corrupción, un estigma del cual no ha podido librarse y que podría pesar en futuras elecciones suyas y de su partido.
En todo caso y visto lo anterior, el intento de magnicidio en su contra no fue lo suficientemente efectivo, puesto que ya se encuentra fuera de peligro de muerte, pero la lección dada a él en lo personal y al sistema político de Eslovaquia, tiene que aprenderse, asimilarse y dar el cambio que la realidad de la nación necesita. Porque otro acto de esta misma magnitud, podría llevar a Eslovaquia al caos y eso es precisamente lo que el resto de los europeos no quieren.
José Rubén Zamora el Periodista que Perdió Todo por Defender la Libertad de Prensa
en Guatemala
CIUDAD DE GUATEMALA-Primero, tuvo que recurrir a los juzgados para mantener abierto su diario llamado elPeriódico y que su personal no perdiera sus puestos; segundo, fue acusado por el gobierno de turno y llevado a prisión; después, desapareció su rotativo en su edición física (en papel) y pasó a funcionar solo de manera digital; y finalmente todo le fue arrebatado e ingresó a la cárcel donde su situación no aparece clara y su libertad individual no se restablece a pesar de los grandes esfuerzos hechos por recuperarla. La comunidad internacional da la impresión de haberse olvidado de él y le ha abandonado a su suerte; y en el interior de Guatemala, su país de origen, su caso ya no despierta interés entre la población y tampoco en los defensores de los derechos humanos, disfuncionales de todas maneras desde que existen.
Actualmente está preso en un cuartel militar y lleva en esa condición casi dos años y su supuesto “delito” fue denunciar la corrupción de los poderosos, que, en Guatemala, son realmente poderosos y no se andan “por las ramas”, con devaneos, cuando se trata de acabar con quienes les presentan oposición a sus fechorías e intentan denunciarlos, tal y como le sucedió a José Rubén Zamora Marroquín, quien era el director y fundador del diario elPeriódico y premio Gabo 2024.
655 días de cautiverio inmerecido
Ese es el tiempo justo de reclusión que pesa sobre la humanidad de este hombre de 67 años de edad, quien, valientemente, se enfrentó a la casta que manda en esta nación centroamericana; pero, al lado de su innegable y admirable valentía, yacía lo temerario, lo riesgoso, en un país donde nada se mueve si esos “señorones de corte feudal”, de las 100 familias que lo dominan todo, no lo permiten por múltiples razones, entre ellas cuando afecta a sus intereses económicos o de dominación. Y José Rubén Zamora se metió frontalmente contra ellos y denunció la ilegalidad rampante de la realidad guatemalteca, donde, en algunas ocasiones, han tirado de sus sillas a presidentes de la República, metido en la cárcel y la mayoría gozan de impunidad con el favor de los jueces y fiscales corruptos. En todo caso, su hijo, José Carlos Zamora, dice categórico que “su sola presencia en prisión es también una denuncia contra los poderosos” y una evidencia clara de que los organismos pro-derechos humanos son únicamente una “estafa moral” a quienes creíamos en ellos, porque lo han dejado en solitario detrás de los barrotes de su celda y han declinado defenderlo y procurar su libertad.
No obstante lo anterior, la Fundación Gabriel García Márquez le otorgó el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo 2024, que se otorga cada año y le ha considerado un símbolo viviente del periodismo libre de América Latina. Su trayectoria ha sido el puntal que le sostiene y causa la admiración en aquellos que le conocen. Es por ello que su hijo manifestó lo siguiente al enterarse del premio que le concedieron a su progenitor: “Nos sentimos sumamente emocionados y honrados. Es un reconocimiento muy especial y emotivo, pues llega en momentos en que mi papá sigue preso y a la espera de una nueva audiencia mañana. Quiero decir que este no es solo un reconocimiento a él y a su trayectoria, sino también a su equipo, que es un gran equipo, que hizo siempre un gran periodismo al servicio de la gente y en contra de los abusos de poder. El Premio Gabo también es un gran reconocimiento a los periodistas guatemaltecos que siguen trabajando en condiciones adversas, primero bajo el hostigamiento de la administración de Alejandro Giammattei (2020-2024) y ahora enfrentado a un sistema de corrupción que sigue enquistado en el Estado a pesar del cambio que ha supuesto la asunción del presidente Bernardo Arévalo a inicios de este año. Mi padre está en manos de un sistema corrupto, por haber denunciado abusos e ilegalidades en todas las Instituciones del Estado, incluyendo al Poder Judicial. Por eso el Ministerio Público y el sistema judicial han extendido maliciosamente el proceso, cancelando una y otra vez todas las audiencias para impedirle demostrar su inocencia y salir libre.” Puntualiza.
Actualmente, José Rubén Zamora Marroquín es el único periodista que está en prisión en Guatemala, debido, entre otras cosas, a las más de mil investigaciones periodísticas que desnudaron la profunda y extendida corrupción en este país centroamericano. A ello hay que sumarle 200 reportajes sobre delitos cometidos durante la administración pasada, cuando el presidente de la República fue el médico Alejandro Giammattei, quien se sintió acorralado, puesto en evidencia y por esa razón actuó en consecuencia, llevando a Zamora a prisión.
Años anteriores, elPeriódico, el diario fundado por Zamora en 1996, denunció injusticias e ilícitos cometidos desde el seno del poder y que causaron la caída del gobierno del ex presidente, el ex general Otto Pérez Molina (2012-2015), quien ahora goza de “casa por cárcel”, un beneficio que le fue otorgado recientemente al ceder propiedades de su familia a cambio de esta alternativa carcelaria. En opinión del mismo hijo suyo, José Carlos Zamora, “el sistema encarceló a mi padre como una forma de instituir el miedo entre los demás medios y comunicadores (de la prensa); sin embargo, ellos siguen haciendo su trabajo dentro de Guatemala y han sido más solidarios que nunca.” Acentúa el joven quien también es profesional del periodismo y trabajó al lado de su padre.
Hay que recordar que el arresto del fundador y editor de elPeriódico, quien es considerado toda una leyenda dentro del periodismo guatemalteco, se dio el 29 de julio del 2022 y su casa de habitación y la sede del diario, fueron allanadas por las fuerzas policiales, y la mayoría de los trabajadores se marcharon, en decidida huida, hacia el extranjero, en condición de exiliados; sus cuentas bancarias fueron congeladas y ya lo vimos… su director conoció la profundidad de las celdas de este país en situación de “enemigo del Estado.” El periódico cerró su edición en papel o impresa, ese mismo año 2022 y en mayo del 2023 también finiquitó la edición digital (en internet), por falta de dinero para seguir costeándola.
Detalles de la vida del José Rubén Zamora
Nació el 19 de agosto de 1956 en Guatemala, en el seno de una familia de periodistas. Estudió ingeniería industrial y se graduó como ingeniero; tiempo después se convirtió en un exitoso empresario, periodista y también fue miembro fundador de tres periódicos en este mismo país; a saber: Siglo Veintiuno (XXI), en 1990; elPeriódico (de su propiedad), en 1996; y Nuestro Diario, en 1998.
Antes de llevar a efecto lo anterior, Zamora Marroquín trabajó como periodista en el diario La Hora (fundado por su abuelo, Clemente Marroquín, a inicios del Siglo XX); después se graduó de ingeniero en la Universidad de San Carlos de Guatemala; y también logró una maestría en administración de empresas con especialización en Banca y Finanzas del INCAE. Así mismo es egresado del programa de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Pontificia de Salamanca, España; y en 1986, Zamora Marroquín fundó ANC, una empresa que se encargaba de producir documentales y noticias.
También fue director del Comité Nacional del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (INCAE); presidente de la Comisión de Investigación, Análisis y Planificación de la Cámara de Industria de Guatemala; director de la Cámara Empresarial de Guatemala y miembro de la Junta Monetaria del Banco de Guatemala. En 1990 formó parte del grupo fundador del periódico Siglo Veintiuno, que se caracterizó, desde un inicio, por demandar reformas judiciales y tributarias, así también de la publicación de reportajes referidos al contrabando de drogas, violaciones de los derechos humanos, el derrotero y abusos de la guerrilla izquierdista (URNG, que luego se convirtió en partido político, gracias a los tratados de paz que suscribió con el gobierno), y la corrupción rampante dentro del gobierno del ex presidente Jorge Serrano Elías. Fue en este punto preciso, cuando José Rubén Zamora Marroquín y su grupo de periodistas, comenzaron a recibir amenazas de muerte y ataques físicos de parte de matones enviados por gente que siempre se mantuvo “en la sombras.”
En 1993, el presidente de la República de aquel entonces, Jorge Serrano, disolvió la Corte Constitucional, un acto que recibió el nombre popular de “serranazo” y fue una crisis que duró 10 días. El mandatario trató de manipular a la prensa mediante fuertes censuras y Zamora Marroquín tuvo que cambiarle el nombre al periódico que él dirigía y le llamó Siglo Catorce, publicó titulares con grandes bloques negros cubriendo la mayoría de los reportajes y noticias, haciendo ver que la censura gubernamental impedía que la información llegara clara y completa al gran público. Simultáneamente envió, vía fax, las mismas noticias, sin tachonazos encima, a los medios de prensa en el extranjero, para narrar lo que se estaba viviendo en Guatemala. Esa coyuntura en especial fue catalogada por la International Press Institute (IPI), como el principio del fin del gobierno de Serrano Elías y su subsecuente huida del país. Fue así, según el mismo organismo internacional, como la democracia regresó a Guatemala.
En 1996, José Rubén Zamora se marchó del periódico Siglo Veintiuno, debido a desacuerdos con su Junta Directiva y terminó así una etapa sustancial de su vida profesional dentro del periodismo guatemalteco.
Pero el 29 de julio del 2022, cuando él y todos sus allegados creían que lo habían vivido todo dentro de esta profesión, llegó la policía hasta su hogar y lo detuvo bajo los cargos de lavado de dinero; pero esa actuación policial ha sido considerada una represalia por la cobertura que Zamora dio a la corrupción dentro de las esferas gubernamentales. Aquellos reportajes le dieron la vuelta al mundo y fueron ampliamente condenados en el interior de Guatemala y también en el ámbito internacional. El juicio que se le siguió a Zamora concluyó con su condenatoria a seis años de cárcel y, durante el proceso, dos de sus abogados así mismo fueron encarcelados y los otros dos renunciaron para defenderlo, atemorizados por las amenazas que recibieron por diferentes vías. El diario elPeriódico, fundado por Zamora Marroquín, fue intervenido por la misma policía, ocho de sus trabajadores arrestados y procesados y la edición en papel fue obligada a desaparecer, optando por la alternativa digital, que también salió de la luz pública por falta de recursos económicos y con su director detrás de barrotes carcelarios.
En detalle y según el fiscal que ordenó el arresto de este periodista, el encausado exigió y recibió dinero de parte de Ronald García Navarijo, un exbanquero quien lo acusó de extorsión, a cambio de no mencionarlo en su periódico. En acto seguido, Zamora Marroquín fue acusado de lavado de dinero, chantaje, tráfico de influencias y proposición y conspiración para el lavado de dinero y otros activos. La fiscalía aseguró que fue capturado en flagrancia a partir de una denuncia del exbanquero, en el momento en el que recibió Zamora el dinero y planeaba realizar una transacción bancaria para ocultar y disfrazar la procedencia del cheque y que “la persecución era en su calidad de empresario y no de periodista,” según justificó su actuación la fiscalía guatemalteca, en ese momento. Además, se indicó que en el allanamiento confiscaron aproximadamente Q300,000 (quetzales, moneda guatemalteca) (unos US$25,600), que Zamora habría solicitado del exbanquero García Navarijo, con la finalidad de darle información sobre investigaciones en su contra que le daba el ex fiscal de sección, Juan Francisco Sandoval.
En la presentación de pruebas, se acusó junto a Zamora a Flora Silva Flores, exgerente de la empresa periodística elPeriódico y también fueron señalados sus abogados, Mario Eduardo Castañeda y Romeo Augusto Montoya, de planear, con el dueño del diario, la forma para ocultar el dinero recibido del exbanquero. El Ministerio Público (fiscalía), presentó un audio en el que supuestamente fue posible escuchar a Zamora Marroquín conversar con Sandoval Alfaro, cuando el primero le solicitaba información sensible y el segundo se la daba y aseguraba que iba a obtener la que no tenía a disposición en aquel instante. En otro audio, se escuchó presuntamente a Zamora y a sus abogados, dialogando sobre el procedimiento que seguirían para ocultar el dinero recibido por el exbanquero Ronald García Navarijo.
Por otra parte, Flora Silva Flores, considerada “la mano derecha de Zamora” y gerente de la empresa dueña de elPeriódico, fue capturada en agosto del 2022, por el delito de conspiración para el lavado de dinero, ya que simuló un negocio comercial por esa cantidad de dinero y así simular la procedencia ilícita de los cheques que recibió. El 8 de diciembre de ese mismo año, Silva Flores aceptó los cargos y confesó que ella solo recibía órdenes de José Rubén Zamora, que “era él el que tenía el manejo de todos los aspectos financieros y yo solo planificaba con base en lo que él decidía.” Manifestó al juez. Seguidamente, fue condenada a 6 años de prisión conmutables, pero al haber aceptado los cargos, la condena se le redujo a 3 años de prisión solamente; pero salió en libertad cuando hizo el pago de la multa que también le fue impuesta.
En lo que estriba al propio José Rubén Zamora Marroquín, el personaje central de este reportaje, aseguró en su primera declaración ante el juez, que los Q300,000 que pidió que fueran ingresados al sistema bancario, por medio del exgerente del Banco de los Trabajadores, Ronald García Navarijo, le fueron entregados por empresarios que solicitaban publicidad en su periódico; aunque, en otra audiencia, aseguró contradictoriamente que los recursos o el dinero polémico de esta historia, eran producto de la venta de una pintura de su propiedad (una obra de arte) y para fundamentar este nuevo argumento, presentó un documento de compra/venta, del que luego se descubrió que era supuestamente falso. Aun así, Zamora aseguró que el dinero se lo había dado Alejandro Girón Lainfiesta y no el banquero que aquí se ha mencionado reiteradamente. La reacción consecuente por parte de la fiscalía, indica que las dos versiones del periodista son falsas, no son reales o verdaderas y la segunda, fue sustentada con documentos para dar apariencia de legalidad al origen del dinero y por ello se considera que se ha tratado de un intento de Zamora Marroquín, de obstaculizar la causa penal en su contra. Por este mismo supuesto ardid, el 20 de abril del 2023 fueron capturados dos ex abogados de Zamora, al presentar el documento fraudulento en el que presuntamente se simulaba la compra/venta de la obra de arte por Q300,000, que el periodista tenía en su poder el día cuando la policía allanó su casa y la sede del diario de su propiedad.
El 27 de abril, se declararon culpables Girón Lainfiesta y Alvarez Zamora y confesaron que elaboraron el documento falso para dar legalidad al origen del dinero. Ambos fueron condenados a 1,5 años de prisión conmutables. El 5 de mayo se declaró también culpable el abogado y primo de Zamora Marroquín, llamado Juan Carlos Marroquín Godoy, por el mismo caso, y aceptó que presentó un documento falso que simuló la compra de una obra de arte, para darle apariencia lícita al dinero en poder del director de prensa. Tal la situación judicial en la que se encuentra nuestro personaje y tal como se plantean las cosas, que le hacen ver aparentemente culpable de los cargos que se le acusan.
En otro aspecto de su personalidad y de su labor como comunicador de la prensa, repasamos algunas distinciones que Zamora y sus subalternos han recibido: el International Press Freedom Awards, en 1995, cuando laboraba para Siglo XXI, otorgado por “el Comité para Proteger a los Periodistas”, que reconoce el valor al defender la libertad de expresión, a pesar de enfrentar ataques, amenazas o encarcelamiento. Ese mismo año, Zamora recibió otro premio concedido por la Universidad de Columbia, USA, llamado Maria Moors Cabot Prize, “por promover la libertad de prensa y el entendimiento interamericano.”
En el 2000, fue nombrado uno de los 50 Heroes Mundiales del Periodismo del Siglo XX, por el International Press Institute, una premiación otorgada en parte porque “Zamora y Siglo Veintiuno estuvieron al frente de la resistencia civil que forzó al presidente Jorge Serrano Elías, a renunciar a su puesto, después de haber intentado establecerse como dictador en 1993.” En el 2003, la John S. and James L. Knight Foundation, lo reconoció con su premio International Journalism Award; y en Guatemala ha sido galardonado como Ingeniero Distinguido, por el Colegio de Ingenieros de Guatemala, en el 2014; y como Egresado Ilustre de la Universidad de San Carlos de Guatemala, en el 2015. En ese mismo año, recibió también el premio Myrna Mack por la Defensa de los Derechos Humanos, otorgado por la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guatemala. Por su labor en elPeriódico, que se extendió por casi 30 años, ganó el premio español al Medio Destacado de Iberoamérica, que le fue entregado en el 2021, de manos del Rey Felipe VI.
Finalmente recibió, en el 2024, el Reconocimiento a la Excelencia del Premio Gabo. Fue cuando el consejo rector de la Fundación Gabo reconoció en Rubén Zamora “tres décadas de tenaz y valiente trabajo profesional, cuyo motor ha sido develar la corrupción y abusos de los derechos humanos que han asolado a Guatemala, (y) como distinción a su dilatada y valerosa carrera, dedicada a desentrañar la corrupción y defender los derechos humanos en Guatemala; (y) frente al nuevo autoritarismo que socava la democracia en América Latina, debe erigirse un periodismo libre y riguroso, el buen periodismo que es como el oxígeno para los ciudadanos y que Zamora representa de forma emblemática.” Según reza el texto que explica el otorgamiento de esta premiación. El consejo rector del Premio Gabo está integrado por Rosental Alves, de Brasil; Jon Lee Anderson, de Estados Unidos; Carmen Aristegui, de México; Martín Caparrós, de Argentina; Sergio Ramírez y Carlos Fernando Chamorro, de Nicaragua; entre otros periodistas y escritores del continente americano
La situación actual de José Rubén Zamora Marroquín es de las más complicadas en un país como Guatemala, donde la justicia funciona deficiente y peligrosamente para los encausados, más todavía si es por razones políticas, como se supone que es el caso de este empresario periodístico: está encerrado en el cuartel militar Mariscal Zavala, desde que se llevó a efecto su arresto. Vale la pena recalcar que la cúpula del Ministerio Público que ordenó la aprehensión de Zamora, es requerida por la justicia de los Estados Unidos y mantuvo (y mantiene todavía), un enfrentamiento con el nuevo presidente de la República, Bernardo Arévalo de León, quien les amenazó con destapar la profunda corrupción en esa fiscalía y por ello trataron de que no fuera investido mandatario de Guatemala, sin conseguir ese nefasto objetivo.
La familia de Zamora huyó al exilio, temerosa de que el mismo Ministerio Público les apresara; y a Rubén Zamora se le impuso una pena de seis años de cárcel y el pago de una multa de más de US$40,000; un castigo que ha sido cuestionado por los organismos internacionales, precisamente porque en su condena hubo ausencia de un juicio formal. Es cuando regresamos a las palabras de su hijo, José Carlos Zamora, quien ha dicho acerca de la falta de proceso: “Mi padre cumple hoy 655 días en la cárcel y mañana se cumple un año del cierre indefinido de elPeriódico. Ha pasado encerrado en aislamiento, la mayoría del tiempo en condiciones terribles que se consideran tortura de acuerdo con los estándares internacionales. El proceso ha sido espurio, plagado de irregularidades, pues nunca se realizó un juicio formal y no se dictó sentencia en firme. La fiscalía de Guatemala le impidió presentar testigos y documentos de prueba a su favor. Más aún, 10 de sus abogados fueron perseguidos, arrestados u obligados a retirarse del caso, bajo amenazas de cárcel. Mi papá lleva 655 días en prisión preventiva, aunque la ley establece que nadie puede pasar más de 90 días en esa condición; también es prohibido que un reo pase más de un mes en celda de aislamiento y él lleva 22 meses (en esa situación). Pese al aislamiento y a las condiciones insalubres en la celda, con insectos que le han provocado alergias, mi padre sigue fuerte, resiliente, con sus convicciones y sus principios intactos. Él dice que estar en prisión es parte de su trabajo, pues ayuda a demostrar los abusos de autoridad. La cárcel se ha vuelto para él un apostolado, como lo ha sido el periodismo, y dice que seguirá ahí el tiempo que tenga que estar, hasta que lo dejen libre y le pidan disculpas. (…) Nosotros estamos convencidos de que si el caso de mi padre llega a manos de un tribunal justo, decente e imparcial, lo van a absolver y dejar en libertad. Esa es nuestra esperanza. Nuestra familia está gestionando ante la ONU y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), nuevas acciones legales para presionar al Estado de Guatemala y que se ponga fin a su detención arbitraria.” Acentúa el joven quien es también periodista.
¿Pero qué dice y piensa José Rubén Zamora Marroquín? Estas son sus palabras textuales: “Me considero un preso político. Soy un hombre libre que decide decir ‘no’ de manera categórica a los excesos y abusos del poder. Este es un montaje diseñado, fabricado y ejecutado con eficacia por el presidente (el anterior, no el actual), la fiscal general (María Consuelo Porras) y otras personas. Han vulnerado todos mis derechos, pero espero recuperar mi libertad porque la fiscalía no pudo comprobar nada. Mi esposa ha abandonado el país (…) ante las amenazas de detención (que se cernían sobre ella).”
Tal es la situación. Tal es el personaje legendario que purga en prisión un supuesto delito del que no permitieron defenderse, una acusación esbozada, elaborada y pronunciada por una fiscalía general de la república que es reconocidamente corrupta y todos sus componentes son requeridos por la justicia de los Estados Unidos, precisamente por su naturaleza corrupta en cada uno de ellos.
La Organización de los Boy Scouts Busca la Manera de Escapar de su Imagen Fuertemente Deteriorada, donde yacen Pedófilos
Violadores entre sus Líderes
y Guías
TEXAS, USA-En los últimos diez años han salido a la superficie una serie de inconvenientes que parten del seno de esta organización mundial, debido a los abusos sexuales comprobados a jóvenes que han pertenecido a los Boy Scouts. El escándalo está servido, se ha difundido por todo el planeta y ha sido de tales dimensiones, que la organización ha tenido que pagar sumas millonarias en dólares, a manera de resarcimiento a las víctimas y ahora se está pensando cambiar el nombre que comenzaría a regir a partir del 2025.
Los directivos y los guías han sido los pederastas que han abusado de los jóvenes y los que han causado estos escándalos imposibles de creer en épocas trasanteriores; y con respecto al cambio de nombre, la organización juvenil de los Estados Unidos llamada hoy Boys Scouts of America (BSA, por sus siglas en inglés), pasará a llamarse Scouting America, cuya traducción literal al castellano es Explorando América. Las innumerables denuncias de abusos sexuales, tras 114 años de historia de esta organización, han ocasionado los cambios que se ven venir en el futuro inmediato. Así lo han anunciado por medio de un comunicado de prensa, emitido por su sede en los Estados Unidos.
Casos increíbles que se venían presentando…
Más de 81,000 personas han asegurado que sufrieron abusos sexuales a manos de guías y líderes de los Boy Scouts, según se ha ventilado en los últimos 10 años que han transcurrido de manera tórrida para esta organización que gozaba de una excelente reputación, hasta que comenzaron a correr las denuncias y hacerse públicas. Es por esa causa que la dirigencia llegó a un acuerdo sin precedentes con las víctimas y han tenido que pagar millones de millones de dólares para resarcirlas económicamente, aunque el daño moral está en lo profundo de esas personas ultrajadas.
“La decisión (del cambio de nombre) –comunicó la sede de Texas-, busca reflejar el compromiso para asegurarse de que todo el mundo se sienta bienvenido en la comunidad. Aunque nuestro nombre será nuevo, nuestra misión sigue siendo la misma: estamos comprometidos a enseñar a los jóvenes a estar preparados para la vida.” Así el mensaje que apareció en la página web de la organización, firmado por Roger A. Krone, presidente y director ejecutivo de Scouting America.
Los actos de depravación que fueron denunciados, tiraron por la borda décadas enteras de excelente reputación, en un movimiento a nivel mundial en el que en sus tempranos años estuvieron dentro, personas que, tiempo después, llegarían a alcanzar la cúspide profesional en sus carreras; por ejemplo, el astronauta Neil Armstrong; el ex presidente John F. Kennedy; y el icono de los derechos civiles, Ernest Green, entre decenas de estas personalidades. Más de 130 millones de jóvenes estadounidenses pasaron por los programas de BSA, fundada en 1910. No obstante, documentos internos de la organización, muestran que en las primeras décadas de su existencia, se informó de abusos de parte de cientos de líderes exploradores, quienes se aprovecharon de su cercanía con los chicos y procedieron a abusar de ellos. En el 2021, la organización de los Estados Unidos acordó la creación de un fondo por más de US$850 millones, para reparar a las víctimas; esta decisión se tomó porque la bancarrota asomó a sus finanzas después de haber hecho los primeros pagos a los menores ultrajados y a sus padres. Aunque los violadores se han salido con la suya, debido a que muy pocos fueron encerrados en prisión; pero la gran mayoría de ellos ha logrado resguardarse en la mayor impunidad. Las denuncias han provenido de más de 84,000 personas, quienes fueron violadas sexualmente cuando eran menores de edad.
La quiebra financiera se dio en el Estado de Delaware, en un intento por sobrevivir al maremágnum de denuncias, que inundaron los tribunales de este lugar.
Según reportajes aparecidos en los últimos meses en periódicos prestigiosos de este país, el número anterior sigue creciendo conforme pasa el tiempo, porque más y más personas toman la determinación de hacer pública su mala experiencia dentro de los Boy Scouts. Para darnos una idea lo más fiel posible, tomamos en cuenta el argumento de Paul Mones, uno de los abogados involucrados en casos contra Boy Scouts durante casi dos décadas, quien dijo que “la prevalencia de los abusos que se detallan en los casos presentados, es imponente, pero aun así… podría reflejar solo una fracción del número de víctimas reales. Sabía que había muchos casos (pero) nunca me planteé que se acercara a esta cifra.” Puntualizó.
“La avalancha” de acusaciones por abusos sexuales ha sido tan grande, tan numerosa, tan superlativa, si el término cabe, que un juez que ha visto los casos, impuso como fecha límite el 16 de noviembre de este año, el 2024, para que presenten los demandantes sus quejas por el mismo delito… el abuso. Y para salir al paso de las demandas, para poder resarcir a las víctimas, en su declaración de bancarrota, la organización Boy Scouts de los Estados Unidos señalan que tienen bienes por valor de US$1,000 millones y una red de consejos locales que, a su vez, poseen cientos de campamentos y otras propiedades por todo el país a orillas de un lago o en valles, donde los jóvenes han recibido formación en distintos aspectos. Y desde el aspecto anímico, Boy Scouts ha afirmado en distintos comunicados que está “devastada por el número de vidas afectadas por el abuso sucedido y por ello, hemos iniciado un proceso accesible para que los supervivientes puedan reclamar una compensación. La respuesta que hemos visto de los supervivientes, ha sido devastadora. Pedimos perdón a las víctimas.” Reiteran.
¿Es el ocaso del organismo mundial?
Boy Scouts fueron fundados en el lejanísimo 1910, cuando el Siglo XX apenas despuntaba. La expansión, a partir de una Escritura de Constitución del Congreso de 1916, fue vertiginosa en casi todo el mundo, debido, en parte, a lo atractivo de los valores que decían llevaban en el espíritu de la organización, sus directivos, líderes y formadores: “el patriotismo, la valentía y la independencia,” fueron el norte de este conglomerado. No obstante, con el paso de los años, la decadencia a raíz de los actos de lascivia que se han denunciado una y otra vez en las entrañas de la organización, hace que los miembros renuncien, se alejen y no regresen nunca más. Actualmente, Boy Scouts posee unos 2,2 millones de miembros, pero el número ha venido declinando, según era de esperar. Es un hecho que los padres de familia prefieren otros sitios, otros organismos para la educación y el cuidado de sus hijos, antes que los Scouts. El miedo se ha apoderado de muchos progenitores y con justa razón.
El dinero que ha tenido que pagar por concepto de resarcimiento de las víctimas, ascendió a US$850 millones; esto con los grupos que representan a miles de hombres que han acusado a la organización de abusos sexuales. Y la imposibilidad de hacer frente a las demandas, llevaron a Scouts a la bancarrota ante el Tribunal de Quiebras de los Estados Unidos en Delaware. Trascendió que el acuerdo entre ambas partes (violadores y sus víctimas), se efectuó con la Coalición por la Justicia de Scouts que han sufrido abusos y también con otros dos grupos que representan a unos 60,000 denunciantes. Demasiadas personas para hacerse “el indiferente” y dejar pasar los hechos… Por su parte, estos grupos de demandantes calificaron el acuerdo como “un logro significativo que logra el consenso entre la mayoría de los reclamantes, los Boy Scouts y más de 250 agrupaciones locales.”
Para citar un caso aislado entre los miles existentes, uno de los tres negociadores principales en nombre de las víctimas, se llama Ken Rothweiler, quien calificó de “histórico” lo alcanzado con la organización donde actuaban los pederastas que se complacieron en ultrajar a los niños. Así según declaraciones suyas a la National Public Radio. “Es el mayor acuerdo de denuncias de abuso sexual en la historia de Estados Unidos”, manifestó el negociador. El acuerdo también prevé la puesta en marcha de medidas para proteger a los jóvenes, un sistema de denuncia, la formación de un Comité de Protección de la Infancia y el intercambio de información relacionada con las denuncias de abuso.
Finalmente y por su parte, Douglas Kennedy, copresidente del comité de supervivientes, brindó declaraciones al periódico USA Today, en el que narró que él, personalmente, sufrió abusos sexuales en un viaje de campamento cuando era adolescente y por ello, “una parte importante de nuestra misión es hacer todo lo posible para asegurarnos de que esto no continúe ocurriendo. El acceso a los registros de denuncias también será beneficioso para el público, por lo que cualquiera que haya sido un abusador, no pueda andar por ahí trabajando en otras organizaciones.” Declaró.
De cara a su propio destino, hay quienes dicen que Boy Scouts en el mundo han empezado a caminar “cuesta abajo” y que la desaparición es un hecho inevitable y hacia ello se dirigen precisa y velozmente.
Gobierno de Israel y Netanyahu Temen que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) Dicte Orden de Captura en su contra por Crímenes
de Lesa Humanidad
TEL AVIV, Israel-“Algo es algo”, dirían las gentes sencillas cuando se ha sabido que la Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya, Países Bajos, está a punto de emitir una orden de captura contra el genocida dictador de Israel, Benjamín Netanyahu, por la aniquilación diaria que lleva a cabo en Palestina, contra la población inocente de ese país (no reconocido), al bombardearla indiscriminadamente, asaltar hospitales, asesinar a los pacientes que allí se encuentren, acabar médicos, periodistas, cooperantes internacionales, niños, mujeres y ancianos, en albergues, casas de habitación, mezquitas y allí donde se mueva o respire un solo palestino.
En todo caso, la noticia no pasa de ser solo una posibilidad de que la CPI ejecute dicha orden contra el flagrante asesino que es Netanyahu, porque todavía no hay una determinación en firme al respecto. Ante tal eventualidad, Netanyahu, haciendo uso de su acostumbrado y reconocido “matonismo”, indicó a los medios de prensa que le preguntaron al respecto: “Israel nunca aceptará ningún intento de la Corte Penal Internacional de La Haya, de socavar su derecho básico a defenderse.” Es evidente que este judío utiliza el eufemismo para confundir a la opinión pública, y cuando dice “defenderse” en realidad es un término que esconde el verdadero horror que está causando en Gaza, que es la aniquilación de todo un pueblo, a la vista y paciencia de las potencias occidentales que no le detienen y, por el contrario, le aceptan sus asesinatos y les surten de armamento, en el caso de los Estados Unidos y el siempre “culpable” (del absurdo concepto del holocausto nazi), que es el gobierno de Alemania. De hecho, Israel no se está defendiendo de nadie en estos momentos, porque nadie lo está atacando…
La próxima semana podría ser emitida la orden de captura
Sería en la segunda semana de mayo del 2024, cuando la CPI, adscrita a las Naciones Unidas (es un instrumento jurídico de la ONU), podría emitir la orden de captura contra el asesino Netanyahu y un grupo de asesores o altos cargos, quienes, en lugar de evitar las matanzas de palestinos, más bien las fomentan, las ordenan y están de acuerdo con los abusos de lesa humanidad que efectúan las tropas judías en Gaza y Cisjordania.
La orden de captura iría dirigida, además de Netanyahu, contra el ministro de Defensa, Yoav Gallant; y el jefe del ejército, Herzl Halevi; así según información publicada por el diario israelí, Haaretz. En estos momentos, y de acuerdo con lo publicado en el mismo periódico, tanto el ministro de Justicia como los abogados del ejército judío, intentan evitar que se emita la orden de captura; pero lo más deleznable ha resultado ser la intervención del gobierno de los Estados Unidos (permeado por decenas de judíos en su administración pública), que ha intentado convencer al fiscal general de la CPI, Karim Khan, que retrase o impida la emisión de las órdenes judiciales.
En una declaración suya escrita en Telegram, Netanyahu agregó que “si bien las decisiones tomadas por el tribunal de La Haya no afectarán las acciones de Israel (es decir, las masacres que lleva a cabo en Gaza), sentarán un precedente peligroso que amenaza a soldados y figuras públicas.” Se quejó el asesino de miles de palestinos.
La realidad que ha causado el ejército israelí no puede pasar desapercibida en ningún aspecto, porque, desde el 7 de octubre del 2023, ha asesinado a más de 35,000 palestinos (una cifra de muertos que crece día a día), y ha llevado a la ciudad de Gaza a una situación de catástrofe humanitaria, económica y de diversa índole. Por ejemplo, para la Corte Internacional de Justicia no se pueden pasar por alto declaraciones como la de Israel Katz, ministro de Asuntos Exteriores judío, quien dijo que el corte de suministros (alimentos y medicinas) a los gazatíes, “es lo que se merecen los asesinos de niños (¿?)”, tratando de volcar, de revertir una situación cuando son los judíos los que están asesinando a los niños de Gaza y no lo son otros asesinos. En estos precisos instantes, el gobierno de Netanyahu explora la posibilidad de invadir Rafah, donde se hacinan 1,4 millones de palestinos, lo que significará un desastre humanitario sin precedentes; pero eso no importa ni detendrá a Netanyahu en su sed de sangre.
Lo cierto es que países genocidas, abiertamente invasores y asesinos en el presente y el pasado, no aceptan la autoridad de la Corte Internacional de Justicia, en los casos de los mismísimos Estados Unidos, Rusia o Irán, aunque los 123 Estados signatarios de los estatutos de la CPI, están obligados a detener a esos asesinos y entregarlos ipso facto a la Corte, si entrasen y estuvieren en sus territorios. Vladímir Putin lo sabe y por eso se ha mantenido en los últimos meses dentro de la demarcación de Rusia; lo mismo sucederá con Netanyahu, quien gusta pasearse por el mundo tratando de dar lástima con la imagen del “pobrecito judío cremado en los hornos de Hitler.” Si pone un pie en alguna de las naciones signatarias con la CPI, tendrá que ser detenido en el acto y entregado para ser conducido a La Haya, Holanda, y ser encarcelado y procesado judicialmente. Y la pregunta que se desprende de una acción así es: ¿Intentaría el ejército israelí, dado a irrespetar el estado de derecho mundial, un ataque contra las instalaciones de la CPI para liberar a su criminal líder? Ello sería posible, partiendo de la base que los judíos se creen los dueños del planeta entero y son dignos de ser respetados y aplaudidos en todos los desmanes y abusos que cometan, según ellos. La falacia de que son “el pueblo elegido de Dios”, les da, según ellos, el aval para cometer cualquier tropelía contra quienes quieran, porque “Yavé nos lo permite desde el Monte de Sión.” Así según las fábulas escritas en el Antiguo Testamento y que millones en el mundo creen a pies juntillas. Pero lo único que son los describe como una gavilla de asesinos, armados por Alemania (la “eternamente culpable del holocausto”) y los Estados Unidos, hasta los dientes y con ojivas nucleares, para que arremetan contra quienes los judíos crean conveniente.
Fundamentado en todo lo arriba expuesto, el ex fiscal general adjunto de Israel, Roy Schondorf (nótese cómo utilizan los apellidos alemanes estos hebreos), citado por el diario Haaretz, “la emisión de órdenes de arresto, podría dar lugar a medidas contra Israel, como un embargo de armas o sanciones económicas.” Sin embargo, en cuando a las sanciones económicas serían, posiblemente, en el plano comercial bilateral con naciones con las cuales los judíos tienen intercambio de productos (Israel vende armas y únicamente armas, porque no produce nada distinto); pero el flujo de capitales no se detendría, puesto que millones de judíos en los Estados Unidos, Europa y Argentina, que es donde mayoritariamente viven y ejercen de “parásitos” en esas naciones, seguirían enviando dinero y fortaleciendo a la economía de Israel, que sería un hecho inevitable desde todo ángulo en que se mire. Y en lo que respecta a un posible embargo de armas, tampoco sería preocupante, puesto que los alemanes y estadounidenses seguirían dando pertrechos y municiones a los judíos, según la nefasta costumbre de esos dos gobiernos y el sentimiento de culpa que carcome al alma conjunta de los alemanes, quienes les regalan a los israelíes todos los productos, desde farmacéuticos hasta submarinos capaces de portar ojivas de destrucción masiva.
Aparte de lo anterior y en todo caso, lo que procede y amerita es la detención de Netanyahu y parte de su Estado Mayor, por los crímenes de lesa humanidad contra el pueblo palestino en Gaza. Hay que esperar todavía para que sea emitida dicha orden.
El determinante papel de Suráfrica
Ninguna otra nación alrededor de la Tierra es igual a Suráfrica en cuando a su sensibilidad acerca del tema del apartheid (segregación racial), y el genocidio, llevados a su territorio por los blancos criminales ingleses. Es por ese pasado surafricano de persecución y crimen en su contra, que plantearon ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ), la acusación formal y de rigor contra el Estado de Israel por su masacre en Gaza. En específico, los surafricanos plantearon ante los jueces en los Países Bajos que “los actos y omisiones de Israel son de carácter genocida, porque tienen como objetivo específico destruir a los palestinos en Gaza, como parte del grupo nacional, racial y étnico palestino más amplio.” De tal modo, la acusación se basa en el genocidio que todos estamos presenciando de lejos en nuestro caso y de cerca, en el caso de los protagonistas.
Un detalle a tomar en cuenta se fundamenta en que tanto Suráfrica como Israel son miembros de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948, y es un tratado que obliga a los firmantes a prevenir y penalizar el crimen de genocidio, en este caso concreto funcionaría en contra de Israel, que es el Estado que está masacrando, por medio de su ejército apertrechado por los Estados Unidos, al pueblo palestino. El genocidio está definido en dicho tratado como “ciertos actos que tienen la intención de destruir, en su totalidad o en parte, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso”, y, de acuerdo con su solicitud, la razón de la iniciativa de Suráfrica, son las acciones y amenazas de Israel contra el pueblo palestino desde el 8 de octubre del 2023. A partir de esa fecha, han sido masacrados casi 50,000 palestinos que estaban al margen del conflicto entre la facción armada de Hamás y el Estado hebreo y su ejército. Colateralmente, la situación humanitaria en Gaza se ha ido deteriorando ostensible y evidentemente, a raíz de los salvajes bombardeos de la aviación y blindados judíos, que atacan a una población indefensa, a toda hora, cuando a Netanyahu se le ocurre dictar las órdenes para perpetrar los asesinatos en masa.
Los surafricanos iniciaron sus procedimientos ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), de La Haya, el 29 de diciembre del 2023. Hay que subrayar en este punto nuevamente, que la CIJ es el principal órgano judicial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que existe a nivel planetario para sentar a los responsables de abusos y crímenes de lesa humanidad. Es así como el gobierno de Suráfrica y sus asesores legales han solicitado a esta Corte varias medidas provisionales, como la petición para que Israel “suspenda inmediatamente sus operaciones militares en y en contra de Gaza y que no participe en actos de genocidio y tome medidas razonables para impedirlo,” pero también para permitir el acceso de la asistencia humanitaria a la misma zona de Gaza. Los surafricanos pidieron, así mismo, informes periódicos a la CIJ sobre estas medidas.
El documento redactado y presentado por los surafricanos posee 84 páginas y menciona “nuestra obligación como Estado parte de la Convención sobre el Genocidio, de prevenir el genocidio”; pero los surafricanos van más lejos al comparar e igualar, en el seno del Congreso Nacional Africano (CNA), a los israelíes con el antiguo régimen del apartheid, porque asesina flagrante y abiertamente a los ciudadanos palestinos inocentes. De hecho, los surafricanos aseguran con toda claridad que hay un “trasfondo de apartheid en lo concerniente al tratamiento del pueblo palestino por parte de Israel.”
En lo que estriba a Israel propiamente dicho, con todo el orgullo del que son capaces, han tratado de minimizar y ridiculizar la denuncia de Suráfrica con estas palabras del portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores israelí, Lior Hariat, en su cuenta en X: “Israel rechaza firmemente las acusaciones de genocidio. Rechaza con disgusto el líbelo de sangre difundido por Suráfrica y su solicitud ante la CIJ.” Es decir, se desprende de este débil argumento que no es cierta la masacre en Gaza llevada a efecto por los judíos contra los palestinos, “el líbelo de sangre” redactado por Suráfrica es “una falacia” y los asesinatos, las madres con sus hijos asesinados, en brazos, son alucinaciones de nuestras mentes desviadas, lo cual solo significa un insulto de parte de Israel y de este funcionario en específico, contra la inteligencia de todos quienes observamos día a día tales masacres.
También Isaac Herzog, presidente judío, manifestó en su cuenta de X, que “en la CIJ presentaremos orgullosa y claramente el derecho fundamental de Israel a auto-defenderse.” Pero la pregunta resultante aquí es: ¿Cuál es el número de víctimas palestinas establecido para que se detenga el ejército judío y se sienta satisfecho y pleno en su venganza contra Hamás? Evidentemente no existe un número de víctimas en la mentalidad general y criminal de los israelitas, porque lo que les asiste es la idea de acabar con todo lo que se mueva en Gaza y no hay otra motivación para ellos. Las evidencias mostradas no engañan, son extraordinariamente lúcidas y claras. Así mismo, el gobierno israelí participará en las audiencias y enviará como juez al ex presidente de la Corte Suprema, Aharon Barak.
Lo que se espera en el seno de la Corte, a la luz de las ponencias a favor y en contra de este caso, podría decantarse en que es “relativamente probable que el tribunal ordene a Israel, de una forma u otra, garantizar que la asistencia humanitaria pueda llegar a Gaza en cantidades mucho mayores que las actuales.” Opinan los versados en jurisprudencia internacional consultadas por este periódico. Y se espera que se emita una decisión sobre la solicitud de medidas preliminares con relativa rapidez, posiblemente dentro de unas pocas semanas, y, si el caso pasara a la siguiente etapa para analizar si Israel cometió o no los presuntos actos de genocidio, podría llevar años debatiéndose, observan los mismos analistas.
Volviendo al caso particular de Benjamín Netanyahu, la prensa israelí asegura que este individuo teme que el tribunal de La Haya proceda a emitir la orden de captura en su contra. Según los medios israelíes, el gobierno con sede en Tel Aviv está preocupado por La Haya, por las órdenes de captura que podría emitir contra Benjamín Netanyahu; el ministro de Defensa, Joav Galant; y el jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi. En todo caso, es oportuno recordar que la CPI carece de una fuerza policial propia; empero, para llevar a efecto sus órdenes de captura internacional, echa mano a los miembros o países signatarios con la Corte, para que procedan a aprehender a los sospechosos de crímenes de lesa humanidad, en este caso… los judíos arriba mencionados. Es así como una orden de arresto restringiría fuertemente y decididamente todos los movimientos que quiera hacer Netanyahu en el futuro inmediato, a partir de la emisión de la orden de captura. Lo anterior, precisamente porque los 124 gobiernos firmantes de los estatutos de la CPI, están obligados a arrestar a las personas buscadas si entraran en sus territorios y entregarlas al tribunal.
Es importante señalar que la investigación de la CPI no tiene ninguna relación con la acusación por genocidio hecha por Suráfrica, sino, por el contrario, obedece al hecho de que la CPI reconoció el “peligro de genocidio en Gaza” en enero de este mismo 2024, pero la petición a Israel para que detuviera los ataques contra esta Franja, no fue atendida y continuó con la masacre de seres humanos ajenos al conflicto.
Siempre dentro de su actitud violenta y criminal, Benjamín Netanyahu manifestó recientemente que rechazará cualquier acuerdo con la facción armada Hamás, que incluya el fin de la guerra; es decir, “la guerra deberá proseguir” se acuerde lo que se tenga que acordar entre ambos grupos en conflicto. En estos momentos, lo que se negocia incluye el retorno a una paz sostenible, pero no contempla el final absoluto de los ataques en Gaza. Es por eso que Netanyahu aseveró al enviado especial estadounidense, Antony Blinken, que “no aceptaré un acuerdo que incluya el final de la guerra en Gaza”, así según el medio de prensa israelí, Walla.
La postura de Hamás esbozada en las negociaciones, indica que, en una segunda fase del acuerdo para la liberación de los rehenes en su poder, a cambio de presos palestinos, Israel se comprometa a poner fin a la ofensiva; pero Netanyahu se opone tajantemente, porque lo que él desea es la aniquilación total y absoluta de toda vida palestina que se mueva al otro lado de la muralla intrafronteriza que separa a Israel de Gaza. “La guerra debe proseguir” en la opinión y decisión de Netanyahu. Una guerra que no es tal, porque Israel se dedica a masacrar a una población que no tiene armas en sus manos; no tiene un ejército de igual a igual contra el cual combatir y eso, justamente, no es una guerra, sino un ataque de un poderoso ejército (el judío o israelí), armado hasta “los dientes” contra una población civil que no tiene hacia donde escapar, con el Mediterráneo a sus espaldas y una muralla elevada construida por Israel, ante sus ojos.
Los gobiernos que intentan poner freno al genocidio israelí, son Egipto, Qatar y los Estados Unidos, mismos que hablan de pacificación, pero no cesan de enviar armas y dinero en millones de dólares al gobierno asesino de Netanyahu. La nueva oferta que se negocia, incluye una tregua de 40 días y la liberación de los rehenes israelíes retenidos supuestamente en algún lugar de Gaza, a cambio de palestinos encarcelados en prisiones de Israel. No obstante, “no se ve una luz al final del túnel” y los acuerdos entre ambas partes aún están ausentes. Mientras tanto, una oleada de estudiantes universitarios en los Estados Unidos, Canadá y Francia (por el momento), reprochan la criminalidad a Israel y exigen que Netanyahu detenga el “mar de sangre” que está haciendo verter en Gaza.
Así las cosas, estamos en presencia de un asesino en potencia, declarado y manifiesto en toda su naturaleza criminal, que no se veía desde la muerte de Josef Stalin en la Unión Soviética o en la Cuba de Fidel Castro. Netanyahu parece que quiere “batir todos los records” de maldad, asesinatos y extinción de todo un pueblo, una etnia, a la cual él aborrece con todas sus fuerzas.
Ucrania Piensa y Habla de Derrota. Se Siente Abandonada por los Estados Unidos
KIEV-Ciertamente el genocidio que está llevando a efecto Israel en la Franja de Gaza, ha quitado protagonismo a la invasión rusa a Ucrania; incluso, en el Congreso de los Estados Unidos, dominado ampliamente por congresistas de raza judía, le han restado importancia a la aprobación de ayuda económica y militar a los ucranianos y se han concentrado en la defensa de su propio país… Israel.
Muchos analistas de la situación bélica por la que atraviesa Ucrania, recuerdan el abandono que las tropas estadounidenses hicieron a Afganistán, donde, tras la firma de Donald Trump con los talibanes y en aras de que “los soldados regresaran a casa,” dejó desprotegido al montañoso país centroasiático que ahora está en manos de los incivilizados y fanáticos talibanes, con todos los agravantes que ello ha conllevado. Parece que, a través de la historia, los estadounidenses no han sido muy fiables en su amistad con aquellos pueblos a los que ha prometido su ayuda.
Al no llegar la ayuda al frente ucraniano, un oficial de artillería ha dicho que el momento por el que pasan, es dramático, y sin suministros de munición de parte de los Estados Unidos, el frente se desmoronaría. Pero la culpa esencial y principal reside en el Congreso norteamericano, tal y como hemos explicado en las líneas arriba escritas: a la enorme cantidad de congresistas judíos solo le interesa ayudar a Israel en una guerra que no lo es y más bien es una masacre, “un holocausto” a plena luz del día, ante los millones de ojos de la humanidad, que contempla como los hebreos masacran al pueblo palestino en ataques que solo desean la desaparición física de estas personas no judías.
Solo quedaría la retirada…
Así lo ha manifestado el mismo oficial de artillería, quien declinó dar su nombre por razones obvias de seguridad. “Sin munición de artillería, todos los frentes están condenados. La situación en el frente es sombría a la vista de la falta de munición de las fuerzas armadas ucranianas. Las pérdidas aumentarían porque no es posible responder adecuadamente. Los atacantes rusos, en cambio, pueden disparar desde todos los cañones. Los cazas rusos bombardear las posiciones ucranianas con bombas planeadoras, disparadas desde una distancia segura más atrás de la línea del frente, fuera del alcance de las defensas aéreas ucranianas, que de todos modos son igualmente escasas. En algún momento, nos encontraremos en una situación en la que nadie podrá defender el frente: todos estarán muertos o heridos. El resultado sería la pérdida de posiciones y el desmoronamiento del frente.” Recalca el soldado.
Esas mismas palabras son ratificadas por un reciente análisis hecho por el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), con sede en los Estados Unidos, en el que se afirma que “los rusos están avanzando lenta pero constantemente en varias secciones del frente.” Asegura textualmente el documento.
Y es del todo cierto que hoy mismo se está viviendo el peor peligro desde el 2022, pues no existe un suministro sustancial de armas y municiones por parte de los Estados occidentales, que han sido el apoyo de las milicias ucranianas desde el inicio de la invasión rusa. En otras palabras, “el fantasma de la derrota” circunda en el frente defendido por los ucranianos, quienes han bajado la moral ante el embate poderoso del ejército ruso enemigo. Es por esa razón que, tanto el director de la CIA, Bill Burns, como el comandante de las fuerzas armadas estadounidenses emplazadas en Europa, Christopher Cavoli, acentuaron al decir que “existe un riesgo muy real de que los ucranianos pierdan en el campo de batalla a finales del 2024 o, al menos, de que Putin llegue a una posición en la que pueda dictar los términos de un acuerdo político.” Así según un discurso pronunciado por Burns en Washington, para hacer consciencia en quienes tienen en sus manos la ayuda a Ucrania.
Cavoli indicó que el panorama es sombrío para los ucranianos en el frente, “aunque no puedo predecir el futuro, puedo hacer simples cálculos matemáticos. En mi experiencia de más de 37 años en el ejército estadounidense, si un bando puede disparar y el otro no puede devolver los disparos, el bando que no puede devolver los disparos… pierde.”
Desgraciadamente, dentro de los Estados Unidos, los ucranianos tienen enemigos declarados en el Partido Republicano, el mismo de Trump, quien ha dicho claramente que si él gana las elecciones en noviembre próximo, acabará con la ayuda a Ucrania; y los republicanos es lo que han estado haciendo precisamente en estos meses. De tal modo, el paquete de ayuda a Ucrania, estuvo bloqueado durante meses en el Congreso, de parte de los republicanos, y que contemplaba una ayuda financiera por US$61,000 millones. Aparte de esa cantidad, US$51,700 millones estaban destinados al suministro de municiones y armas. No obstante lo anterior, la Cámara de Representantes finalmente desbloqueó la ayuda a Ucrania, pero el paquete de ayuda a Kiev debe pasar todavía por el Senado, un periplo sumamente engorroso, cuando los rusos, en Moscú, se ahorran esa clase de demoras, atascos y oposición política. En otras palabras, los republicanos juegan con las vidas y la libertad de todo un pueblo y nación en Europa, simplemente para hacerle el re-juego a su líder, el corrupto Donald Trump, enzarzado en varios procesos judiciales como nunca antes lo estuvo un ex mandatario de esta potencia. Entonces, el quid del asunto ahora es observar si los suministros llegarán a tiempo a las tropas ucranianas.
Para el especialista alemán en seguridad y experto en Ucrania, Nico Lange, “Ucrania no puede defender la línea del frente en el Este, solo puede retrasar el avance ruso, especialmente con el uso de drones equipados con explosivos, pero los drones no sustituyen a la artillería. Lo decisivo es que el ejército ucraniano reciba ahora, lo antes posible, suministros de munición.” Afirmó en una entrevista reciente concedida a la televisión alemana.
Quiénes son los proveedores de ayuda militar a Ucrania
Son diez gobiernos que tomaron la firme decisión de frenar al ejército invasor ruso, desde que se introdujo en territorio ucraniano y han estado cediendo esa ayuda de manera indefectible y siempre puntual; aunque, la mayor parte de los pertrechos llegan desde los Estados Unidos, cuyo gobierno está fallando en estos instantes en la entrega de insumos militares, según hemos reseñado en las líneas de arriba.
Esos diez países, amigos de Ucrania y enemigos declarados de Rusia, están aportando miles de millones en armas y municiones; aun así, hace falta mayor ayuda que el Congreso estadounidense ha demorado irresponsable y criminalmente. Ahora mismo, los combates más cruentos se están librando en los frentes Este y sur, cuando los soldados ucranianos siguen bajo el fuego de los rusos, quienes los atacan con artillería y la fuerza aérea a todas horas prácticamente.
Pero hay un hecho real y clarísimo: Ucrania, por sí sola, no podría arreglárselas en esta guerra que hasta el momento ha sostenido valientemente y ha infringido fuertes y significativas pérdidas a los rusos en armamento y vidas humanas. Es por esa dependencia desesperada, que los ucranianos hacen llamados constantes a sus aliados para que les proporcionen más municiones y sistemas de defensa aérea.
De acuerdo a un estudio recientemente elaborado por el Instituto Kiel para la Economía Mundial (IFW), los siguientes países son los que aportan más ayuda a Ucrania, en los campos financiero, humanitario y militar, que incluye armas, municiones y equipos que se han asignado y prometido a los ucranianos. De acuerdo a este documento emitido, los Estados Unidos han proporcionado la mayor asistencia militar a Ucrania y la administración actual del presidente Joe Biden, ha comprometido el equivalente a más de US$44,700 millones en ayuda militar. Pero el mayor obstáculo y enemigo de la política/Biden hacia Ucrania, lo representa el Partido Republicano, que bloquea una y otra vez la aprobación de esos paquetes de asistencia. Detalle que hemos desglosado al inicio de este reportaje.
En segundo lugar aparece Alemania, que ha dado €17,700 millones hasta la fecha y el gobierno en Berlín ha prometido entregar a los ucranianos un tercer sistema de misiles Patriot, para fortalecer la defensa aérea del país. En tercer lugar, aparece el Reino Unido, con una ayuda militar adicional equivalente a €2,900 millones. Así, Londres se ha comprometido con Kiev en la asignación de €9,100 millones y ya ha aportado concretamente, €4,800 millones a la causa contra el invasor ruso.
Dinamarca aparece en el cuarto lugar de los donantes y se ha comprometido al aporte de €8,400 millones a los ucranianos, en ayuda militar. De esa cantidad, los daneses ya han dado al menos €4,500 millones. La Unión Europea (UE), aparece en el quinto renglón de esta lista, y usa un instrumento propio de financiamiento extrapresupuestario para proporcionar ayuda militar a Ucrania y se trata del Fondo Europeo para la Paz (EFF). La UE ha prometido armas, municiones y equipos por un valor de €5,600 millones, más otros €5,000 millones que fueron acordados para entregar a Kiev en estos meses.
Los Países Bajos han prometido ayuda militar a Ucrania por €4,440 millones. Luego aparece Noruega, cuyo gobierno ha prometido al país atacado una cantidad considerable en relación con su Producto Interno Bruto (PIB). Brinda ayuda militar y humanitaria al país invadido y le ha prometido un total de €3,800 millones, de los cuales €1,000 millones ya han sido asignados.
Polonia no podía faltar a esta cita, principalmente porque comparte fronteras con los dos países en conflicto, con Rusia y Ucrania y es un aliado firme y cercano al gobierno de Kiev. Además, Polonia se ha convertido desde el inicio de las hostilidades, en un importante centro logístico, del cual parten las transferencias hacia Ucrania, de ayuda militar occidental; es decir, “desde algún lugar en el territorio polaco” parten los blindados, misiles y demás pertrechos, para abastecer al ejército ucraniano, algo que incomoda sobremanera a los rusos, quienes ya han amenazado con invadir Polonia en varias oportunidades. El gobierno de Varsovia ha prometido a Kiev, una ayuda en el aspecto militar, por €3,000 millones.
Finalmente, cierran la lista Canadá y Suecia, el recién ingresado a la OTAN. En el caso de los canadienses, tienen un acuerdo de seguridad con Ucrania y se ha comprometido en proporcionarle al país europeo, más de €2,000 millones en ayuda militar a finales del presente 2024. Ese acuerdo fue firmado entre los dos gobiernos, al cumplirse los dos años de la invasión rusa a Ucrania. En lo que concierne a Suecia, prometió más de €2,000 millones en ayuda militar, aunque al principio solo contemplaba equipos de protección; pero luego cambió la estrategia y ha estado enviando a Ucrania tanques y modernos sistemas de armas.
No obstante lo anterior, reiteramos que lo más importante es la ayuda de los Estados Unidos y que llegue puntual al frente de batalla. Ello, más que otro motivo, ha infringido grandes derrotas a los rusos a lo largo de todo este tiempo y seguirá haciéndolo, pues la capacidad, entrega y valentía del soldado ucraniano, han quedado demostradas en esta guerra, sin dilación ni defecto alguno. En otras palabras, una derrota de Ucrania podría significar un mayor peligro para el resto de Europa, pues Vladímir Putin se sentiría fortalecido e imparable en sus ansias de dominio extraterritorial. “Una derrota en Ucrania, significaría una derrota para Europa”, dijo textualmente Jens Stoltenberg, el Secretario General de la OTAN, en uno de sus tantos discursos. Y eso no lo quiere nadie en el mundo libre, democrático y civilizado.
Netanyahu Imparable en su Masacre en la Franja de Gaza. Delira en su Criminalidad contra
Civiles y Cooperantes de las ONGs
GAZA, Palestina-El dictador no declarado de Israel, Benjamín Netanyahu parece “un poseído” por una fuerza demoníaca que lo empuja, peor que nunca, a asesinar a quienes a él le parezca dentro de la Franja de Gaza: acaba de acabar con las vidas de siete cooperantes de la ONG, World Central Kitchen (WCK), del chef hispano-estadounidense José Andrés, que entregaba alimentos a los damnificados palestinos por causa de los ataques israelíes a este territorio.
Es evidente que el líder de los judíos, Netanyahu, ya perdió toda vergüenza, todo pudor y le importa un comino la imagen de su país, Israel, cuyo pueblo ha pasado de ser “el eterno perseguido por reyes españoles, nazis y comunistas”, para revelar su verdadero semblante de un ejército israelí sediento de venganza contra toda la humanidad y desprovisto de todo respeto por las vidas ajenas. De ahí las matanzas que está consumando en Gaza, donde asesina a mujeres, ancianos, niños, periodistas internacionales y ahora funcionarios de las ONGs que quieren paliar un poco la desesperación de la población tacada por las bombas y misiles lanzados por los judíos.
Con su característica sonrisa sin alma, Netanyahu contesta, pero no convence
Detrás de su mirada se puede observar que esconde los peores pensamientos y sentimientos en contra de sus enemigos y acompaña a esa mirada con una sonrisa complacida, más todavía cuando han caído miles de palestinos, producto de los ataques del ejército que el comanda, el de Israel, y que ataca de manera inmisericorde a la Franja de Gaza. Tampoco le importan los rehenes que todavía están en manos de la facción Hamás, porque no se refiere a ellos siquiera en forma indirecta, no dice absolutamente nada de liberarlos o canjearlos, porque está concentrado, “hipnotizado”, en asesinar todos los días a la población indefensa.
En cuanto a los siete cooperantes de la ONG WCK, el judío aceptó que fueron dados de baja debido al bombardeo provenido de armas israelíes, pero dijo, fríamente como es su costumbre, que “no fue intencional.” “Lastimosamente –argumentó Netanyahu-, ayer se produjo un trágico incidente: nuestras fuerzas golpearon de forma no intencional a inocentes (¿?) en la Franja de Gaza. Esto sucede en una guerra (…), estamos en contacto con los gobiernos y haremos todo lo posible para que no se vuelva a repetir.” Nótese que en ningún momento pide disculpas ni se mostró conmovido, mucho menos preocupado, aún a sabiendas que los asesinados pertenecían a países amigos de Israel, en los casos de Canadá, Australia y los Estados Unidos. A él ya no le importa a quien o quienes asesina. Eso es evidente.
Las siete víctimas viajaban a bordo de un vehículo perfectamente identificado; pero a los israelitas no les importó, porque el primer disparo contra el convoy de la ONG cuya sede está en los Estados Unidos, se produjo en la puerta de un almacén, cuando apenas estaban arrancando los motores de los automóviles y los estuvieron persiguiendo, s sabiendas que eran cooperantes humanitarios, a lo largo de dos kilómetros, hasta que acabaron con todos los ocupantes de los autos. Es por ello que toda la intencionalidad se manifestó de parte de los comandos israelíes que destrozan a diario lo poco que queda en pie en Gaza.
Las víctimas eran originarias de Australia, Polonia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Palestina. Es por esa razón que el gobierno de Canadá exigió, casi de inmediato, al de Israel “una completa investigación del caso y que los responsables de estas muertes rindan cuentas.” Así según un comunicado emitido por el Ministerio del Exterior canadiense. Todos ellos trabajaban para la ONG World Central Kitchen (WCK), fundada por el chef español José Andrés y cuya misión es llevar alimento a las personas, alrededor del mundo, que necesiten ser auxiliadas por diferentes motivos. Los alimentos habían llegado a Gaza vía marítima, partiendo desde la isla de Chipre hasta las costas de Gaza. Incluso el ejército de Israel que domina a este territorio por completo, pues lleva a cabo una guerra “sin respuesta” o en una sola dirección, sin que reciba respuesta armada a sus ataques, sabía la clase de materiales que se desembarca en Gaza, ya que tienen la potestad de vigilar que entra allí y cuál es el destino de esas mercaderías.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau visiblemente afectado, calificó el ataque de “inaceptable” y reiteró la posición de su gobierno al exigir a los judíos de Israel que investiguen a fondo este vil asesinato de los cooperantes. Por su parte, la ministra del Exterior de este mismo país, Mélanie Joly, dijo sentirse “horrorizada” por el ataque del ejército israelí y confirmó que una de las personas masacradas, es canadiense. “Condenamos estos ataques y solicitamos una completa investigación. Canadá espera que todos los responsables de estas muertes, rindan cuentas y se lo comunicaremos directamente a Israel.” Escribió en su cuenta de X.
Al mismo tiempo, varios jefes de Estado y altos representantes gubernamentales, condenaron el hecho, el asesinato flagrante de los siete trabajadores de las ONG y exigieron a Israel que aclare las circunstancias de dicho ataque.
En lo que atañe a WCK, esta organización anunció que, después de este mortal incidente, “interrumpe las operaciones en territorio palestino”, en parte porque las garantías de seguridad no están dadas sobre el terreno y en cualquier momento podrían caer más víctimas de los misiles enviados por el ejército judío.
José Andrés, el chef español, fundador de esta ONG humanitaria, escribió en su cuenta de X al percatarse del vil asesinato de sus amigos y cooperantes: “El grupo perdió a varios de nuestros hermanos y hermanas en un ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa Israelíes, en Gaza. Tengo el corazón roto y estoy de luto por las familias y amigos y toda la familia WCK. El gobierno israelí debe parar esta matanza indiscriminada. Debe dejar de restringir la ayuda humanitaria, dejar de matar civiles y trabajadores humanitarios y dejar de usar la comida como arma.” En las últimas palabras del texto, el chef español devela que una de “las tácticas” usadas por los israelíes en Gaza, es no permitir la entrega de alimentos a la población que sufre hambre y sed y que se le entregue solamente en pequeñísimas cantidades. Sin duda, una especie de arma tan terrorífica como la peor… la más mortal. Es evidente que el objetivo del ejército judío, que sigue las órdenes de Netanyahu, es acabar con toda señal de vida que no sea judía y que pertenezca a los palestinos. Se trata de una guerra de aniquilación total del enemigo, a ojos y asombro de la comunidad mundial que sigue los hechos con verdadera preocupación.
La ONG del chef español José Andrés, participaba en el envío de ayuda humanitaria a Gaza a través de un corredor desde Chipre, en el Mediterráneo europeo; y en la construcción de un muelle temporal en esta zona palestina. Un primer barco con mercadería, descargó a mediados de marzo, 200 toneladas de víveres, siempre bajo supervisión del ejército israelí, pleno de paranoia, pues teme que lleguen armas para los palestinos en lugar de alimentos. En estos momentos, un segundo buque navega en la misma dirección con más ayuda.
Los judíos sabían que era un convoy humanitario
… aun así dispararon hasta hacer añicos a los autos y dejar sin vida a los ocupantes internacionalistas. Y la misma organización ha asegurado que el convoy había coordinado su viaje con el ejército judío, pero, de todas maneras, decidieron darles “de baja” a los extranjeros, de la manera más criminal y vil posible, según hemos observado.
Los autos partieron desde un almacén de Deir el Balah, en el corazón de Gaza, y llevaban en este lugar seis meses, tiempo en el que sirvieron más de 42 millones de comidas, según los datos consignados en sus bases computadorizadas. El comunicado oficial de la ONG expresa lo siguiente: “World Central Kitchen está destrozada la confirmar que siete miembros de nuestro equipo han muerto en un ataque del ejército israelí en Gaza. Los integrantes del equipo viajaban por una zona desmilitarizada en dos coches blindados con el logo de WCK y un vehículo ligero. Pese a coordinar sus movimientos con el ejército israelí, el convoy fue alcanzado cuando salía de un almacén de Deir el Balah, donde el equipo había descargado más de 100 toneladas de comida llevada a Gaza por la ruta marítima.” Y prosigue Erin Gore, responsable de la redacción del comunicado de la ONG: “Esto no es un ataque contra WCK, es un ataque contra las organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más duras en las que el alimento es usado como arma de guerra. Es imperdonable.”
Las imágenes en video y las fotografías difundidas por la prensa internacional presente en el lugar, muestran los restos humanos de los siete cooperantes, en el Hospital de los Mártires de Al Aqsa, en Deir el Balah. El personal médico mostró los pasaportes de tres de los fallecidos y eran de Gran Bretaña, Australia y Polonia. Minutos antes, la misma ONG había publicado en la red social X que parte de las actividades que ejecutaban en Gaza, incluían una red de 60 cocinas portátiles en el sur y centro de la Franja de Gaza y gracias a ello, proporcionamos cientos de miles de comidas al día a los civiles desplazados por la ofensiva israelí.
Mahmoud Thabet, sanitario de la Media Luna Roja Palestina, quien formaba parte del equipo que trasladó los cadáveres al hospital, rindió declaraciones a la prensa y dijo que se necesitaron varias horas para recuperar los siete cuerpos sin vida. Fueron llevados primeramente al hospital Al Aqsa, después a otro más al sur, donde se preparó la evacuación a través del paso fronterizo con Egipto.
La ONG ayudaba a más de un millón de personas, que es casi la mitad de la población de la Franja y que está en la fase denominada “catastrófica de inseguridad alimentaria.” De hecho, son más que aquellas personas que sufrieron la hambruna en Somalia en el 2011, con seis veces menos población que los somalíes. Los israelíes han rodeado prácticamente a los gazatíes y no han permitido que la ayuda humanitaria ingrese vía terrestre. Países europeos, entre ellos Alemania, intentaron lanzar los paquetes de alimentos desde el aire, pero los judíos también se opusieron a ese método. Es evidente que lo que pretende el gobierno del genocida Netanyahu, es el aniquilamiento total, por todos los medios posibles de la población palestina y con ella a quienes intentan ayudarla.
Retornando a las reacciones ante este asesinato de los cooperantes, el Reino Unido convocó al embajador israelí en Londres, para exigirle explicaciones; y el ministro de Exteriores de Inglaterra, David Cameron, escribió en la red social X: “Hablé con el ministro del Exterior israelí, Israel Katz, para subrayar que las muertes eran completamente inaceptables. Israel debe explicar urgentemente cómo ocurrió esto y tomar medidas importantes para garantizar la seguridad de los trabajadores humanitarios en el terreno.”
El gobierno de Polonia también redactó en la misma red X que “expresamos nuestro más sentido pésame a la familia del voluntario polaco que estaba prestando ayuda al pueblo palestino en la Franja de Gaza. Polonia se opone al desprecio por el derecho internacional humanitario y la protección de civiles, incluidos los trabajadores humanitarios.” Cita el texto oficial del gobierno con sede en Varsovia
Y Anthony Albanese, primer ministro de Australia, informó que pidió cuentas a Israel por la muerte de la trabajadora humanitaria australiana y el ejecutivo de Camberra ha calificado “completamente inaceptable lo ocurrido. Es una estrategia que nunca debió ocurrir.” Enunció en la ciudad australiana de Brisbane.
Pero la respuesta más dura la ha dado el mismo fundador de la ONG Wolrd Central Kitchen, José Andrés, quien le dijo a Netanyahu que “no fue solo un desafortunado error, sino el resultado directo de la política de su gobierno de reducir la ayuda humanitaria a niveles desesperados. Los ataques aéreos contra nuestro convoy no fueron solo un desafortunado error de la niebla de la guerra: fue un ataque directo contra vehículos claramente señalizados, cuyos movimientos eran conocidos por ustedes los israelíes, por sus Fuerzas de Defensa. Reclamo que aparezca lo mejor de Israel, pues no se puede salvar a los rehenes, bombardeando todos los edificios de Gaza. (En todo caso) es una buena noticia el anuncio del ejército de Israel y del gobierno, de poner en marcha una investigación sobre lo ocurrido, pero dicha investigación debe comenzar desde arriba, no solo desde abajo. No se puede ganar una guerra matando de hambre a toda una población. Los trabajadores de mi ONG eran lo mejor de la humanidad, quienes arriesgaron todo por la actividad humana más fundamental: compartir nuestra comida con los demás. Los israelíes, en el fondo de su corazón, saben que los alimentos no son un arma de guerra e Israel es mejor que la forma en que se libra esta guerra; mejor que bloquear el suministro de alimentos y medicinas y matar a los trabajadores humanitarios. El gobierno israelí necesita abrir rutas terrestres para alimentos y medicinas. Tiene que dejar de matar a civiles y trabajadores humanitarios. Necesita iniciar hoy el largo camino hacia la paz.” Este texto del chef español, apareció publicado en el periódico israelí “Yedioth Ahronoth.”
Finalmente, Christopher Lockyear, secretario general de Médicos Sin Fronteras (MSF), hizo conocer su posición acerca de las masacres que lleva a cabo el ejército israelí en Gaza: “Esperamos algo más que excusas de Israel y algo más que las condenas de sus aliados. Los trabajadores humanitarios están protegidos. Sin peros. No aceptamos la narrativa de incidentes lamentables. No la aceptamos porque forma parte del mismo patrón de ataques deliberados contra sanitarios, periodistas, personal de la ONU, escuelas y hogares. Se trata de impunidad, de un desprecio total por las leyes de la guerra, y ahora debe convertirse en una rendición de cuentas. Las condenas que hemos visto por la muerte de siete cooperantes de World Central Kitchen, son correctas, pero, ¿dónde están las condenas por cada trabajador humanitario (han muerto asesinados más de 200 desde el 7-O, cinco de ellos de MSF), por cada hospital que es destruido, por cada intento de manipular los medios de comunicación? Estas muertes son una elección política por parte de Israel, que no afronta ninguna consecuencia porque sus aliados permiten esta impune brutalidad y le abastecen con más armas para matar y mutilar indiscriminadamente a civiles. Los 200 trabajadores humanitarios muertos en esta guerra, más que en cualquier otra, son solo una pequeña fracción de las más de 33,000 víctimas, muchas de ellas mujeres y niños, en un conflicto brutal, desproporcionado y sin medidas preventivas. Todos los Estados que apoyan a Israel en estas circunstancias, son cómplices morales y políticos. Hacemos un llamamiento a todos los Estados, en particular a Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea (UE), para que hagan todo lo que esté en su mano para influir en Israel y que dejen de apoyar los continuos ataques contra civiles e infraestructuras civiles en Gaza.”
Así se expresó este funcionario a su llegada desde la Franja de Gaza y ha repasado verbalmente todas las iniquidades, las desgracias que Israel ha llevado a Palestina, al consumar matanza tras matanza, sin importar el número de víctimas, su procedencia y las tareas humanitarias que estén realizando, porque la consigna de Netanyahu es… asesinar así, de cualquier manera. Para eso existe él y esa es “la misión sangrienta” de su existencia.
El Gobierno de Chile ha Reaccionado de Manera
Contundente contra el Genocidio Causado por
Israel en la Franja de Gaza
SANTIAGO DE CHILE-Si hay un país y un gobierno con autoridad en América –autoridad de verdad-, para alzar su voz en contra de otro Estado que es, a su vez, genocida, ese es Chile, y lo ha hecho en contra de Israel por la matanza diaria que lleva a cabo en Gaza, Palestina.
No obstante, hay una tesitura que se debe aclarar en esta reacción del gobierno chileno: no es por el hecho de ser una administración comunista, por la que está actuando de esa manera, sino porque las matanzas en la Franja de Gaza ya han superado todas las tolerancias –si es que el genocidio se puede tolerar en alguna medida-, y ha impresionado traumáticamente a los gobernantes actuales de esta nación suramericana.
Chile y su gobierno han actuado en contra del Estado asesino de Israel, porque es un tema de lesa humanidad, y esas muertes de inocentes que son bombardeadas día y noche por los judíos, claman porque alguien o algún Estado las defienda de manera decidida. Por eso ha actuado La Moneda, el palacio de gobierno chileno, contra los viles y descarados asesinos que viven en Tel Aviv, Capital de Israel.
Chilenos de aquí y de allá, a favor de palestina
Se reitera: no es porque el gobierno de Gabriel Boric sea de tinte marxista (incluso Karl Marx era judío, lo mismo Lenin), que ha presentado su queja formal contra el Estado hebreo, masacrante del pueblo palestino, sino porque ya basta de asesinatos a plena luz del día en Gaza, de mujeres, niños, mujeres embarazadas y ancianos, que lo único que quieren es vivir en paz y paliar el día a día con seguridad y normalidad.
Además, es evidente que la sociedad chilena, casi al unísono, condena a los ataques repetidos del ejército judío a la Franja de Gaza: los derechistas, los católicos, los izquierdistas, los militares, los clérigos, etcétera, etcétera. Es decir, el grosor de la sociedad chilena no está de acuerdo –no puede estarlo- en que el ejército israelí esté efectuando una limpieza racial en Palestina ante las miradas asombradas por la incredulidad del mundo entero.
Desde que comenzaron los ataques, el gobierno de Boric llamó a consultas a su embajador en Tel Aviv y esa fue la primera reacción de Chile ante lo que estaba sucediendo en Oriente Próximo; después, su embajadora ante las Naciones Unidas, Paula Narváez, y ante el pleno de la Asamblea General, dijo lo siguiente y con toda claridad para que lo entendiera el asesino Benjamín Netanyahu, en Israel: “Chile no permanecerá indiferente frente a la actual situación y al dolor del pueblo palestino.” De inmediato, y en el punto clave y central de su discurso, la representante diplomática de Chile, pidió a la Corte Internacional de La Haya (CPI), en los Países Bajos, que investigue los eventuales (y cotidianos), crímenes por parte de Israel; y ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), aseveró que Israel estaba violando al derecho internacional.
Pero Gabriel Boric no se quedó allí, sino que tomó una medida que sí dolió fuertemente a los judíos en Israel y en otras latitudes del mundo (recordemos que nacen y crecen donde ellos quieren, pero sus almas y corazones están en Israel, su verdadera patria): excluyó a Israel de la Feria Internacional del Aire (FIDAE), que es un importante encuentro de negocios del área militar, que siempre se celebra en abril, en Santiago, Capital chilena. Hace pocos años atrás, incluso, el ex presidente Sebastián Piñera, muerto en un accidente aéreo recientemente, excluyó a la Rusia de Putin de la misma feria, debido a su flagrante y criminal ataque a Ucrania. En los dos casos, el ucraniano y el israelí, según se desprende evidentemente, la reacción de los chilenos ha sido por la violación al derecho internacional cometido por los dos gobiernos y en la actualidad por el judío.
La respuesta llegó casi de inmediato de parte del embajador de Israel en Santiago, en reclamo por las decisiones del gobierno de Chile y según sucede siempre en los casos donde hay judíos involucrados, estos apelan a lo que ellos llaman “holocausto nazi”, a las persecuciones históricas que han sufrido y quieren que la humanidad se compadezca de ellos en un libreto, “un papel teatral” que utilizan demagógicamente cada vez que se les viene en gana, para despertar lástima, conmiseración y desviar la atención de los crímenes que ellos cometen ahora mismo.
Sin embargo, a pesar del roce fortísimo entre ambas cancillerías, el ministro del Exterior chileno, Alberto van Klaveren, mencionó que la ruptura de relaciones entre ambos países, estaba descartada de plano: “No se ha contemplado romper relaciones diplomáticas.” Aseguró de manera textual.
También, según era de esperar, la presidenta de la comunidad judía de Chile, Ariela Agosin, terció en la problemática al señalar que “Boric toma decisiones ideologizadas –haciendo creer que ha sido la determinación de un comunista y su gobierno, en contra de una nación capitalista, que es Israel-. No todos en el gobierno ni en el aparato Estatal piensan y habrían actuado como él. Como jefe de Estado, tiene derecho a tomar estas decisiones, pero deberían ser consultadas con el Consejo de Relaciones Exteriores y las comisiones de defensa en el Congreso, porque afectan a todo el país. Aleja a empresas clave para la defensa nacional y deja a Chile en una situación vulnerable. Y como comunidad judía, nos sentimos en mayor peligro ante algún tipo de atentado.” Nótese que la judía obvia o deja de lado el quid del asunto, esto es, la masacre que está cometiendo el ejército judío en Palestina de ciudadanos comunes, quienes son bombardeados un día y otro también; toca así mismo el tema económico que en los judíos tiene una trascendencia única, prioritaria, por encima de la familia, la religión y otros aspectos de carácter humanitario; y finalmente, utiliza la conmiseración, ese sentirse perseguidos por el resto de los seres humanos, cuando dijo que el gobierno chileno los deja desprotegidos, cuando tienen a un ejército, el israelí, que es uno de los mejores armados y entrenados a nivel mundial. Es cuando se retuerce en su falta de argumentación y regresa al consabido y desgastado tema del “holocausto nazi” y dice Agosin en nombre de la comunidad hebrea de Chile: “(…) esto no tendría que tener que ver con el color político (insiste con el comunismo de Boric), es mucho más complejo que eso. Dentro de la comunidad judía también hay posturas políticas y opiniones diversas, pero hay consenso en que lo que pasó es la tragedia más grande que le ha ocurrido al pueblo judío desde el holocausto (sigue con su necedad con la finalidad de crear lástima en la opinión pública), y no puede volver a pasar. Si las medidas que se han tomado son las correctas (masacrar a los palestinos), en eso puede haber divergencia.” Por supuesto que hay divergencia cuando el ejército israelí (judío) está ejerciendo una matanza indiscriminada en la Franja de Gaza, con el único objetivo de aniquilar a los palestinos que allí viven (y mueren hoy en día). No se puede aceptar, bajo ninguna premisa o concepto, tal matanza.
En respuesta, el senador Francisco Chahuán, del derechista Partido Renovación Nacional, opositor al gobierno, “no hay que romper las relaciones diplomáticas, pero sí corresponde que Chile, como ha sido históricamente su posición, pida que no se vulneren las normas del derecho internacional humanitario. El Estado (chileno), ha mantenido una línea consistente en su política exterior y fue Piñera (qepd), quien reconoció al Estado palestino. Chile ha apoyado todas las resoluciones de la ONU que condenan la ocupación ilegal en territorio palestino e instan a las partes a la solución de dos Estados y a generar una paz justa y duradera.”
Para el abogado Nelson Haddad, también chileno, y ex embajador en Jordania, Egipto e Irak, “se trata de una posición (del gobierno de Boric), de principios, una política de Estado que no cambia según el gobierno de turno. Aquí se defienden los derechos humanos y la adhesión al derecho internacional humanitario.” Acotó.
“Quien no está a favor de los judíos… está en contra de ellos”
Ese es el pensamiento y sentimiento del conglomerado judío allí donde viva y forme sus típicos grupúsculos o “comunidades”, según se define a sí mismo: “o están con nosotros o están en contra de nosotros.” No existe una posición intermedia, según lo creen, porque en su concepción de la historia y de la realidad propia, la humanidad les debe las vidas que han perdido en el pasado y utilizan ese argumento para manipular, manipular y manipular, al mismo tiempo que crean lástima y hacen que se compadezcan del sufrimiento de los judíos, una raza considerada una de las más acaudaladas del planeta, donde cuesta hallar a un judío que no sea millonario o medianamente rico, en su defecto.
En retorno a la presidenta de la comunidad judía de Chile, Ariela Agosin, agregó: “rechazamos cuando se dice que la acción de Israel (en Gaza), constituya genocidio y se debe analizar cada caso para establecer si se configuran crímenes de guerra. El presidente (Boric) hablaba de genocidio mucho antes del 7 de octubre (cuando Hamás raptó a judíos y los hizo sus rehenes). Usan la palabra con una liviandad absoluta. Jurídicamente tiene una carga muy importante, pero se ha banalizado. Israel ha seguido las normas del derecho internacional humanitario.” Ha concluido con absoluto cinismo y lo peor… burlándose de la inteligencia global de quienes observamos día tras día cuando el ejército judío o israelí asesina a más de 500 palestinos inocentes, con sus misiles y armas portátiles en Gaza. Allí no han banalización, no hay “liviandad” en el término como señala esta hebrea que vive en Chile usurpando las riquezas de la sociedad chilena.
En todo caso y en vista de lo anterior, un grupo conformado por 620 abogados chilenos presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional (CPI), contra el dictador no declarado de Israel y ejecutor de esta masacre en Gaza, Benjamín Netanyahu, quien ya tenía otra acusación presentada por el gobierno de Suráfrica, un país, un pueblo, hipersensibles ante las muestras de apartheid, asesinatos y depuración de las razas.
La querella presentada por los litigantes chilenos, alcanza también al ministro judío de defensa y a jefes militares israelíes, por delitos contra la humanidad, genocidio y crímenes de guerra cometidos en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental.
La delegación de estos letrados fue recibida en La Haya, sede de la Corte, el pasado 11 de marzo del presente año y este fue el razonamiento que ellos mismos dieron a la prensa: “Chile condenó el 7 de octubre e hizo esfuerzos para la liberación de rehenes (tomados por Hamás); pero lo que ha ocurrido a partir de esa fecha, es un castigo colectivo contra la población civil de Gaza. Chile no puede permanecer indiferente. Eso es ser cómplice de genocidio. Hemos acreditado con testimonios, fotografías y fuentes directas de testigos presenciales el genocidio que se está cometiendo.” Apuntó el vocero del grupo de abogados.
La reacción nuevamente por parte de Ariela Agosin, muy despierta y siempre dispuesta a defender a su raza hebrea, se dio a conocer de inmediato cuando supo de la querella planteada por los jurisconsultos chilenos en los Países Bajos: “Hay una diferencia muy grande entre cómo toma ciertas crisis en el mundo. Hay una visión ideologizada (por ser un gobierno comunista el de Boric, a eso se refiere), no es solo una cuestión de principios (descarta que los chilenos tengan principios, porque sancionan moralmente las matanzas del ejército de Israel). Hay antisemitismo y prejuicios horribles (regresa al viejo discurso del anti-judaísmo para hacerse ver “perseguida” y quemada en los hornos nazis, para manipular a la opinión con el desgastado “holocausto”). Una cosa es criticar al gobierno de Israel de turno y sus decisiones –continúa-, y otra es cuando se cruza el antisemitismo, que es en contra de los israelíes y judíos en general. Condenar no sirve para nada, los países tienen que instar a que esta situación termine (…). Hay que dejar de lado los colores políticos y los prejuicios.” Concluye la presidenta de los judíos en Chile.
Es decir, lo que ella pretende y se puede observar entre las líneas de sus palabras, es que los chilenos, su gobierno, embajadores, canciller y abogados, acepten lo que hace Netanyahu, que se acepte tácitamente que los palestinos no deben, no pueden, vivir y deben ser exterminados a sangre y fuego, cuando a los judíos así les parezca, con total impunidad, que la humanidad vuelva el rostro al lado contrario y que todo se olvide y no se comente más en el futuro inmediato y posterior. Porque, entre otras razones, “el pueblo elegido tiene el derecho (dado no sabemos por qué o por quién), de asesinar al que le parezca y en el momento que le parezca” sin que el resto de los hombres “chiste” o deje escapar un gemido de desaprobación siquiera. Eso es lo que se puede leer entre las líneas de sus palabras. Y sin hacemos lo contrario, como los abogados chilenos en La Haya, “todos somos antisemitas, nazis, hijos de Hitler y odiamos a los judíos, que están en este mundo solo para ser admirados, tolerados, bendecidos y aceptados con sus millones de defectos y equívocos.” Según su percepción de la realidad actual y pasada.
Para el abogado Nelson Haddad, “en lo personal, no veo antisemitismo en el presidente (de la República) o el gobierno, pero el sector de izquierda que representa tiene una sensibilidad especial respecto del conflicto y efectivamente, es muy crítico de Israel. Aquí no hay ningún tipo de animadversión (…). (Lo que pasa es que) quien cuestiona la acción de Israel, rápidamente es rotulado como antisemita, es una particularidad de una estrategia comunicacional.” Y ese es el término exacto: “estrategia” de los judíos desde el arribo de Hitler al poder en Alemania en 1933: repetimos… hacerse ver los perseguidos de siempre, los pobrecitos, los masacrados, los gaseados en cámaras y ahora los odiados debido al profundo antisemitismo existente.
Es una estrategia que les funciona a los judíos igual a un tridente: por un lado genero culpabilidad en la humanidad que supuestamente los odia; por el otro, continúo enriqueciéndome con mis empresas y negocios (muchos de ellos espurios como el tráfico de órganos humanos que compran los médicos judíos en Israel); y en una tercera acción, se apoderan callada y gradualmente, gracias a la compra de puestos gubernamentales, del país donde viven, porque el objetivo de los hebreos es dominar todo lo que esté a su alcance, desde las mentes, almas, pueblos, gobiernos, economías y luego defenestrar a quien se les oponga o les sea antipático.
Netanyahu y su partida de asesinos armados, están aniquilando al pueblo palestino y punto. Eso es lo que sucede en Gaza. No se puede llamar de otra manera y a ese asesino hay que capturarlo, procesarlo y ahorcarlo. Las palabras sobran en tal caso y los chilenos han hecho lo pertinente, lo que el mundo entero debería hacer con los judíos genocidas.
Haití se Desangra. A Veces con Lentitud, a Veces con Pausa y a Veces con Rauda, Vertiginosa
y Cruel Criminalidad
PUERTO PRÍNCIPE-Nos acordamos de aquel viejo dicho popular que menciona: “todos saben dónde está, saben lo que ahí ocurre, pero nadie quiere ir a verlo.” Eso pasa exactamente con este pequeño país caribeño, incrustado en la parte occidental de la isla La Española, que comparte con la República Dominicana.
Es del todo cierto que, alrededor del mundo, la mala fama acuñada por los haitianos, es del conocimiento pleno de millones de personas, pero nadie y tampoco ninguna organización con poder real, como las Naciones Unidas o la ineficaz OEA, han hecho algo realmente importante por Haití, por sacarlo de su estado sedente de miseria, conflictos sangrientos dentro de su población (aplastantemente negra), dictadores y presidentes convincentemente corruptos, ni apartarlo de esa deshonrosa posición de ser el país más pobre del hemisferio Occidental. Nadie, aparte de observar con morboso detenimiento lo que ocurre dentro de sus fronteras, ha tratado de dar tan solo una ligera solución que vierta una luz o ayude a paliar el acabose que consume y atemoriza a su empobrecido pueblo día tras día. La indiferencia ha sido “la moneda de cambio” con la cual la comunidad internacional mira a Haití y se “cruza de brazos” tranquilamente, mientras la pequeña nación se desangra brutalmente dentro de su ingobernabilidad y posibilidad de que caiga en manos de pandilleros asesinos y anarquistas comunes, que son parte de los causantes de este doloroso pasaje por el que atraviesa el país y su población.
Llamado y clamor del presidente Luis Abinader
Evidentemente preocupado… ¡Por qué no habría de estarlo! El mandatario de la República Dominicana, único territorio nacional que comparte fronteras con los haitianos, ha lanzado un grito de auxilio para que concurran a ayudar y acabar con la sangría que se vive en Puerto Príncipe y demás ciudades haitianas. “¡Por favor, evitemos que termine arrasado por el caos y la anarquía!” Ha dejado leer y escuchar Abinader, fuertemente impresionado por las matanzas que se suceden en las calles de las principales urbes de Haití, urbes que, dicho sea de paso, son un cúmulo de escombros y miserias, por todo lo que ha sucedido aquí.
Su clamor lo dijo en dirección a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con estos términos: “¡O luchamos juntos por salvar a Haití o lucharemos solos para proteger a República Dominicana!” En clara demostración de que su propio país sufre, indirectamente, los embates de la violencia que ocurre al otro lado de la línea fronteriza. También, empujado por la inmigración, en huida, de miles de haitianos, quienes buscan seguridad, alimento, un lugar dónde vivir y medicina en suelo dominicano. Lo cual no deja de ser una carga social y económica para su gobierno. “Evitemos que Haití termine arrasado por el caos y la anarquía, no permitamos que la crisis que allí se vive, se expanda por toda la región.” Agregó.
Lógicamente, Luis Abinader se muestra preocupado y fuertemente impresionado por los enfrentamientos reiterados que se dan en Puerto Príncipe entre las bandas del crimen organizado, que siembran el terror y dejan tendidos decenas de cuerpos inertes de personas inocentes, cuyo único “delito” ha sido el de estar en el sitio equivocado donde se dieron las masacres. Por ejemplo, hace pocas fechas, centenares de habitantes de la zona norte de la Capital, abandonaron sus casas ante los ataques violentos por las disputas de territorios, que es una guerra interna que desangra a la postrada nación caribeña. Al margen, el gobierno provisional y las fuerzas del orden, solo miran con total impotencia, porque no pueden hacer nada para detener la enorme sangría generalizada que se está dando a diario.
Por su parte, la ONU, mostrando su desidia, su “letargo”, su “modorra” y su indolencia en este y en otros casos, como la matanza en la Franja de Gaza que llevan a cabo los israelíes, en una depuración racial a “plena luz del día” y ante los ojos del mundo entero, lo único que hace es elaborar estadísticas y darlas a conocer en sus sesiones plenarias; es así como ha informado que más de 800 personas murieron el pasado enero, debido al enfrentamiento entre las bandas de criminales callejeros; y Antonio Guterres ha hecho énfasis en algo que ya todos sabíamos: “Haití está entre las naciones que más sufren hambre, lo que refuerza el caos y la violencia. Un vientre vacío es combustible para la agitación.” Recalcitró el Secretario General de la ONU. Sin embargo, su argumentación sonó a algo así como “descubrir el agua tibia”; es decir, solo reafirmó lo que ya se sabe hasta la saciedad con respecto a esta nación de las Antillas Mayores.
Regresando al presidente dominicano, Abinader, no solo se dirigió a la ONU y OEA, sino que su petitoria de ayuda la extendió a la comunidad mundial y se despliegue una fuerza internacional para enfrentar y detener el caos generado por años de crisis política y social. Estas fueron sus declaraciones a la prensa: “Desde septiembre del 2021, nuestro gobierno viene denunciando, ante diversos órganos de la ONU, el continuo deterioro de las condiciones sociales en Haití. Lamentablemente, la grave situación que vive el país vecino, no ha sido atendida con la urgencia y la contundencia que merece. El resultado es que hoy Haití, con gran parte de su territorio controlado por bandas criminales, está al borde de una guerra civil. Se acabó el tiempo de las promesas. A partir de hoy, entramos en el momento de la realización. El dinero aparece ahora o el colapso de Haití será irreversible.” Puntualizó el mandatario de República Dominicana.
La realidad actual de esta nación se decanta en su total ingobernabilidad; es decir, hay gobierno provisional, después del asesinato de su último presidente, Jovenel Moïse, que es menos que nada, pues no gobierna, no puede gobernar y no lo dejan gobernar los delincuentes que pululan por las calles, que, dicho sea de paso, tampoco gobiernan porque esa no es su intención, sino la de crear mayor incertidumbre, peligrosidad y caos. Haití, en síntesis, es una nación que se enfila hacia el colapso total, una situación que se ha agravado mes a mes, día a día, desde el magnicidio contra el ex mandatario Moïse, cuando estaba en su casa de habitación en Puerto Príncipe, en el 2021, y fue ultimado a balazos por un comando de 28 sicarios, 24 de ellos ex paramilitares colombianos, pagados por alguien que todavía permanece en las sombras y cuya identidad no ha sido posible dilucidar por parte de las autoridades policiales. Moïse tenía 53 años de edad cuando fue asesinado, dormía al lado de su esposa, Martine, quien, “por arte de magia” fue respetada durante el atentado y no sufrió ni un rasguño por parte de los criminales. De acuerdo con la versión que brindó a los agentes investigadores, no le hicieron nada porque fingió que estaba muerta. En la actualidad, hay 11 individuos presos, incluyendo al empresario haitiano-chileno, Rodolphe Jaar, quien fue condenado a cadena perpetua en un tribunal de los Estados Unidos, por “conspirar para cometer asesinato o secuestro fuera de Estados Unidos y de brindar apoyo material con resultado de muerte.” Y es que, según el juez que lo envió a prisión, Jaar “fue responsable de proporcionar armas a los cómplices colombianos, para facilitar la realización de la operación (el atentado contra el ex mandatario Moïse).” Fue apresado en República Dominicana en enero del 2023 y aceptó viajar por voluntad propia a los Estados Unidos, donde se declaró culpable de la mencionada acusación; es decir, por brindar apoyo al comando que asesinó al entonces presidente haitiano. Desde el instante cuando se supo del magnicidio, Haití desembocó en el empeoramiento de su crisis social, delincuencial, política –amén de la económica, que ha sido su problema permanente-, y sangrienta, que al resto de la humanidad tiene profundamente conmovida.
Esa misma situación sangrienta, ha desatado también una fuerte crisis diplomática con República Dominicana, cuyo gobierno ha exigido al haitiano que tome las medidas frente a las bandas criminales, exigencia que no ha podido cumplir, debido a la falta de recursos materiales y humanos que padece el Estado de Haití, su Poder Ejecutivo propiamente.
Paliativos ante el enorme caos…
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas dio un primer paso, aunque tímido: aprobó el año pasado una resolución para autorizar una misión multinacional de apoyo a la seguridad de Haití; no obstante, el presidente dominicano, Luis Abinader, denunció que “todo se ha quedado en palabras. El colapso de Haití sería una amenaza para nosotros y la región. Por eso, quiero advertir hoy a la comunidad internacional que República Dominicana luchará con todas sus fuerzas para evitar ser arrastrada al mismo abismo de Haití. ¡Evitemos que Haití acabe asolado por el caos y la anarquía; no permitamos que la crisis allí, se extienda por toda la región. La comunidad internacional no puede permitir que la tragedia haitiana continúe ni un solo día más.”
El gobierno haitiano, por su parte, también ha dado pasos cortos en relación a la crisis que sufre el país y ha decretado un estado de emergencia y toque de queda nocturno, después de que unas 12 personas murieron cuando los pandilleros atacaron una penitenciaría, la más importante de la Capital, y permitieron la fuga masiva de presidiarios. En un comunicado gubernamental, se dio a conocer que “(el propósito) es restablecer el orden y tomar las medidas apropiadas para recuperar el control de la situación. Las fuerzas del orden han recibido el mandato de usar todos los medios legales a su disposición, para que se respete el alto al fuego y detener a los infractores.” Indicó la nota que fue firmada por Patrick Michel Boivert, el primer ministro interino, tras la ausencia del titular en ese cargo, Ariel Henry.
El hecho del asalto a la cárcel se presentó cuando bandas armadas irrumpieron en el edificio penitenciario, fuertemente armadas, y permitieron la fuga de unos 3,600 reclusos, de un total de 3,696, que componían a la población carcelaria. Ya en las calles, aumentaron todavía más el caos reinante, la inseguridad y los actos delictivos. Incluso, dentro de la refriega que se dio en la prisión, fueron asesinados unos 12 reos y de los fugados, otros 15 ya han sido muertos en las vías públicas de Puerto Príncipe. Sus cuerpos han sido encontrados, esparcidos en varios puntos de esta ciudad Capital; y otros 10 estaban inertes en los alrededores de la penitenciaría asaltada. La explicación concedida por el gobierno a los periodistas, describió “el desenfreno de criminales fuertemente armados, que quieren a toda costa liberar a personas detenidas, sobre todo por secuestro, asesinato y otros delitos graves, y que no dudan en ejecutar a civiles y saquear bienes públicos y privados.”
Un dato llamativo es el de los mercenarios colombianos que dieron muerte al anterior presidente de la República, Jovenel Moïse, quienes decidieron no escapar en medio del desorden causado por los pandilleros y se mantuvieron juntos, hasta que se restableció la calma. Uno de ellos relató a la prensa: “No me volé (huyó), porque no debo nada. Estoy viviendo un karma, solamente Dios sabe lo que estoy viviendo y lo que me ha tocado vivir. No me volé –repitió-, porque no debo nada y aquí estoy dando la cara porque soy inocente, soy inocente ante el mundo. Así que no debo nada. Estoy acá en esta prisión, en este momento la prensa puede dar cuenta de cómo es este lugar. Soy inocente, yo a este lugar, Haití, vine con una propuesta de trabajo.” Así dijo Francisco Eladio Uribe, ex soldado de Colombia, supuestamente implicado en el magnicidio contra el ex gobernante haitiano.
Por su parte, el gobierno colombiano pidió al de Haití, protección especial para esos 17 ciudadanos suyos y solicitó también que los prisioneros sean trasladados a otro penal, si lo hubiere, donde se les pueda ofrecer mayor seguridad. Mientras tanto, en las calles y avenidas de las principales ciudades haitianas, en especial la Capital, la violencia se desató y adquirió dimensiones nunca antes vistas. Incluso, uno de los líderes de las pandillas dijo que el objetivo que se han planteado es derrocar al actual primer ministro, Ariel Henry. Así según declaraciones suyas al diario local, Le Nouvelliste. Además del ataque a la prisión, los pandilleros han centrado sus ataques a lugares estratégicos como el aeropuerto internacional y edificios que pertenecen al gobierno. Una crónica aparecida en un diario español, relata así el clima subversivo que se vive en Haití en estos momentos: “Desde que comenzaron los disturbios (…), al menos cuatro policías han muerto y decenas de personas han resultado heridas en un país sumido en una grave crisis política, de seguridad y humanitaria. Desde el primer día de la crisis, se registra una violencia sin precedentes en Haití, marcada por el aumento de enfrentamientos entre la policía y las pandillas armadas, la intensificación de los tiroteos en los barrios y el incremento de muertos y heridos.”
De toda esta barbarie que parecía no tener “pies ni cabeza”, esto es… un propósito, un objetivo claramente definido, ni un quién tampoco, que fuera “la persona pensante” que actuara en calidad de líder de las bandas delincuenciales, surgió de pronto la figura de Jimmy Cherizier “barbecue”, quien lidera a la coalición de pandillas, cuyo nombre es “Vivir Juntos.” Se trata, según fuentes policiales, de un individuo que ha obtenido gran poder sobre los pandilleros, fue policía en un pasado no muy lejano y él mismo ha pedido a los padres de familia no enviar a sus niños a las escuelas, para evitar ser masacrados en las calles. “¡No los envíen, para evitar daños colaterales!” Manifestó a los padres este nuevo cabecilla de los delincuentes. Por otra parte, “barbecue” insistió en que su propósito es derrocar al actual primer ministro, Ariel Henry, y no descansará hasta alcanzar la concreción de su plan. Actualmente, Henry se encuentra en Kenia, África, solicitando ayuda al gobierno de esa nación para atenuar la honda crisis que consume a Haití. Y, precisamente cuando su avión se elevó con destino a Nairobi, Kenia, la violencia se desató sin control alguno en Puerto Príncipe y otras poblaciones. “La batalla durará tanto como sea necesario –dijo ‘barbecue’-. Seguiremos luchando contra Ariel Henry.”
Una vez en la nación africana, Henry firmó un acuerdo para enviar policías kenianos a la isla, en el marco de una misión internacional apoyada por las Naciones Unidas, para luchar contra la violencia de las bandas criminales. En concreto, el gobierno de Kenia liderará el despliegue de fuerzas que intentarán recuperar el control de la Capital haitiana; serán 1,000 policías quienes estarán al frente de la misión multinacional, que tendrá como único objetivo pacificar a Haití, su pueblo y capturar a los líderes pandilleros. El presidente de Kenia, William Ruto, dio a conocer el acuerdo con su contraparte haitiana, Ariel Henry: “Hoy (…) me complace informar que el primer ministro haitiano y yo, hemos sido testigos de la firma de este instrumento (el envío de efectivos policiales). También hemos discutido los próximos pasos para permitir la aceleración del despliegue, (porque) la paz en Haití es buena para el mundo en su conjunto. Aprovecho esta oportunidad para reiterar el compromiso de Kenia de contribuir al éxito de esta misión multinacional.” Afirmó.
Con la rúbrica del documento que contiene el acuerdo bilateral haitiano/keniano, se cumple con el mandato del Consejo de Seguridad de la ONU, emitido en octubre del 2023, para enviar una misión de apoyo a la Policía Nacional de Haití, cuando los pandilleros controlan al 80 por ciento del país, en especial la Capital. Serán unos 2,600 efectivos policiales, los que viajarán al país caribeño y estarán compuestos por agentes del orden de Benín, Jamaica, Bahamas y Antigua y Bermuda. El financiamiento correrá a cargo de los Estados Unidos, Canadá y Francia y hasta el momento no ha sido efectivo en modo alguno, por la indolencia de esos tres gobiernos, a pesar que también fue un mandato de la ONU.
Para finalizar, una descripción de lo que es esta nación caribeña, comparte la isla de La Española con la República Dominicana, tiene un tercio de ese territorio, una población de 11,724,764 habitantes; sus jóvenes tienen una edad promedia de 24,3 años y una esperanza de vida de 64,8 años. Es la nación más pobre de América, y según un informe del Banco Mundial del 2023, el 63 por ciento de los haitianos viviría con US$3,65 diarios; y al menos unos 5,2 millones de personas necesitan ahora mismo asistencia alimentaria y de vivienda, una cifra que aumentó un 20 por ciento desde el 2022. Cerca de la mitad de los haitianos mayores de 15 años, son analfabetos y solo el 50 por ciento de los niños habían completado la escuela primaria en el 2020, según datos Human Rights Watch. Haití fue la primera colonia en independizarse en América, en 1804, y, por aquel entonces, a cambio de la libertad de esta nación, el gobierno de Francia le impuso un arancel del 50 por ciento de reducción a las importaciones francesas y una indemnización de 150 millones de francos (unos US$1,000 millones de hoy en día), a cambio del reconocimiento diplomático de la nueva nación.
Un dato increíble de asimilar en estos momentos, argumenta que una vez Haití fue una nación próspera, de las mejores en ese sentido de todo el continente americano; pero el mal manejo de sus finanzas y el saqueo constante de sus arcas públicas, por parte de sus distintos dictadores, postraron al país y lo condujeron a la situación imperante en la actualidad, entre otros aberrantes motivos.