DRAMA HUMANO II


Ucrania Piensa y Habla de Derrota. Se Siente Abandonada por los Estados Unidos

 

KIEV-Ciertamente el genocidio que está llevando a efecto Israel en la Franja de Gaza, ha quitado protagonismo a la invasión rusa a Ucrania; incluso, en el Congreso de los Estados Unidos, dominado ampliamente por congresistas de raza judía, le han restado importancia a la aprobación de ayuda económica y militar a los ucranianos y se han concentrado en la defensa de su propio país… Israel.

            Muchos analistas de la situación bélica por la que atraviesa Ucrania, recuerdan el abandono que las tropas estadounidenses hicieron a Afganistán, donde, tras la firma de Donald Trump con los talibanes y en aras de que “los soldados regresaran a casa,” dejó desprotegido al montañoso país centroasiático que ahora está en manos de los incivilizados y fanáticos talibanes, con todos los agravantes que ello ha conllevado. Parece que, a través de la historia, los estadounidenses no han sido muy fiables en su amistad con aquellos pueblos a los que ha prometido su ayuda.

            Al no llegar la ayuda al frente ucraniano, un oficial de artillería ha dicho que el momento por el que pasan, es dramático, y sin suministros de munición de parte de los Estados Unidos, el frente se desmoronaría. Pero la culpa esencial y principal reside en el Congreso norteamericano, tal y como hemos explicado en las líneas arriba escritas: a la enorme cantidad de congresistas judíos solo le interesa ayudar a Israel en una guerra que no lo es y más bien es una masacre, “un holocausto” a plena luz del día, ante los millones de ojos de la humanidad, que contempla como los hebreos masacran al pueblo palestino en ataques que solo desean la desaparición física de estas personas no judías.

 

Solo quedaría la retirada…

 

            Así lo ha manifestado el mismo oficial de artillería, quien declinó dar su nombre por razones obvias de seguridad. “Sin munición de artillería, todos los frentes están condenados. La situación en el frente es sombría a la vista de la falta de munición de las fuerzas armadas ucranianas. Las pérdidas aumentarían porque no es posible responder adecuadamente. Los atacantes rusos, en cambio, pueden disparar desde todos los cañones. Los cazas rusos bombardear las posiciones ucranianas con bombas planeadoras, disparadas desde una distancia segura más atrás de la línea del frente, fuera del alcance de las defensas aéreas ucranianas, que de todos modos son igualmente escasas. En algún momento, nos encontraremos en una situación en la que nadie podrá defender el frente: todos estarán muertos o heridos. El resultado sería la pérdida de posiciones y el desmoronamiento del frente.” Recalca el soldado.

            Esas mismas palabras son ratificadas por un reciente análisis hecho por el Instituto para el Estudio de la Guerra (ISW), con sede en los Estados Unidos, en el que se afirma que “los rusos están avanzando lenta pero constantemente en varias secciones del frente.” Asegura textualmente el documento.

            Y es del todo cierto que hoy mismo se está viviendo el peor peligro desde el 2022, pues no existe un suministro sustancial de armas y municiones por parte de los Estados occidentales, que han sido el apoyo de las milicias ucranianas desde el inicio de la invasión rusa. En otras palabras, “el fantasma de la derrota” circunda en el frente defendido por los ucranianos, quienes han bajado la moral ante el embate poderoso del ejército ruso enemigo. Es por esa razón que, tanto el director de la CIA, Bill Burns, como el comandante de las fuerzas armadas estadounidenses emplazadas en Europa, Christopher Cavoli, acentuaron al decir que “existe un riesgo muy real de que los ucranianos pierdan en el campo de batalla a finales del 2024 o, al menos, de que Putin llegue a una posición en la que pueda dictar los términos de un acuerdo político.” Así según un discurso pronunciado por Burns en Washington, para hacer consciencia en quienes tienen en sus manos la ayuda a Ucrania.

            Cavoli indicó que el panorama es sombrío para los ucranianos en el frente, “aunque no puedo predecir el futuro, puedo hacer simples cálculos matemáticos. En mi experiencia de más de 37 años en el ejército estadounidense, si un bando puede disparar y el otro no puede devolver los disparos, el bando que no puede devolver los disparos… pierde.”

            Desgraciadamente, dentro de los Estados Unidos, los ucranianos tienen enemigos declarados en el Partido Republicano, el mismo de Trump, quien ha dicho claramente que si él gana las elecciones en noviembre próximo, acabará con la ayuda a Ucrania; y los republicanos es lo que han estado haciendo precisamente en estos meses. De tal modo, el paquete de ayuda a Ucrania, estuvo bloqueado durante meses en el Congreso, de parte de los republicanos, y que contemplaba una ayuda financiera por US$61,000 millones. Aparte de esa cantidad, US$51,700 millones estaban destinados al suministro de municiones y armas. No obstante lo anterior, la Cámara de Representantes finalmente desbloqueó la ayuda a Ucrania, pero el paquete de ayuda a Kiev debe pasar todavía por el Senado, un periplo sumamente engorroso, cuando los rusos, en Moscú, se ahorran esa clase de demoras, atascos y oposición política. En otras palabras, los republicanos juegan con las vidas y la libertad de todo un pueblo y nación en Europa, simplemente para hacerle el re-juego a su líder, el corrupto Donald Trump, enzarzado en varios procesos judiciales como nunca antes lo estuvo un ex mandatario de esta potencia. Entonces, el quid del asunto ahora es observar si los suministros llegarán a tiempo a las tropas ucranianas.

            Para el especialista alemán en seguridad y experto en Ucrania, Nico Lange, “Ucrania no puede defender la línea del frente en el Este, solo puede retrasar el avance ruso, especialmente con el uso de drones equipados con explosivos, pero los drones no sustituyen a la artillería. Lo decisivo es que el ejército ucraniano reciba ahora, lo antes posible, suministros de munición.” Afirmó en una entrevista reciente concedida a la televisión alemana.

 

Quiénes son los proveedores de ayuda militar a Ucrania

 

            Son diez gobiernos que tomaron la firme decisión de frenar al ejército invasor ruso, desde que se introdujo en territorio ucraniano y han estado cediendo esa ayuda de manera indefectible y siempre puntual; aunque, la mayor parte de los pertrechos llegan desde los Estados Unidos, cuyo gobierno está fallando en estos instantes en la entrega de insumos militares, según hemos reseñado en las líneas de arriba.

            Esos diez países, amigos de Ucrania y enemigos declarados de Rusia, están aportando miles de millones en armas y municiones; aun así, hace falta mayor ayuda que el Congreso estadounidense ha demorado irresponsable y criminalmente. Ahora mismo, los combates más cruentos se están librando en los frentes Este y sur, cuando los soldados ucranianos siguen bajo el fuego de los rusos, quienes los atacan con artillería y la fuerza aérea a todas horas prácticamente.

            Pero hay un hecho real y clarísimo: Ucrania, por sí sola, no podría arreglárselas en esta guerra que hasta el momento ha sostenido valientemente y ha infringido fuertes y significativas pérdidas a los rusos en armamento y vidas humanas. Es por esa dependencia desesperada, que los ucranianos hacen llamados constantes a sus aliados para que les proporcionen más municiones y sistemas de defensa aérea.

            De acuerdo a un estudio recientemente elaborado por el Instituto Kiel para la Economía Mundial (IFW), los siguientes países son los que aportan más ayuda a Ucrania, en los campos financiero, humanitario y militar, que incluye armas, municiones y equipos que se han asignado y prometido a los ucranianos. De acuerdo a este documento emitido, los Estados Unidos han proporcionado la mayor asistencia militar a Ucrania y la administración actual del presidente Joe Biden, ha comprometido el equivalente a más de US$44,700 millones en ayuda militar. Pero el mayor obstáculo y enemigo de la política/Biden hacia Ucrania, lo representa el Partido Republicano, que bloquea una y otra vez la aprobación de esos paquetes de asistencia. Detalle que hemos desglosado al inicio de este reportaje.

            En segundo lugar aparece Alemania, que ha dado €17,700 millones hasta la fecha y el gobierno en Berlín ha prometido entregar a los ucranianos un tercer sistema de misiles Patriot, para fortalecer la defensa aérea del país. En tercer lugar, aparece el Reino Unido, con una ayuda militar adicional equivalente a €2,900 millones. Así, Londres se ha comprometido con Kiev en la asignación de €9,100 millones y ya ha aportado concretamente, €4,800 millones a la causa contra el invasor ruso.

            Dinamarca aparece en el cuarto lugar de los donantes y se ha comprometido al aporte de €8,400 millones a los ucranianos, en ayuda militar. De esa cantidad, los daneses ya han dado al menos €4,500 millones. La Unión Europea (UE), aparece en el quinto renglón de esta lista, y usa un instrumento propio de financiamiento extrapresupuestario para proporcionar ayuda militar a Ucrania y se trata del Fondo Europeo para la Paz (EFF). La UE ha prometido armas, municiones y equipos por un valor de €5,600 millones, más otros €5,000 millones que fueron acordados para entregar a Kiev en estos meses.

            Los Países Bajos han prometido ayuda militar a Ucrania por €4,440 millones. Luego aparece Noruega, cuyo gobierno ha prometido al país atacado una cantidad considerable en relación con su Producto Interno Bruto (PIB). Brinda ayuda militar y humanitaria al país invadido y le ha prometido un total de €3,800 millones, de los cuales €1,000 millones ya han sido asignados.

            Polonia no podía faltar a esta cita, principalmente porque comparte fronteras con los dos países en conflicto, con Rusia y Ucrania y es un aliado firme y cercano al gobierno de Kiev. Además, Polonia se ha convertido desde el inicio de las hostilidades, en un importante centro logístico, del cual parten las transferencias hacia Ucrania, de ayuda militar occidental; es decir, “desde algún lugar en el territorio polaco” parten los blindados, misiles y demás pertrechos, para abastecer al ejército ucraniano, algo que incomoda sobremanera a los rusos, quienes ya han amenazado con invadir Polonia en varias oportunidades. El gobierno de Varsovia ha prometido a Kiev, una ayuda en el aspecto militar, por €3,000 millones.

            Finalmente, cierran la lista Canadá y Suecia, el recién ingresado a la OTAN. En el caso de los canadienses, tienen un acuerdo de seguridad con Ucrania y se ha comprometido en proporcionarle al país europeo, más de €2,000 millones en ayuda militar a finales del presente 2024. Ese acuerdo fue firmado entre los dos gobiernos, al cumplirse los dos años de la invasión rusa a Ucrania. En lo que concierne a Suecia, prometió más de €2,000 millones en ayuda militar, aunque al principio solo contemplaba equipos de protección; pero luego cambió la estrategia y ha estado enviando a Ucrania tanques y modernos sistemas de armas.

            No obstante lo anterior, reiteramos que lo más importante es la ayuda de los Estados Unidos y que llegue puntual al frente de batalla. Ello, más que otro motivo, ha infringido grandes derrotas a los rusos a lo largo de todo este tiempo y seguirá haciéndolo, pues la capacidad, entrega y valentía del soldado ucraniano, han quedado demostradas en esta guerra, sin dilación ni defecto alguno. En otras palabras, una derrota de Ucrania podría significar un mayor peligro para el resto de Europa, pues Vladímir Putin se sentiría fortalecido e imparable en sus ansias de dominio extraterritorial. “Una derrota en Ucrania, significaría una derrota para Europa”, dijo textualmente Jens Stoltenberg, el Secretario General de la OTAN, en uno de sus tantos discursos. Y eso no lo quiere nadie en el mundo libre, democrático y civilizado.


Netanyahu Imparable en su Masacre en la Franja de Gaza. Delira en su Criminalidad contra

Civiles y Cooperantes de las ONGs

 

GAZA, Palestina-El dictador no declarado de Israel, Benjamín Netanyahu parece “un poseído” por una fuerza demoníaca que lo empuja, peor que nunca, a asesinar a quienes a él le parezca dentro de la Franja de Gaza: acaba de acabar con las vidas de siete cooperantes de la ONG, World Central Kitchen (WCK), del chef hispano-estadounidense José Andrés, que entregaba alimentos a los damnificados palestinos por causa de los ataques israelíes a este territorio.

            Es evidente que el líder de los judíos, Netanyahu, ya perdió toda vergüenza, todo pudor y le importa un comino la imagen de su país, Israel, cuyo pueblo ha pasado de ser “el eterno perseguido por reyes españoles, nazis y comunistas”, para revelar su verdadero semblante de un ejército israelí sediento de venganza contra toda la humanidad y desprovisto de todo respeto por las vidas ajenas. De ahí las matanzas que está consumando en Gaza, donde asesina a mujeres, ancianos, niños, periodistas internacionales y ahora funcionarios de las ONGs que quieren paliar un poco la desesperación de la población tacada por las bombas y misiles lanzados por los judíos.

 

Con su característica sonrisa sin alma, Netanyahu contesta, pero no convence

 

            Detrás de su mirada se puede observar que esconde los peores pensamientos y sentimientos en contra de sus enemigos y acompaña a esa mirada con una sonrisa complacida, más todavía cuando han caído miles de palestinos, producto de los ataques del ejército que el comanda, el de Israel, y que ataca de manera inmisericorde a la Franja de Gaza. Tampoco le importan los rehenes que todavía están en manos de la facción Hamás, porque no se refiere a ellos siquiera en forma indirecta, no dice absolutamente nada de liberarlos o canjearlos, porque está concentrado, “hipnotizado”, en asesinar todos los días a la población indefensa.

            En cuanto a los siete cooperantes de la ONG WCK, el judío aceptó que fueron dados de baja debido al bombardeo provenido de armas israelíes, pero dijo, fríamente como es su costumbre, que “no fue intencional.” “Lastimosamente –argumentó Netanyahu-, ayer se produjo un trágico incidente: nuestras fuerzas golpearon de forma no intencional a inocentes (¿?) en la Franja de Gaza. Esto sucede en una guerra (…), estamos en contacto con los gobiernos y haremos todo lo posible para que no se vuelva a repetir.” Nótese que en ningún momento pide disculpas ni se mostró conmovido, mucho menos preocupado, aún a sabiendas que los asesinados pertenecían a países amigos de Israel, en los casos de Canadá, Australia y los Estados Unidos. A él ya no le importa a quien o quienes asesina. Eso es evidente.

            Las siete víctimas viajaban a bordo de un vehículo perfectamente identificado; pero a los israelitas no les importó, porque el primer disparo contra el convoy de la ONG cuya sede está en los Estados Unidos, se produjo en la puerta de un almacén, cuando apenas estaban arrancando los motores de los automóviles y los estuvieron persiguiendo, s sabiendas que eran cooperantes humanitarios, a lo largo de dos kilómetros, hasta que acabaron con todos los ocupantes de los autos. Es por ello que toda la intencionalidad se manifestó de parte de los comandos israelíes que destrozan a diario lo poco que queda en pie en Gaza.

            Las víctimas eran originarias de Australia, Polonia, Reino Unido, Estados Unidos, Canadá y Palestina. Es por esa razón que el gobierno de Canadá exigió, casi de inmediato, al de Israel “una completa investigación del caso y que los responsables de estas muertes rindan cuentas.” Así según un comunicado emitido por el Ministerio del Exterior canadiense. Todos ellos trabajaban para la ONG World Central Kitchen (WCK), fundada por el chef español José Andrés y cuya misión es llevar alimento a las personas, alrededor del mundo, que necesiten ser auxiliadas por diferentes motivos. Los alimentos habían llegado a Gaza vía marítima, partiendo desde la isla de Chipre hasta las costas de Gaza. Incluso el ejército de Israel que domina a este territorio por completo, pues lleva a cabo una guerra “sin respuesta” o en una sola dirección, sin que reciba respuesta armada a sus ataques, sabía la clase de materiales que se desembarca en Gaza, ya que tienen la potestad de vigilar que entra allí y cuál es el destino de esas mercaderías.

            El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau visiblemente afectado, calificó el ataque de “inaceptable” y reiteró la posición de su gobierno al exigir a los judíos de Israel que investiguen a fondo este vil asesinato de los cooperantes. Por su parte, la ministra del Exterior de este mismo país, Mélanie Joly, dijo sentirse “horrorizada” por el ataque del ejército israelí y confirmó que una de las personas masacradas, es canadiense. “Condenamos estos ataques y solicitamos una completa investigación. Canadá espera que todos los responsables de estas muertes, rindan cuentas y se lo comunicaremos directamente a Israel.” Escribió en su cuenta de X.

            Al mismo tiempo, varios jefes de Estado y altos representantes gubernamentales, condenaron el hecho, el asesinato flagrante de los siete trabajadores de las ONG y exigieron a Israel que aclare las circunstancias de dicho ataque.

            En lo que atañe a WCK, esta organización anunció que, después de este mortal incidente, “interrumpe las operaciones en territorio palestino”, en parte porque las garantías de seguridad no están dadas sobre el terreno y en cualquier momento podrían caer más víctimas de los misiles enviados por el ejército judío.

            José Andrés, el chef español, fundador de esta ONG humanitaria, escribió en su cuenta de X al percatarse del vil asesinato de sus amigos y cooperantes: “El grupo perdió a varios de nuestros hermanos y hermanas en un ataque aéreo de las Fuerzas de Defensa Israelíes, en Gaza. Tengo el corazón roto y estoy de luto por las familias y amigos y toda la familia WCK. El gobierno israelí debe parar esta matanza indiscriminada. Debe dejar de restringir la ayuda humanitaria, dejar de matar civiles y trabajadores humanitarios y dejar de usar la comida como arma.” En las últimas palabras del texto, el chef español devela que una de “las tácticas” usadas por los israelíes en Gaza, es no permitir la entrega de alimentos a la población que sufre hambre y sed y que se le entregue solamente en pequeñísimas cantidades. Sin duda, una especie de arma tan terrorífica como la peor… la más mortal. Es evidente que el objetivo del ejército judío, que sigue las órdenes de Netanyahu, es acabar con toda señal de vida que no sea judía y que pertenezca a los palestinos. Se trata de una guerra de aniquilación total del enemigo, a ojos y asombro de la comunidad mundial que sigue los hechos con verdadera preocupación.

            La ONG del chef español José Andrés, participaba en el envío de ayuda humanitaria a Gaza a través de un corredor desde Chipre, en el Mediterráneo europeo; y en la construcción de un muelle temporal en esta zona palestina. Un primer barco con mercadería, descargó a mediados de marzo, 200 toneladas de víveres, siempre bajo supervisión del ejército israelí, pleno de paranoia, pues teme que lleguen armas para los palestinos en lugar de alimentos. En estos momentos, un segundo buque navega en la misma dirección con más ayuda.

Los judíos sabían que era un convoy humanitario

            … aun así dispararon hasta hacer añicos a los autos y dejar sin vida a los ocupantes internacionalistas. Y la misma organización ha asegurado que el convoy había coordinado su viaje con el ejército judío, pero, de todas maneras, decidieron darles “de baja” a los extranjeros, de la manera más criminal y vil posible, según hemos observado.

           Los autos partieron desde un almacén de Deir el Balah, en el corazón de Gaza, y llevaban en este lugar seis meses, tiempo en el que sirvieron más de 42 millones de comidas, según los datos consignados en sus bases computadorizadas. El comunicado oficial de la ONG expresa lo siguiente: “World Central Kitchen está destrozada la confirmar que siete miembros de nuestro equipo han muerto en un ataque del ejército israelí en Gaza. Los integrantes del  equipo viajaban por una zona desmilitarizada en dos coches blindados con el logo de WCK y un vehículo ligero. Pese a coordinar sus movimientos con el ejército israelí, el convoy fue alcanzado cuando salía de un almacén de Deir el Balah, donde el equipo había descargado más de 100 toneladas de comida llevada a Gaza por la ruta marítima.” Y prosigue Erin Gore, responsable de la redacción del comunicado de la ONG: “Esto no es un ataque contra WCK, es un ataque contra las organizaciones humanitarias que aparecen en las situaciones más duras en las que el alimento es usado como arma de guerra. Es imperdonable.”

            Las imágenes en video y las fotografías difundidas por la prensa internacional presente en el lugar, muestran los restos humanos de los siete cooperantes, en el Hospital de los Mártires de Al Aqsa, en Deir el Balah. El personal médico mostró los pasaportes de tres de los fallecidos y eran de Gran Bretaña, Australia y Polonia. Minutos antes, la misma ONG había publicado en la red social X que parte de las actividades que ejecutaban en Gaza, incluían una red de 60 cocinas portátiles en el sur y centro de la Franja de Gaza y gracias a ello, proporcionamos cientos de miles de comidas al día a los civiles desplazados por la ofensiva israelí.

            Mahmoud Thabet, sanitario de la Media Luna Roja Palestina, quien formaba parte del equipo que trasladó los cadáveres al hospital, rindió declaraciones a la prensa y dijo que  se necesitaron varias horas para recuperar los siete cuerpos sin vida. Fueron llevados primeramente al hospital Al Aqsa, después a otro más al sur, donde se preparó la evacuación a través del paso fronterizo con Egipto.

            La ONG ayudaba a más de un millón de personas, que es casi la mitad de la población de la Franja y que está en la fase denominada “catastrófica de inseguridad alimentaria.” De hecho, son más que aquellas personas que sufrieron la hambruna en Somalia en el 2011, con seis veces menos población que los somalíes. Los israelíes han rodeado prácticamente a los gazatíes y no han permitido que la ayuda humanitaria ingrese vía terrestre. Países europeos, entre ellos Alemania, intentaron lanzar los paquetes de alimentos desde el aire, pero los judíos también se opusieron a ese método. Es evidente que lo que pretende el gobierno del genocida Netanyahu, es el aniquilamiento total, por todos los medios posibles de la población palestina y con ella a quienes intentan ayudarla.

            Retornando a las reacciones ante este asesinato de los cooperantes, el Reino Unido convocó al embajador israelí en Londres, para exigirle explicaciones; y el ministro de Exteriores de Inglaterra, David Cameron, escribió en la red social X: “Hablé con el ministro del Exterior israelí, Israel Katz, para subrayar que las muertes eran completamente inaceptables. Israel debe explicar urgentemente cómo ocurrió esto y tomar medidas importantes para garantizar la seguridad de los trabajadores humanitarios en el terreno.”

            El gobierno de Polonia también redactó en la misma red X que “expresamos nuestro más sentido pésame a la familia del voluntario polaco que estaba prestando ayuda al pueblo palestino en la Franja de Gaza. Polonia se opone al desprecio por el derecho internacional humanitario y la protección de civiles, incluidos los trabajadores humanitarios.” Cita el texto oficial del gobierno con sede en Varsovia

             Y Anthony Albanese, primer ministro de Australia, informó que pidió cuentas a Israel por la muerte de la trabajadora humanitaria australiana y el ejecutivo de Camberra ha calificado “completamente inaceptable lo ocurrido. Es una estrategia que nunca debió ocurrir.” Enunció en la ciudad australiana de Brisbane.

            Pero la respuesta más dura la ha dado el mismo fundador de la ONG Wolrd Central Kitchen, José Andrés, quien le dijo a Netanyahu que “no fue solo un desafortunado error, sino el resultado directo de la política de su gobierno de reducir la ayuda humanitaria a niveles desesperados. Los ataques aéreos contra nuestro convoy no fueron solo un desafortunado error de la niebla de la guerra: fue un ataque directo contra vehículos claramente señalizados, cuyos movimientos eran conocidos por ustedes los israelíes, por sus Fuerzas de Defensa. Reclamo que aparezca lo mejor de Israel, pues no se puede salvar a los rehenes, bombardeando todos los edificios de Gaza. (En todo caso) es una buena noticia el anuncio del ejército de Israel y del gobierno, de poner en marcha una investigación sobre lo ocurrido, pero dicha investigación debe comenzar desde arriba, no solo desde abajo. No se puede ganar una guerra matando de hambre a toda una población. Los trabajadores de mi ONG eran lo mejor de la humanidad, quienes arriesgaron todo por la actividad humana más fundamental: compartir nuestra comida con los demás. Los israelíes, en el fondo de su corazón, saben que los alimentos no son un arma de guerra e Israel es mejor que la forma en que se libra esta guerra; mejor que bloquear el suministro de alimentos y medicinas y matar a los trabajadores humanitarios. El gobierno israelí necesita abrir rutas terrestres para alimentos y medicinas. Tiene que dejar de matar a civiles y trabajadores humanitarios. Necesita iniciar hoy el largo camino hacia la paz.” Este texto del chef español, apareció publicado en el periódico israelí “Yedioth Ahronoth.”

            Finalmente, Christopher Lockyear, secretario general de Médicos Sin Fronteras (MSF), hizo conocer su posición acerca de las masacres que lleva a cabo el ejército israelí en Gaza: “Esperamos algo más que excusas de Israel y algo más que las condenas de sus aliados. Los trabajadores humanitarios están protegidos. Sin peros. No aceptamos la narrativa de incidentes lamentables. No la aceptamos porque forma parte del mismo patrón de ataques deliberados contra sanitarios, periodistas, personal de la ONU, escuelas y hogares. Se trata de impunidad, de un desprecio total por las leyes de la guerra, y ahora debe convertirse en una rendición de cuentas. Las condenas que hemos visto por la muerte de siete cooperantes de World Central Kitchen, son correctas, pero, ¿dónde están las condenas por cada trabajador humanitario (han muerto asesinados más de 200 desde el 7-O, cinco de ellos de MSF), por cada hospital que es destruido, por cada intento de manipular los medios de comunicación? Estas muertes son una elección política por parte de Israel, que no afronta ninguna consecuencia porque sus aliados permiten esta impune brutalidad y le abastecen con más armas para matar y mutilar indiscriminadamente a civiles. Los 200 trabajadores humanitarios muertos en esta guerra, más que en cualquier otra, son solo una pequeña fracción de las más de 33,000 víctimas, muchas de ellas mujeres y niños, en un conflicto brutal, desproporcionado y sin medidas preventivas. Todos los Estados que apoyan a Israel en estas circunstancias, son cómplices morales y políticos. Hacemos un llamamiento a todos los Estados, en particular a Estados Unidos, Reino Unido y la Unión Europea (UE), para que hagan todo lo que esté en su mano para influir en Israel y que dejen de apoyar los continuos ataques contra civiles e infraestructuras civiles en Gaza.”

            Así se expresó este funcionario a su llegada desde la Franja de Gaza y ha repasado verbalmente todas las iniquidades, las desgracias que Israel ha llevado a Palestina, al consumar matanza tras matanza, sin importar el número de víctimas, su procedencia y las tareas humanitarias que estén realizando, porque la consigna de Netanyahu es… asesinar así, de cualquier manera. Para eso existe él y esa es “la misión sangrienta” de su existencia.


El Gobierno de Chile ha Reaccionado de Manera

Contundente contra el Genocidio Causado por

Israel en la Franja de Gaza

 

SANTIAGO DE CHILE-Si hay un país y un gobierno con autoridad en América –autoridad de verdad-, para alzar su voz en contra de otro Estado que es, a su vez, genocida, ese es Chile, y lo ha hecho en contra de Israel por la matanza diaria que lleva a cabo en Gaza, Palestina.

            No obstante, hay una tesitura que se debe aclarar en esta reacción del gobierno chileno: no es por el hecho de ser una administración comunista, por la que está actuando de esa manera, sino porque las matanzas en la Franja de Gaza ya han superado todas las tolerancias –si es que el genocidio se puede tolerar en alguna medida-, y ha impresionado traumáticamente a los gobernantes actuales de esta nación suramericana.

Chile y su gobierno han actuado en contra del Estado asesino de Israel, porque es un tema de lesa humanidad, y esas muertes de inocentes que son bombardeadas día y noche por los judíos, claman porque alguien o algún Estado las defienda de manera decidida. Por eso ha actuado La Moneda, el palacio de gobierno chileno, contra los viles y descarados asesinos que viven en Tel Aviv, Capital de Israel.

 

Chilenos de aquí y de allá, a favor de palestina

 

            Se reitera: no es porque el gobierno de Gabriel Boric sea de tinte marxista (incluso Karl Marx era judío, lo mismo Lenin), que ha presentado su queja formal contra el Estado hebreo, masacrante del pueblo palestino, sino porque ya basta de asesinatos a plena luz del día en Gaza, de mujeres, niños, mujeres embarazadas y ancianos, que lo único que quieren es vivir en paz y paliar el día a día con seguridad y normalidad.

            Además, es evidente que la sociedad chilena, casi al unísono, condena a los ataques repetidos del ejército judío a la Franja de Gaza: los derechistas, los católicos, los izquierdistas, los militares, los clérigos, etcétera, etcétera. Es decir, el grosor de la sociedad chilena no está de acuerdo –no puede estarlo- en que el ejército israelí esté efectuando una limpieza racial en Palestina ante las miradas asombradas por la incredulidad del mundo entero.

            Desde que comenzaron los ataques, el gobierno de Boric llamó a consultas a su embajador en Tel Aviv y esa fue la primera reacción de Chile ante lo que estaba sucediendo en Oriente Próximo; después, su embajadora ante las Naciones Unidas, Paula Narváez, y ante el pleno de la Asamblea General, dijo lo siguiente y con toda claridad para que lo entendiera el asesino Benjamín Netanyahu, en Israel: “Chile no permanecerá indiferente frente a la actual situación y al dolor del pueblo palestino.” De inmediato, y en el punto clave y central de su discurso, la representante diplomática de Chile, pidió a la Corte Internacional de La Haya (CPI), en los Países Bajos, que investigue los eventuales (y cotidianos), crímenes por parte de Israel; y ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), aseveró que Israel estaba violando al derecho internacional.

            Pero Gabriel Boric no se quedó allí, sino que tomó una medida que sí dolió fuertemente a los judíos en Israel y en otras latitudes del mundo (recordemos que nacen y crecen donde ellos quieren, pero sus almas y corazones están en Israel, su verdadera patria): excluyó a Israel de la Feria Internacional del Aire (FIDAE), que es un importante encuentro de negocios del área militar, que siempre se celebra en abril, en Santiago, Capital chilena. Hace pocos años atrás, incluso, el ex presidente Sebastián Piñera, muerto en un accidente aéreo recientemente, excluyó a la Rusia de Putin de la misma feria, debido a su flagrante y criminal ataque a Ucrania. En los dos casos, el ucraniano y el israelí, según se desprende evidentemente, la reacción de los chilenos ha sido por la violación al derecho internacional cometido por los dos gobiernos y en la actualidad por el judío.

            La respuesta llegó casi de inmediato de parte del embajador de Israel en Santiago, en reclamo por las decisiones del gobierno de Chile y según sucede siempre en los casos donde hay judíos involucrados, estos apelan a lo que ellos llaman “holocausto nazi”, a las persecuciones históricas que han sufrido y quieren que la humanidad se compadezca de ellos en un libreto, “un papel teatral” que utilizan demagógicamente cada vez que se les viene en gana, para despertar lástima, conmiseración y desviar la atención de los crímenes que ellos cometen ahora mismo.

            Sin embargo, a pesar del roce fortísimo entre ambas cancillerías, el ministro del Exterior chileno, Alberto van Klaveren, mencionó que la ruptura de relaciones entre ambos países, estaba descartada de plano: “No se ha contemplado romper relaciones diplomáticas.” Aseguró de manera textual.

            También, según era de esperar, la presidenta de la comunidad judía de Chile, Ariela Agosin, terció en la problemática al señalar que “Boric toma decisiones ideologizadas –haciendo creer que ha sido la determinación de un comunista y su gobierno, en contra de una nación capitalista, que es Israel-. No todos en el gobierno ni en el aparato Estatal piensan y habrían actuado como él. Como jefe de Estado, tiene derecho a tomar estas decisiones, pero deberían ser consultadas con el Consejo de Relaciones Exteriores y las comisiones de defensa en el Congreso, porque afectan a todo el país. Aleja a empresas clave para la defensa nacional y deja a Chile en una situación vulnerable. Y como comunidad judía, nos sentimos en mayor peligro ante algún tipo de atentado.” Nótese que la judía obvia o deja de lado el quid del asunto, esto es, la masacre que está cometiendo el ejército judío en Palestina de ciudadanos comunes, quienes son bombardeados un día y otro también; toca así mismo el tema económico que en los judíos tiene una trascendencia única, prioritaria, por encima de la familia, la religión y otros aspectos de carácter humanitario; y finalmente, utiliza la conmiseración, ese sentirse perseguidos por el resto de los seres humanos, cuando dijo que el gobierno chileno los deja desprotegidos, cuando tienen a un ejército, el israelí, que es uno de los mejores armados y entrenados a nivel mundial. Es cuando se retuerce en su falta de argumentación y regresa al consabido y desgastado tema del “holocausto nazi” y dice Agosin en nombre de la comunidad hebrea de Chile: “(…) esto no tendría que tener que ver con el color político (insiste con el comunismo de Boric), es mucho más complejo que eso. Dentro de la comunidad judía también hay posturas políticas y opiniones diversas, pero hay consenso en que lo que pasó es la tragedia más grande que le ha ocurrido al pueblo judío desde el holocausto (sigue con su necedad con la finalidad de crear lástima en la opinión pública), y no puede volver a pasar. Si las medidas que se han tomado son las correctas (masacrar a los palestinos), en eso puede haber divergencia.” Por supuesto que hay divergencia cuando el ejército israelí (judío) está ejerciendo una matanza indiscriminada en la Franja de Gaza, con el único objetivo de aniquilar a los palestinos que allí viven (y mueren hoy en día). No se puede aceptar, bajo ninguna premisa o concepto, tal matanza.

            En respuesta, el senador Francisco Chahuán, del derechista Partido Renovación Nacional, opositor al gobierno, “no hay que romper las relaciones diplomáticas, pero sí corresponde que Chile, como ha sido históricamente su posición, pida que no se vulneren las normas del derecho internacional humanitario. El Estado (chileno), ha mantenido una línea consistente en su política exterior y fue Piñera (qepd), quien reconoció al Estado palestino. Chile ha apoyado todas las resoluciones de la ONU que condenan la ocupación ilegal en territorio palestino e instan a las partes a la solución de dos Estados y a generar una paz justa y duradera.”

            Para el abogado Nelson Haddad, también chileno, y ex embajador en Jordania, Egipto e Irak, “se trata de una posición (del gobierno de Boric), de principios, una política de Estado que no cambia según el gobierno de turno. Aquí se defienden los derechos humanos y la adhesión al derecho internacional humanitario.” Acotó.

 

“Quien no está a favor de los judíos… está en contra de ellos” 

 

            Ese es el pensamiento y sentimiento del conglomerado judío allí donde viva y forme sus típicos grupúsculos o “comunidades”, según se define a sí mismo: “o están con nosotros o están en contra de nosotros.” No existe una posición intermedia, según lo creen, porque en su concepción de la historia y de la realidad propia, la humanidad les debe las vidas que han perdido en el pasado y utilizan ese argumento para manipular, manipular y manipular, al mismo tiempo que crean lástima y hacen que se compadezcan del sufrimiento de los judíos, una raza considerada una de las más acaudaladas del planeta, donde cuesta hallar a un judío que no sea millonario o medianamente rico, en su defecto.

            En retorno a la presidenta de la comunidad judía de Chile, Ariela Agosin, agregó: “rechazamos cuando se dice que la acción de Israel (en Gaza), constituya genocidio y se debe analizar cada caso para establecer si se configuran crímenes de guerra. El presidente (Boric) hablaba de genocidio mucho antes del 7 de octubre (cuando Hamás raptó a judíos y los hizo sus rehenes). Usan la palabra con una liviandad absoluta. Jurídicamente tiene una carga muy importante, pero se ha banalizado. Israel ha seguido las normas del derecho internacional humanitario.” Ha concluido con absoluto cinismo y lo peor… burlándose de la inteligencia global de quienes observamos día tras día cuando el ejército judío o israelí asesina a más de 500 palestinos inocentes, con sus misiles y armas portátiles en Gaza. Allí no han banalización, no hay “liviandad” en el término como señala esta hebrea que vive en Chile usurpando las riquezas de la sociedad chilena.

            En todo caso y en vista de lo anterior, un grupo conformado por 620 abogados chilenos presentó una denuncia ante la Corte Penal Internacional (CPI), contra el dictador no declarado de Israel y ejecutor de esta masacre en Gaza, Benjamín Netanyahu, quien ya tenía otra acusación presentada por el gobierno de Suráfrica, un país, un pueblo, hipersensibles ante las muestras de apartheid, asesinatos y depuración de las razas.

La querella presentada por los litigantes chilenos, alcanza también al ministro judío de defensa y a jefes militares israelíes, por delitos contra la humanidad, genocidio y crímenes de guerra cometidos en Gaza, Cisjordania y Jerusalén Oriental.

            La delegación de estos letrados fue recibida en La Haya, sede de la Corte, el pasado 11 de marzo del presente año y este fue el razonamiento que ellos mismos dieron a la prensa: “Chile condenó el 7 de octubre e hizo esfuerzos para la liberación de rehenes (tomados por Hamás); pero lo que ha ocurrido a partir de esa fecha, es un castigo colectivo contra la población civil de Gaza. Chile no puede permanecer indiferente. Eso es ser cómplice de genocidio. Hemos acreditado con testimonios, fotografías y fuentes directas de testigos presenciales el genocidio que se está cometiendo.” Apuntó el vocero del grupo de abogados.

            La reacción nuevamente por parte de Ariela Agosin, muy despierta y siempre dispuesta a defender a su raza hebrea, se dio a conocer de inmediato cuando supo de la querella planteada por los jurisconsultos chilenos en los Países Bajos: “Hay una diferencia muy grande entre cómo toma ciertas crisis en el mundo. Hay una visión ideologizada (por ser un gobierno comunista el de Boric, a eso se refiere), no es solo una cuestión de principios (descarta que los chilenos tengan principios, porque sancionan moralmente las matanzas del ejército de Israel). Hay antisemitismo y prejuicios horribles (regresa al viejo discurso del anti-judaísmo para hacerse ver “perseguida” y quemada en los hornos nazis, para manipular a la opinión con el desgastado “holocausto”). Una cosa es criticar al gobierno de Israel de turno y sus decisiones –continúa-, y otra es cuando se cruza el antisemitismo, que es en contra de los israelíes y judíos en general. Condenar no sirve para nada, los países tienen que instar a que esta situación termine (…). Hay que dejar de lado los colores políticos y los prejuicios.” Concluye la presidenta de los judíos en Chile.

 Es decir, lo que ella pretende y se puede observar entre las líneas de sus palabras, es que los chilenos, su gobierno, embajadores, canciller y abogados, acepten lo que hace Netanyahu, que se acepte tácitamente que los palestinos no deben, no pueden, vivir y deben ser exterminados a sangre y fuego, cuando a los judíos así les parezca, con total impunidad, que la humanidad vuelva el rostro al lado contrario y que todo se olvide y no se comente más en el futuro inmediato y posterior. Porque, entre otras razones, “el pueblo elegido tiene el derecho (dado no sabemos por qué o por quién), de asesinar al que le parezca y en el momento que le parezca” sin que el resto de los hombres “chiste” o deje escapar un gemido de desaprobación siquiera. Eso es lo que se puede leer entre las líneas de sus palabras. Y sin hacemos lo contrario, como los abogados chilenos en La Haya, “todos somos antisemitas, nazis, hijos de Hitler y odiamos a los judíos, que están en este mundo solo para ser admirados, tolerados, bendecidos y aceptados con sus millones de defectos y equívocos.” Según su percepción de la realidad actual y pasada.

            Para el abogado Nelson Haddad, “en lo personal, no veo antisemitismo en el presidente (de la República) o el gobierno, pero el sector de izquierda que representa tiene una sensibilidad especial respecto del conflicto y efectivamente, es muy crítico de Israel. Aquí no hay ningún tipo de animadversión (…). (Lo que pasa es que) quien cuestiona la acción de Israel, rápidamente es rotulado como antisemita, es una particularidad de una estrategia comunicacional.” Y ese es el término exacto: “estrategia” de los judíos desde el arribo de Hitler al poder en Alemania en 1933: repetimos… hacerse ver los perseguidos de siempre, los pobrecitos, los masacrados, los gaseados en cámaras y ahora los odiados debido al profundo antisemitismo existente.

Es una estrategia que les funciona a los judíos igual a un tridente: por un lado genero culpabilidad en la humanidad que supuestamente los odia; por el otro, continúo enriqueciéndome con mis empresas y negocios (muchos de ellos espurios como el tráfico de órganos humanos que compran los médicos judíos en Israel); y en una tercera acción, se apoderan callada y gradualmente, gracias a la compra de puestos gubernamentales, del país donde viven, porque el objetivo de los hebreos es dominar todo lo que esté a su alcance, desde las mentes, almas, pueblos, gobiernos, economías y luego defenestrar a quien se les oponga o les sea antipático.

            Netanyahu y su partida de asesinos armados, están aniquilando al pueblo palestino y punto. Eso es lo que sucede en Gaza. No se puede llamar de otra manera y a ese asesino hay que capturarlo, procesarlo y ahorcarlo. Las palabras sobran en tal caso y los chilenos han hecho lo pertinente, lo que el mundo entero debería hacer con los judíos genocidas.


Haití se Desangra. A Veces con Lentitud, a Veces con Pausa y a Veces con Rauda, Vertiginosa

y Cruel Criminalidad

 

PUERTO PRÍNCIPE-Nos acordamos de aquel viejo dicho popular que menciona: “todos saben dónde está, saben lo que ahí ocurre, pero nadie quiere ir a verlo.” Eso pasa exactamente con este pequeño país caribeño, incrustado en la parte occidental de la isla La Española, que comparte con la República Dominicana.

            Es del todo cierto que, alrededor del mundo, la mala fama acuñada por los haitianos, es del conocimiento pleno de millones de personas, pero nadie y tampoco ninguna organización con poder real, como las Naciones Unidas o la ineficaz OEA, han hecho algo realmente importante por Haití, por sacarlo de su estado sedente de miseria, conflictos sangrientos dentro de su población (aplastantemente negra), dictadores y presidentes convincentemente corruptos, ni apartarlo de esa deshonrosa posición de ser el país más pobre del hemisferio Occidental. Nadie, aparte de observar con morboso detenimiento lo que ocurre dentro de sus fronteras, ha tratado de dar tan solo una ligera solución que vierta una luz o ayude a paliar el acabose que consume y atemoriza a su empobrecido pueblo día tras día. La indiferencia ha sido “la moneda de cambio” con la cual la comunidad internacional mira a Haití y se “cruza de brazos” tranquilamente, mientras la pequeña nación se desangra brutalmente dentro de su ingobernabilidad y posibilidad de que caiga en manos de pandilleros asesinos y anarquistas comunes, que son parte de los causantes de este doloroso pasaje por el que atraviesa el país y su población.

 

Llamado y clamor del presidente Luis Abinader

 

            Evidentemente preocupado… ¡Por qué no habría de estarlo! El mandatario de la República Dominicana, único territorio nacional que comparte fronteras con los haitianos, ha lanzado un grito de auxilio para que concurran a ayudar y acabar con la sangría que se vive en Puerto Príncipe y demás ciudades haitianas. “¡Por favor, evitemos que termine arrasado por el caos y la anarquía!” Ha dejado leer y escuchar Abinader, fuertemente impresionado por las matanzas que se suceden en las calles de las principales urbes de Haití, urbes que, dicho sea de paso, son un cúmulo de escombros y miserias, por todo lo que ha sucedido aquí.

            Su clamor lo dijo en dirección a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con estos términos: “¡O luchamos juntos por salvar a Haití o lucharemos solos para proteger a República Dominicana!” En clara demostración de que su propio país sufre, indirectamente, los embates de la violencia que ocurre al otro lado de la línea fronteriza. También, empujado por la inmigración, en huida, de miles de haitianos, quienes buscan seguridad, alimento, un lugar dónde vivir y medicina en suelo dominicano. Lo cual no deja de ser una carga social y económica para su gobierno. “Evitemos que Haití termine arrasado por el caos y la anarquía, no permitamos que la crisis que allí se vive, se expanda por toda la región.” Agregó.

            Lógicamente, Luis Abinader se muestra preocupado y fuertemente impresionado por los enfrentamientos reiterados que se dan en Puerto Príncipe entre las bandas del crimen organizado, que siembran el terror y dejan tendidos decenas de cuerpos inertes de personas inocentes, cuyo único “delito” ha sido el de estar en el sitio equivocado donde se dieron las masacres. Por ejemplo, hace pocas fechas, centenares de habitantes de la zona norte de la Capital, abandonaron sus casas ante los ataques violentos por las disputas de territorios, que es una guerra interna que desangra a la postrada nación caribeña. Al margen, el gobierno provisional y las fuerzas del orden, solo miran con total impotencia, porque no pueden hacer nada para detener la enorme sangría generalizada que se está dando a diario.

             Por su parte, la ONU, mostrando su desidia, su “letargo”, su “modorra” y su indolencia en este y en otros casos, como la matanza en la Franja de Gaza que llevan a cabo los israelíes, en una depuración racial a “plena luz del día” y ante los ojos del mundo entero, lo único que hace es elaborar estadísticas y darlas a conocer en sus sesiones plenarias; es así como ha informado que más de 800 personas murieron el pasado enero, debido al enfrentamiento entre las bandas de criminales callejeros; y Antonio Guterres ha hecho énfasis en algo que ya todos sabíamos: “Haití está entre las naciones que más sufren hambre, lo que refuerza el caos y la violencia. Un vientre vacío es combustible para la agitación.” Recalcitró el Secretario General de la ONU. Sin embargo, su argumentación sonó a algo así como “descubrir el agua tibia”; es decir, solo reafirmó lo que ya se sabe hasta la saciedad con respecto a esta nación de las Antillas Mayores.

            Regresando al presidente dominicano, Abinader, no solo se dirigió a la ONU y OEA, sino que su petitoria de ayuda la extendió a la comunidad mundial y se despliegue una fuerza internacional para enfrentar y detener el caos generado por años de crisis política y social. Estas fueron sus declaraciones a la prensa: “Desde septiembre del 2021, nuestro gobierno viene denunciando, ante diversos órganos de la ONU, el continuo deterioro de las condiciones sociales en Haití. Lamentablemente, la grave situación que vive el país vecino, no ha sido atendida con la urgencia y la contundencia que merece. El resultado es que hoy Haití, con gran parte de su territorio controlado por bandas criminales, está al borde de una guerra civil. Se acabó el tiempo de las promesas. A partir de hoy, entramos en el momento de la realización. El dinero aparece ahora o el colapso de Haití será irreversible.” Puntualizó el mandatario de República Dominicana.

            La realidad actual de esta nación se decanta en su total ingobernabilidad; es decir, hay gobierno provisional, después del asesinato de su último presidente, Jovenel Moïse, que es menos que nada, pues no gobierna, no puede gobernar y no lo dejan gobernar los delincuentes que pululan por las calles, que, dicho sea de paso, tampoco gobiernan porque esa no es su intención, sino la de crear mayor incertidumbre, peligrosidad y caos. Haití, en síntesis, es una nación que se enfila hacia el colapso total, una situación que se ha agravado mes a mes, día a día, desde el magnicidio contra el ex mandatario Moïse, cuando estaba en su casa de habitación en Puerto Príncipe, en el 2021, y fue ultimado a balazos por un comando de 28 sicarios, 24 de ellos ex paramilitares colombianos, pagados por alguien que todavía permanece en las sombras y cuya identidad no ha sido posible dilucidar por parte de las autoridades policiales. Moïse tenía 53 años de edad cuando fue asesinado, dormía al lado de su esposa, Martine, quien, “por arte de magia” fue respetada durante el atentado y no sufrió ni un rasguño por parte de los criminales. De acuerdo con la versión que brindó a los agentes investigadores, no le hicieron nada porque fingió que estaba muerta. En la actualidad, hay 11 individuos presos, incluyendo al empresario haitiano-chileno, Rodolphe Jaar, quien fue condenado a cadena perpetua en un tribunal de los Estados Unidos, por “conspirar para cometer asesinato o secuestro fuera de Estados Unidos y de brindar apoyo material con resultado de muerte.” Y es que, según el juez que lo envió a prisión, Jaar “fue responsable de proporcionar armas a los cómplices colombianos, para facilitar la realización de la operación (el atentado contra el ex mandatario Moïse).” Fue apresado en República Dominicana en enero del 2023 y aceptó viajar por voluntad propia a los Estados Unidos, donde se declaró culpable de la mencionada acusación; es decir, por brindar apoyo al comando que asesinó al entonces presidente haitiano. Desde el instante cuando se supo del magnicidio, Haití desembocó en el empeoramiento de su crisis social, delincuencial, política –amén de la económica, que ha sido su problema permanente-, y sangrienta, que al resto de la humanidad tiene profundamente conmovida.

            Esa misma situación sangrienta, ha desatado también una fuerte crisis diplomática con República Dominicana, cuyo gobierno ha exigido al haitiano que tome las medidas frente a las bandas criminales, exigencia que no ha podido cumplir, debido a la falta de recursos materiales y humanos que padece el Estado de Haití, su Poder Ejecutivo propiamente.

 

Paliativos ante el enorme caos…

 

            El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas dio un primer paso, aunque tímido: aprobó el año pasado una resolución para autorizar una misión multinacional de apoyo a la seguridad de Haití; no obstante, el presidente dominicano, Luis Abinader, denunció que “todo se ha quedado en palabras. El colapso de Haití sería una amenaza para nosotros y la región. Por eso, quiero advertir hoy a la comunidad internacional que República Dominicana luchará con todas sus fuerzas para evitar ser arrastrada al mismo abismo de Haití. ¡Evitemos que Haití acabe asolado por el caos y la anarquía; no permitamos que la crisis allí, se extienda por toda la región. La comunidad internacional no puede permitir que la tragedia haitiana continúe ni un solo día más.”

            El gobierno haitiano, por su parte, también ha dado pasos cortos en relación a la crisis que sufre el país y ha decretado un estado de emergencia y toque de queda nocturno, después de que unas 12 personas murieron cuando los pandilleros atacaron una penitenciaría, la más importante de la Capital, y permitieron la fuga masiva de presidiarios. En un comunicado gubernamental, se dio a conocer que “(el propósito) es restablecer el orden y tomar las medidas apropiadas para recuperar el control de la situación. Las fuerzas del orden han recibido el mandato de usar todos los medios legales a su disposición, para que se respete el alto al fuego y detener a los infractores.” Indicó la nota que fue firmada por Patrick Michel Boivert, el primer ministro interino, tras la ausencia del titular en ese cargo, Ariel Henry.

            El hecho del asalto a la cárcel se presentó cuando bandas armadas irrumpieron en el edificio penitenciario, fuertemente armadas, y permitieron la fuga de unos 3,600 reclusos, de un total de 3,696, que componían a la población carcelaria. Ya en las calles, aumentaron todavía más el caos reinante, la inseguridad y los actos delictivos. Incluso, dentro de la refriega que se dio en la prisión, fueron asesinados unos 12 reos y de los fugados, otros 15 ya han sido muertos en las vías públicas de Puerto Príncipe. Sus cuerpos han sido encontrados, esparcidos en varios puntos de esta ciudad Capital; y otros 10 estaban inertes en los alrededores de la penitenciaría asaltada. La explicación concedida por el gobierno a los periodistas, describió “el desenfreno de criminales fuertemente armados, que quieren a toda costa liberar a personas detenidas, sobre todo por secuestro, asesinato y otros delitos graves, y que no dudan en ejecutar a civiles y saquear bienes públicos y privados.”

            Un dato llamativo es el de los mercenarios colombianos que dieron muerte al anterior presidente de la República, Jovenel Moïse, quienes decidieron no escapar en medio del desorden causado por los pandilleros y se mantuvieron juntos, hasta que se restableció la calma. Uno de ellos relató a la prensa: “No me volé (huyó), porque no debo nada. Estoy viviendo un karma, solamente Dios sabe lo que estoy viviendo y lo que me ha tocado vivir. No me volé –repitió-, porque no debo nada y aquí estoy dando la cara porque soy inocente, soy inocente ante el mundo. Así que no debo nada. Estoy acá en esta prisión, en este momento la prensa puede dar cuenta de cómo es este lugar. Soy inocente, yo a este lugar, Haití, vine con una propuesta de trabajo.” Así dijo Francisco Eladio Uribe, ex soldado de Colombia, supuestamente implicado en el magnicidio contra el ex gobernante haitiano.

            Por su parte, el gobierno colombiano pidió al de Haití, protección especial para esos 17 ciudadanos suyos y solicitó también que los prisioneros sean trasladados a otro penal, si lo hubiere, donde se les pueda ofrecer mayor seguridad. Mientras tanto, en las calles y avenidas de las principales ciudades haitianas, en especial la Capital, la violencia se desató y adquirió dimensiones nunca antes vistas. Incluso, uno de los líderes de las pandillas dijo que el objetivo que se han planteado es derrocar al actual primer ministro, Ariel Henry. Así según declaraciones suyas al diario local, Le Nouvelliste. Además del ataque a la prisión, los pandilleros han centrado sus ataques a lugares estratégicos como el aeropuerto internacional y edificios que pertenecen al gobierno. Una crónica aparecida en un diario español, relata así el clima subversivo que se vive en Haití en estos momentos: “Desde que comenzaron los disturbios (…), al menos cuatro policías han muerto y decenas de personas han resultado heridas en un país sumido en una grave crisis política, de seguridad y humanitaria. Desde el primer día de la crisis, se registra una violencia sin precedentes en Haití, marcada por el aumento de enfrentamientos entre la policía y las pandillas armadas, la intensificación de los tiroteos en los barrios y el incremento de muertos y heridos.”

            De toda esta barbarie que parecía no tener “pies ni cabeza”, esto es… un propósito, un objetivo claramente definido, ni un quién tampoco, que fuera “la persona pensante” que actuara en calidad de líder de las bandas delincuenciales, surgió de pronto la figura de Jimmy Cherizier “barbecue”, quien lidera a la coalición de pandillas, cuyo nombre es “Vivir Juntos.” Se trata, según fuentes policiales, de un individuo que ha obtenido gran poder sobre los pandilleros, fue policía en un pasado no muy lejano y él mismo ha pedido a los padres de familia no enviar a sus niños a las escuelas, para evitar ser masacrados en las calles. “¡No los envíen, para evitar daños colaterales!” Manifestó a los padres este nuevo cabecilla de los delincuentes. Por otra parte, “barbecue” insistió en que su propósito es derrocar al actual primer ministro, Ariel Henry, y no descansará hasta alcanzar la concreción de su plan. Actualmente, Henry se encuentra en Kenia, África, solicitando ayuda al gobierno de esa nación para atenuar la honda crisis que consume a Haití. Y, precisamente cuando su avión se elevó con destino a Nairobi, Kenia, la violencia se desató sin control alguno en Puerto Príncipe y otras poblaciones. “La batalla durará tanto como sea necesario –dijo ‘barbecue’-. Seguiremos luchando contra Ariel Henry.”

            Una vez en la nación africana, Henry firmó un acuerdo para enviar policías kenianos a la isla, en el marco de una misión internacional apoyada por las Naciones Unidas, para luchar contra la violencia de las bandas criminales. En concreto, el gobierno de Kenia liderará el despliegue de fuerzas que intentarán recuperar el control de la Capital haitiana; serán 1,000 policías quienes estarán al frente de la misión multinacional, que tendrá como único objetivo pacificar a Haití, su pueblo y capturar a los líderes pandilleros. El presidente de Kenia, William Ruto, dio a conocer el acuerdo con su contraparte haitiana, Ariel Henry: “Hoy (…) me complace informar que el primer ministro haitiano y yo, hemos sido testigos de la firma de este instrumento (el envío de efectivos policiales). También hemos discutido los próximos pasos para permitir la aceleración del despliegue, (porque) la paz en Haití es buena para el mundo en su conjunto. Aprovecho esta oportunidad para reiterar el compromiso de Kenia de contribuir al éxito de esta misión multinacional.” Afirmó.

            Con la rúbrica del documento que contiene el acuerdo bilateral haitiano/keniano, se cumple con el mandato del Consejo de Seguridad de la ONU, emitido en octubre del 2023, para enviar una misión de apoyo a la Policía Nacional de Haití, cuando los pandilleros controlan al 80 por ciento del país, en especial la Capital. Serán unos 2,600 efectivos policiales, los que viajarán al país caribeño y estarán compuestos por agentes del orden de Benín, Jamaica, Bahamas y Antigua y Bermuda. El financiamiento correrá a cargo de los Estados Unidos, Canadá y Francia y hasta el momento no ha sido efectivo en modo alguno, por la indolencia de esos tres gobiernos, a pesar que también fue un mandato de la ONU.

            Para finalizar, una descripción de lo que es esta nación caribeña, comparte la isla de La Española con la República Dominicana, tiene un tercio de ese territorio, una población de 11,724,764 habitantes; sus jóvenes tienen una edad promedia de 24,3 años y una esperanza de vida de 64,8 años. Es la nación más pobre de América, y según un informe del Banco Mundial del 2023, el 63 por ciento de los haitianos viviría con US$3,65 diarios; y al menos unos 5,2 millones de personas necesitan ahora mismo asistencia alimentaria y de vivienda, una cifra que aumentó un 20 por ciento desde el 2022. Cerca de la mitad de los haitianos mayores de 15 años, son analfabetos y solo el 50 por ciento de los niños habían completado la escuela primaria en el 2020, según datos Human Rights Watch. Haití fue la primera colonia en independizarse en América, en 1804, y, por aquel entonces, a cambio de la libertad de esta nación, el gobierno de Francia le impuso un arancel del 50 por ciento de reducción a las importaciones francesas y una indemnización de 150 millones de francos (unos US$1,000 millones de hoy en día), a cambio del reconocimiento diplomático de la nueva nación.

            Un dato increíble de asimilar en estos momentos, argumenta que una vez Haití fue una nación próspera, de las mejores en ese sentido de todo el continente americano; pero el mal manejo de sus finanzas y el saqueo constante de sus arcas públicas, por parte de sus distintos dictadores, postraron al país y lo condujeron a la situación imperante en la actualidad, entre otros aberrantes motivos.